Derbi madrileño entre un Madrid matemáticamente campeón de la Regular frente a un Estudiantes acuciado por las lesiones (fuera English y Germán Gabriel, tocado Granger) y agotando sus posibilidades de meterse en los play-off. Pese a que los blancos tienen la cabeza muy centrada en la Final Four, enfrentarse a los colegiales siempre es una híper motivación. Así comenzó un duelo en el que los madridistas demostraron su dominio en la pintura abriendo con 8-0 de parcial. Al chaparrón inicial de los merengues respondían los colegiales con la mortal muñeca de Kyle Kuric.

Los del Maeztu se repusieron a base de pundonor e igualaron el resultado. Primeras rotaciones en ambos conjuntos, y la cantera del Estu demostrando que está muy viva con la entrada de Nogueira y Fran Guerra. Paulatinamente, y aprovechando la superioridad blanca en los emparejamientos individuales, los pupilos de Laso se volvían a marchar en el marcador. Vidorreta pedía tiempo, demostrando su interés en amarrar el partido. El Madrid estaba destrozando al Estu en la pintura (16 puntos a 2), pero un afilado Kirksay y cía subsistían desde el perímetro. Cuarto de tirones y alta anotación que finalizó 29-18.

Gran equipo vs. gran cantera

La máquina de anotar de los blancos siguió funcionando a la perfección, y los triples del asesino Carroll y el Chacho Rodríguez ampliaron aún más las distancias. Muy fino el base canario, que afronta el final de temporada es un estado de forma pletórico. El grifo anotador de los merengues fluía, mientras que los colegiales comenzaban a tener problemas en las transiciones estáticas. Jóvenes promesas como Vicedo o Brizuela seguían entrando en pista, pero los merengues percutían cual martillo pilón. Con el misil de Llull desde el 6.75 y los libres transformados por Mirotic, el Madrid se ponía +15.

Muchas rotaciones en ambos conjuntos. El Madrid repartiendo minutos y protegiendo a los más cargados de cara al duelo primordial del viernes. El Estudiantes obligado por las lesiones y dando carta abierta a su magnífica cantera. Al entusiasmo de los chavales colegiales se sumaba la muñeca caliente de Kirksay, que no daba el partido por acabado. Sin embargo, los del Maeztu se estaban cargando de faltas y siempre terminaban el cuarto en el bonus. Justo sobre la bocina un clarividente Granger (que llegaba a los 19 puntos pese a estar tocado) enchufó un triple inmenso y a vestuarios con un contundente 50-38. Resultado muy favorable para los merengues, pero opciones de remontada.

Zarpazo blanco

Con el triple de Daniel Clark amanecía el tercer cuarto. Gracias a la canasta el Estudiantes bajaba de la barrera psicológica de los diez puntos. El acierto por ambos estaba por las nubes, una ensalada de tiros con canastas plásticas y bellos tiros a distancia. El Madrid estaba muy atento a las marcas defensivas, lo que le permitía robar una buena cantidad de balones y lanzar sus mortales contras. Laso ya había puesto en pista a sus doce jugadores, y cada uno de ellos había anotado, demostrando su nivel de concentración.

Los once rebotes en ataque de los merengues estaban dándoles segundas oportunidades e impidiendo a los colegiales dominar el ritmo del partido. Con distancias bastante significativas ambos conjuntos se liberaron en lo ofensivo y hubo un corre-calles durante minutos. El pase por la espalda de Rudy y la finalización con 2+1 de Mirotic pareció todo un alegato, casi una sentencia. La diferencia llegaba a un máxima de +21 y Rudy, Llull y Mirotic se iban al banquillo faltando más de 12 minutos para el final. Golpe en la mesa de los merengues y final de parcial con 75-55.

Relajación y maquillaje

El Estudiantes reaccionó un tanto con el partido prácticamente sentenciado. Se vieron los buenos movimientos de Nogueira en la pintura, un joven con físico portentoso y mucho futuro si le respetan las lesiones. Granger seguía firmando un partido soberbio y los minutos transcurrían con jugadas rápidas pero distancias todavía significativas. Con los titulares blancos en el banquillo y las defensas mucho más relajadas, Carroll sacó su metralleta a pasear y sumaba con facilidad pasmosa.

Final de jugadas vistosas y detalles importantes, como que el Madrid firmó un gran porcentaje de tiros libres, una de sus pesadillas durante la temporada y que puede ser clave en las eliminatorias. Clara superioridad de los blancos frente a un Estudiantes combativo pero tremendamente castigado por las lesiones. Final de 93-82, y los colegiales que dicen adiós a los play-off, pese a haber desarrollado una temporada notable. Por su parte, el Madrid sigue incrementando su inmensa marca en Regular (28-4) con la Final Four en mente.

Protagonistas

Magnífico partido de Nikola Mirotic (18 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias, 8/8 en libres, 9 faltas recibidas para 29 de valoración). El ala-pivot hispano-montenegrino volvió a dar una exhibición de talento y polivalencia superando a todos sus defensores. Nikola llega en un momento dulce de forma al final de campaña y su escaparate es cada vez más atractivo para la NBA. Carroll (13 puntos), Llull (12 puntos) y Espartaco Reyes (11 puntos, 7 rebotes) cierran la lista de destacados, en un partido completo y coral de los merengues donde todos sus jugadores de campo anotaron.

Por el Estudiantes brilló sobremanera Jayson Granger (22 puntos puntos, 3 asistencias para 22 de valoración). El base fue duda hasta última hora, pero demostró pundonor y calidad dándolo todo en medio del maremagnum de lesiones colegiales. También buen partido de Tariq Kirksay (15 puntos, 6 rebotes, 3/3 en triples para 16 de valoración), un auténtico microondas que puede destruir desde el perímetro y participa en defensa. Nogueira (9 puntos, 8 rebotes) y Daniel Clark (11 puntos, 6 rebotes) cierran la participación de un Estu con futuro.