Tras la dura derrota del Real Madrid en su primera final de Euroliga después de 18 años Pablo Laso ha querido, antes que nada, dar la enhorabuena a su rival: “Felicidades a Olympiacos. Han sido muy competitivos desde el inicio”.
El entrenador vasco ha confesado sin tapujos que “hoy nos sentimos como una mierda”, pero ha querido añadir que “tenemos que estar orgullosos de lo que ha hecho este equipo a lo largo de la competición”. Puede que sus palabras parezcan desalentadoras, pero todo lo contrario: “si hoy no nos sintiésemos como una mierda no seríamos ganadores”, ha explicado.
"Tenemos que estar orgullosos de lo que ha hecho este equipo esta temporada, yo lo estoy", Laso
"Cuando veo cómo queda el vestuario después del partido, me refuerza. Verlos tan jodidos demuestra que quieren seguir creciendo", ha afirmado Pablo Laso. Y es que desde los dos últimos minutos, ya se veían las caras de decepción en los jugadores blancos.
Debido a ello, Laso ha querido dejar muy clara la admiración y la confianza que tiene en sus hombres: “Creo en el baloncesto que hacemos. A muerte. Creo en los jugadores que tengo. Me siento muy rogulloso y espero que la gente se sienta orgullosa de estos jugadores, de lo que han transmitido por esta camiseta”.
A pesar de la derrota final, el Real Madrid salió muy fuerte en el primer cuarto, en el que anotó 27 puntos, pero el Olympiacos campeón volvió en el inicio del segundo. “La diferencia que teníamos en el primer cuarto no era tan grande, porque ellos fallaban todos los tiros y nosotros los metíamos. Grandes jugadores como Spanoulis desequilibran, ha anotado tres triles consecutivos”.
Sabe que “el Olympiacos ha sido merecedor de la victoria, porque ha sido mejor que nosotros, más acertado en los momentos clave” y que la "la ventaja en el primer cuarto viene muy bien al equipo contrario. Se quita toda la presión y puede cambiar el ritmo de partido con 30 minutos". Así ha sido. El ritmo de partido ha cambiado y la final de la han llevado los griegos.
La experiencia, un grado
Por su parte, Rudy Fernández ha asegurado que “tratamos de ser agresivos en este partido”, aunque el cambio sobrevino en el segundo cuarto: “ellos empezaron a penetrar más y empezamos a tener problemas de faltas. Funcionó para Olympiacos”.
El año pasado, los griegos fueron capaces de remontar 19 puntos para convertirse en campeones de Europa, por lo que no es de extrañar que Rudy haya destacado “la experiencia que tienen en este tipo de choques y situaciones”, algo “de lo que tenemos que aprender para la próxima temporada”, ha declarado el balear.