Derbi madrileño con mucha historia de fondo. Laso se enfrentaba al que durante años ha sido su segundo al mando, un Jota Cuspineda que ahora es primer entrenador de los fuenlabreños. Los blancos terceros en la Liga y los naranjas (este año de verde en casa) muy cerca de meterse en la Copa del Rey. Rudy y Llull bajas por los merengues y Scott por los locales. En el quinteto blanco salía de inicio Hernangómez, dando descanso a Ayón. Buen intercambio inicial de canastas, con el Madrid buscando al hombre libre y los locales enchufando desde el perímetro con los triples de Jonathan Tabu y Paunic.
Entraba en escena un Marko Popovic en magnífico estado de forma, que veía aro desde el 6-75 para poner a los fuenlabreños por vez primera por encima en el marcador. Gran reacción de los locales, y tiempo muerto del Madrid. Intercambio de golpes en las siguientes transiciones. Paunic seguía encontrando el aro merengue, pero respondía un Sergio Rodríguez especialmente afilado en los tiros de larga y entrando en la zona rival cual cuchillo en mantequilla. Final del primer cuarto con total igualdad (22-22).
Pulso en todo lo alto
Primeros cambios en el partido. Por los madridistas entraban en cancha tres genios como Nocioci, Carroll y Ayón. Cada uno de ellos aportaron en sus respectivas facetas, dando una calidad extra a los blancos, por lo que los visitantes abrían ligera ventaja. Pero Ricardo Úriz permanecía intenso, y mantenía el Fuenlabrada en la pomada. Partido intenso, de defensas bien trazadas y mucha intensidad en la lucha por el rebote. Una dura batalla que se marcaba en el electrónico con la gran igualdad entre ambos conjuntos.
Más recambios por ambos bandos, y aunque los merengues imponían ventaja, el Montaktit nunca perdía la cara al partido. De hecho, tres pérdidas casi consecutivas de los pupilos de Laso, sumadas al gran triple desde la esquina de Llorca apretaba el duelo sobremanera. Se calentaba el enfrentamiento con marcas muy intensas por los dos bandos. Popovic era la estrella de los locales con otro triple asesino. Parcial de 11-1 para el Fuenla y tiempo muerto de Laso. Para romper la deriva negativa, llegaron los puntos desde el pick&roll de Sergio Rodríguez y Ayón. Un auténtico festival de juego ofensivo que culminó en su primera parte con 47-49.
El Fuenla aprieta las tuercas
Ambos conjuntos querían correr la pista tras la reanudación. Carrusel de rápidas posesiones y muchos fallos en el tiro, hasta que Marko Popovic anotaba desde el perímetro. Ello, sumado al ímpetu de un Paunovic que percutía desde la zona, le daba la ventaja al Fuenlabrada. No asumían bien el cambio en el rumbo del duelo los blancos, y le caía la técnica a un desesperado Jaycee Carroll. Se repartía de todo menos caramelos en la pintura, donde Maurice Ndour ponía un tapón imperial. A Ayón le hacían continuos dos contra uno, pero sabía doblar balones para que el senegalés Ndour terminara la jugada,
Duelo realmente caliente, con los de Cuspineda dándolo todo y leyendo con lógica cada ataque, terminados con Paunic y Sobin especialmente calientes en la corta distancia. El Madrid estaba cometiendo una cantidad absurda de pérdidas de balón (hasta nueve en el tercer parcial), por lo que los fuenlabreños se sentían cómodos en pista. El triple de Nocioni le daba algo de respiro a los merengues, pero respondía de inmediato el californiano David Wear. En cada defensa al hombre de los locales saltaban chispas, y encontraban faltas en ataque, como la señalada al Chacho. Final del tercer cuarto 68-62. Gran trabajo del Fuenla.
Un final de película
El Madrid contra las cuerdas al comienzo del último parcial. Los de Laso estaban sufriendo la asfixiante defensa de los fuenlabreños, y no pudiendo responder a los tiros exteriores rivales, como los de un Sobin imparable. Andrés Nocioni llegaba al rescate de los blancos, demostrando su inmensa calidad. El triple de Jonas Maciulis apretaba aún más el disputado duelo, dejando a los dos conjuntos en una luchada igualdad, por los que Jota Cuspineda pedía tiempo. Momentos de la verdad y todo en un pañuelo.
Los últimos minutos fueron de infarto. Con Sobin machacando la zona merengue con enorme efectividad en los tiros. Pero con las eternas leyendas del Madrid respondiendo, como el triple de casta del Sergio Rodríguez. Una jugada clave fue el encontronazo entre Nocioni y Wear, que acabó con el americano en el suelo. Chapu le tocó la nariz con el codo, pero no se pitó falta. Espoleados por la jugada llegó el triple de Urtasun que ponía a los locales por delante cuando restaban segundos. Y tras un carrusel de tiros libres los fuenlabreños se llevaron la agónica victoria entre la algarabía de su público. Triunfo del Fuenlabrada (91-85).
Protagonistas
El mejor el duelo fue el croata Josip Sobin (24 puntos, 12/13 en tiros de dos, tres faltas recibidas, 22 de valoración). Absolutamente imparable en su faceta ofensiva, fue un martillo pilón que percutió contra la zona merengue sin piedad. Le secundaron Ivan Paunic (18 puntos, tres rebotes, tres asistencias, 5/9 en tiros de dos), que fue una roca en el balance ataque-defensa, y el veterano Marko Popovic (15 puntos, tres rebotes, siete asistencias, 6/7 en libres, 20 de valoración), que mantuvo a los suyos a base de calidad.
Por un Madrid competitivo, pero cansado y desdibujado en los compases finales destacar al actuación de Andrés Nocioni (21 puntos, 5/7 en triples, 22 de valoración), que entró en erupción en los compases finales buscando la remontada de los suyos. En segundo plano Gustavo Ayón (16 puntos, cinco rebotes, dos asistencias, 6/6 en tiros de dos, 4/5 en libres, 24 de valoración), que intentó descansar y pese a su excelso trabajo no pudo afianzar la victoria merengue.