Es oficial, Kelvin Creswell Rivers (Charlotte, USA, 1987) ya es nuevo jugador del Bayern Munich. Ha sido presentado con la casaca roja de los bávaros, donde permanecerá seguro la presente campaña. El alero ha firmado por un año con un club que le satisface en sus condiciones económicas, y que además pertenece a una liga en evolución. Por si fuera poco volverá a jugar la Euroliga (una de sus principales metas). La suerte ha sido caprichosa y en breve se enfrentará a sus ex-compañeros del Madrid, puesto que están encuadrados en el mismo primer grupo de la fase inicial.

Rivers había llegado a un acuerdo de renovación con los merengues hace apenas un mes y medio. Todo estaba cerrado para ampliarle el contrato dos años más. De hecho, había convencido mucho a Pablo Laso y la directiva. Sin embargo, una circular del Consejo Superior de Deportes, emitida poco antes de que terminara la Liga Endesa, dejaba claro que no se tendrían como comunitarios a los jugadores con pasaporte Cotonou si estos no demostraban arraigo familiar o cultural con el país, o habían disputado partidos con su selección. Rivers no pasó el corte.

Selección natural

En la presente plantilla de los merengues ya cuentan como extranjeros Gustavo Ayón (fichaje estrella de la pasada campaña y que evidentemente va a seguir siendo clave), y Trey Thompkins (fichaje más descado de la presente). Ello cerraba las puertas a poder jugar Liga o Euroliga a Rivers, Slaughter y Campazzo (todavía pendiente de gestionar su pasaporte italo-argentino). Precisamente por esto, han sido tres de los jugadores que han salido del equipo.

Rivers ha sido un hombre importante en los cuatro títulos. Ha ido de menos a más en la campaña más exitosa en la historia de los blancos. Empezó teniendo pocos minutos y mostrándose muy irregular en los tiros. Se cargaba de faltas cuando le tocaba defender y parecía que la rápida estrategia de rotaciones de Laso le afectaba. Sin embargo, fue encontrando su sitio, y sus valiosos puntos en la Final Four y la fase de playoff de la Liga han sido claves. Se puede afirmar que debido a su polivalencia y sintonía con el equipo en tan sólo un año, el Madrid le echará de menos.

Su nuevo destino

En el Bayern están como locos por la llegada de Rivers. Que un jugador de esa calidad, y con un pasado reciente tan brillante, quede libre y disponible en el mercado era toda una golosina. Por ello han pujado fuerte por él, y aunque le han fichado por una única temporada, la cuantía es alta y la posibilidad de renovación es automática según rendimiento y objetivos.

Un ejemplo de esta algarabía por adquirirle la ha mostrado abiertamente el entrenador balcánico del equipo alemán, el veterano Svetislav Pesic: "Podremos distribuir en más hombros la doble carga con la liga alemana y la Euroliga. El club tiene muchos partidos importantes entre octubre, noviembre y diciembre, K.C. es el complemento perfecto y el hecho de que estuviera sin equipo ha sido un verdadero golpe de suerte".

Por su parte, el propio alero de Charlotte compartía opiniones sobre su cambio de aires: "Estoy contento de estar en Munich. La posibilidad de poder jugar de nuevo a alto nivel con un equipo en la Euroliga era tentador".
 

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