Primer partido de playoff entre un Madrid líder destacado de la regular (tremenda marca de 32-2), frente a un CAI Zaragoza que está desarrollando buen baloncesto bajo las órdenes del aplicado José Luis Abós. Por parte de los blancos causaba baja significativa Rudy Fernández (todavía recuperando su fractura en un dedo), junto a un Draper que tampoco llega para la serie. Por parte de los maños el reciente fichaje Elonu sustituía al lesionado Norel. Con esas premisas amanecía un duelo en el que los aragoneses comenzaron anotando con soltura y dominando ligeramente en el marcador.
Respondía el Madrid bombardeando desde el perímetro con los triples de Carroll y Llull. Buenos minutos del georgiano Sanikidze demostrando que tiene calidad en ambas pinturas. Tras el mate de Fontet entrando solo en la zona blanca, Pablo Laso tuvo que pedir tiempo muerto para exigir mayor intensidad a los suyos. La entrada en pista de la primera unidad abanderada por el capitán Felipe Reyes reactivó a los merengues. Gracias a su magnífica actuación (concatenó seis puntos consecutivos) el Madrid terminó venciendo el competido primer cuarto 19-18.
Intensa lucha
En el segundo parcial los blancos recrudecieron la defensa y empezaron a secar el grifo anotador de los maños. Espartaco Reyes seguía imperial en los minutos que permanecía en pista, llegando a diez puntos sin fallo en el tiro. Pese a abrir una ligera diferencia, los maños respondieron con el plástico alley-oop entre Llompart y un Sanikidze que estaba solo. De manera mecánica Laso pidió otro tiempo y además de marcar jugadas les gritó enérgico: "rápido volviendo en los ataques, coño".
Minutos de malos porcentajes de tiro y ambos conjuntos cargándose de faltas, por lo que llegaban al bonus de personales. Los zaragozanos concatenaron un parcial de 9-0 cerrado por el triple del cañonero Michael Roll, por lo que la ventaja madridista se esfumó. De nuevo los blancos tuvieron que apretar en defensa para forzar malos lanzamientos de los maños y poder salir a la contra. Los tiros libres ayudaron mucho (10 por tan solo 2 del CAI) a que los madridistas pudieran culminar la primera mitad con ventaja de 39-33. Partido aún abierto.
Sufrida victoria
La segunda parte amaneció con gran cantidad de tiros fallados por los dos equipos. El electrónico permaneció clavado durante varios minutos, hasta que los puntos en la pintura de Bourousis y el triple de Darden obligaron a José Luis Abós a parar el encuentro. Los maños estaban ciegos desde la larga distancia (1/10 en triples), por lo que la ventaja madridista llegó por vez primera a la barrera psicológica de los diez puntos. El CAI intentó frenar la sangría cambiando a una zona 3-2, pero el Chacho estaba en pista y leía a la perfección las carencias de la defensa rival al tiempo que enchufaba desde el 6.75. Un último apretón de los zaragozanos (parcial de 0-7) dejó el tercer cuarto en 55-48 dando emoción aún al partido.
Importante la empanada blanca durante varios minutos, mientras que los maños seguían ampliando su parcial y las distancias se reducían sobremanera. El Madrid había bajado la intensidad de manera preocupante y tuvo que salir desde el banquillo el eterno Felipe Reyes para volver a encontrarle el pulso a su equipo. El CAI presentó batalla, pero los dos triples consecutivos de Llull hicieron sangre. Sin demasiado brillo, pero demostrando que tienen más potencia de fuego, los blancos se llevaron el duelo por 78-70. Importante victoria que pone el 1-0 en una serie corta tan sólo a tres partidos.
Protagonistas
El mejor del duelo fue un espléndido Felipe Reyes (18 puntos, 6 rebotes, 6/8 en tiros de campo, 6/8 en libres, 4 faltas recibidas, 22 de valoración). Un vez más Espartaco dio una lección de esfuerzo y calidad, partiéndose la cara en la zona, recuperando sensaciones cuando los compañeros estaban más apáticos y corroborando que tiene una muñeca cada vez más fiable.
Le secundaron con brillantez Sergio Llull (16 puntos, 5 asistencias, 3 robos, 4/9 en triples), Ioannis Bourousis (11 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias) y Nikola Mirotic (9 puntos, 7 rebotes, 4 faltas recibidas), muy serios en sus respectivas facetas y dando un plus de calidad que les permitió superar a sus defensores en los momentos clave.
Por el meritorio CAI Zaragoza subrayar sobremanera el gran partido de Victor Sanikidze (12 puntos, 13 rebotes, 3 robos, 3 tapones, 5 faltas recibidas, 27 de valoración). Rasputin hizo un partido totalmente completo y brillante, demostrando que destila calidad por los cuatro costados. En segundo plano nombrar al cañonero Michael Rooll (13 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias) y el pívot Joseph Jones (13 puntos), que dieron buenas pinceladas pero no remataron el lienzo.