Real Madrid y Joventut de Badalona tratarán de conseguir su tercera victoria en la Liga Endesa este domingo, en un duelo al que ambos llegan en circunstancias diferentes. El conjunto blanco llegará a la cita con poco descanso, tras su debut el viernes en Euroliga ante el Zalgiris Kaunas. Por su parte, los de Salva Maldonado han tenido toda la semana para preparar el duelo, que abordarán con mucha confianza por haber conseguido dos victorias en las dos jornadas que se han disputado hasta el momento.
El Joventut ha perdido en sus últimas ocho visitas a Madrid
El club verdinegro lleva seis temporadas sin llevarse la victoria del feudo blanco. La última fue el 17 de abril de 2008, cuando Ricky, Mallet y el ahora madridista Rudy Fernández sorprendieron al equipo entonces entrenado por Joan Plaza. La temporada pasada el Real Madrid superó al Joventut por 106 - 88 y los hombres más destacados fueron Sergio Rodríguez y Jaycee Carroll con 18 puntos cada uno.
Veteranía y juventud
El Real Madrid ha cambiado de estilo esta temporada o al menos eso dejan entrever sus nuevos fichajes y los partidos disputados hasta la fecha. Tras los durísimos varapalos sufridos en las dos últimas Euroligas, el Madrid ha apostado por un equipo de presente para conseguir éxitos a corto plazo. Y el objetivo está claro, ganar la Final Four, que encima este año tendrá el aliciente de disputarse en el Palacio de los Deportes. Para ello el club se ha movido mucho por el mercado este verano, fichando a jugadores veteranos y con mucha experiencia en la alta competición como Andrés Nocioni, Gustavo Ayón o Jonas Maciulis, que unidos a Felipe Reyes, Bourousis o Rudy conseguirán que el Madrid tenga un plus extra de competitividad de cara a las grandes finales.
Por su parte, el Joventut es una de las canteras más potentes de España, por ello siempre cuenta con varios jugadores muy jóvenes en el primer equipo. Este año Álex Suárez, Barrera o Ventura abanderarán la cantera verdinegra, que ha visto como uno de sus mayores talentos de los últimos años, Guillem Vives, se ha marchado al Valencia Basket. Sin embargo, esta campaña el Joventut ha apostado por un equipo más experimentado y rocoso, ya que a los veteranos Kirksay, Savané o Miralles se han sumado las incorporaciones de Vidal y Mallet dos jugadores que además ya habían militado en el equipo badalonés temporadas atrás.
A seguir sumando victorias
Ambos equipos han conseguido llevarse la victoria en las dos primeras jornadas, pero ninguno de los dos ha alcanzado todavía su mejor juego. El Real Madrid venció en su debut al Herbalife Gran Canaria en un partido gris y con pocos puntos, y en la segunda jornada se llevó la victoria de San Sebastián al superar al Gipuzkoa Basket. En ambos partidos se ha visto a un Real Madrid mucho menos vistoso que en temporadas anteriores, con un juego menos fluido y mucha más intensidad defensiva, sobre todo bajo los aros.
Mientras, el Joventut ha hecho sus deberes al ganar también sus dos partidos, pero ha vencido en los dos por tan solo cinco puntos de diferencia, por lo que deberá mejorar en Madrid si pretende meter en problemas al equipo de Pablo Laso. En su victoria más reciente ante el Estudiantes mostraron un pobre acierto desde el tiro exterior que deberán mejorar. Y más aún si se tiene en cuenta su clara inferioridad en el juego interior, escaso de centímetros y donde no podrán contar con Nacho Llovet, baja por una contusión en el muslo de su pierna derecha que le ha impedido debutar en la competición.
Jugadores a seguir
Sergio Rodríguez es uno de los referentes del Real Madrid una temporada más. Además, su importancia aumentará este año al tener un equipo menos talentoso, por lo que él debe dar un paso al frente y volver a rendir a su mejor nivel, como ya hiciera la temporada pasada. Su duelo con Demond Mallet puede resultar muy interesante ya que se trata de dos bases de mucha calidad y capacidad anotadora.
Sergi Vidal vivirá un partido especial al volver a jugar contra su ex-equipo. Para el veterano alero catalán siempre es un aliciente visitar el Palacio de los Deportes, ya que allí no pudo mostrar su mejor baloncesto por la escasez de minutos de los que disponía. Su motivación será muy grande y su intensidad defensiva puede ser decisiva para frenar a los Rudy, Carroll y compañía.