Primera oportunidad para que los amarillos puedan vengarse por la derrota en la Copa del Rey. Después de la espectacular actuación de los de Aíto García Reneses en el evento disputado en A Coruña y su eliminación en la final ante el Madrid, toca centrarse de nuevo en la Liga Endesa, aunque este partido tiene un aroma distinto.

Encuentro que se celebra en el Gran Canaria Arena, la afición pío pío recibirán a los merengues con todas sus energías. En juego, el asegurarse un buen puesto de Playoffs, pero sin duda lo importante es todo lo que hay detrás del partido.

Un partido de Liga con aroma de Playoffs

Dos equipos que se conocen muy bien y se respetan mucho. El encuentro es más que un partido de temporada regular y su ambiente será completamente de Playoffs. Ambos conjuntos tienen sus objetivos muy claros y a medida que se acerca el final de temporada los fallos salen más caros

Desde que Pablo Laso es entrenador del Real Madrid, el Herbalife no ha conseguido vencer a los blancos. Esa losa quieren levantarla y los amarillos se conjuran en su fortín para derrotar a un equipo irregular y con muchos kilómetros a sus espaldas. El cansancio puede ser una de las claves y, con un ritmo alto de partido y un juego físico, el Gran Canaria puede dejar al Madrid aún más tocado.

Un Granca fuerte y con los deberes hechos

Si uno de los dos equipos llega mejor preparado al partido ese es el Herbalife Gran Canaria. Los de Aíto solo tienen por delante en Liga Endesa a los equipos élite de la competición, como Barcelona, Valencia, Madrid y Laboral; en Copa del Rey llegaron de forma sorprendente a la final; y ya están clasificados para los cuartos de la Eurocup, donde se medirán al Stelmet Zielona Gora polaco. Cierto es que por calidad y talento no hay parangón entre la plantilla blanca y la amarilla, pero el Herbalife llega fuerte, con confianza y con sed de venganza.

En cambio el Real Madrid sigue a trompicones. En Liga ganaron la semana pasada al Valencia con el espectacular tiro de Sergio Llull que ha dado la vuelta al mundo, pero siguen teniendo a taronjas y culés por delante y el final de temporada está cada día más cerca. En Euroliga cayeron contra el CSKA en casa y con un balance de 5-4 su clasificación aún no está, ni mucho menos, garantizada. A pesar de todo esto, el Real Madrid todavía no ha fallado en las grandes citas, como cuando tuvo que salvar los muebles en la primera fase de competición continental o en la Copa del Rey. Irregulares, sí, pero son los campeones.

El propio García Reneses ha destacado en la previa del partido que saben y conocen a este Real Madrid. Toda la plantilla tiene muy claro que el partido debe ser perfecto para vencer al Madrid y que el efecto pío pío de la grada será clave.

Antecedentes

La última victoria del Gran Canaria ante el Real Madrid fue hace casi diez años, exactamente el 10 de marzo de 2007. Desde que Laso está al frente del vestuario merengue los isleños no conocen la victoria contra los de la capital, pero dicha tendencia viene de antes.

Desde que empezarán a enfrentarse en la liga regular de la temporada 1991/1992, de 48 encuentros el Madrid ha ganado 35, dejando tan solo 13 victorias al Granca. De las victorias del Herbalife, 8 llegaron como locales y 5 como visitantes. La balanza, poco equilibrada, no refleja la gran temporada de los amarillos, que sin duda están en uno de los mejores momentos de su historia.

Jugadores a seguir

El Gran Canaria vigilará ante todo a dos nombres, Sergio Llull y Gustavo Ayón. Los dos jugadores más en forma del Real Madrid y, junto al Chacho Rodríguez, de quienes más dependen a la hora de la ofensiva. El base y el pívot llevarán el peso del ataque sobre sus hombros, pero las actuaciones de jugadores como Andrés Nocioni, que se salió ante el Valencia, Augusto Lima como protector del aro y suplente de Ayón, o Jonas Maciulis se antojan fundamentales y Laso les pondrá muchos minutos en pista.

Por su parte, Aíto sabe lo que funciona contra el Real y son otros dos nombres los que resaltan: Albert Oliver y Eulis Báez. El veterano base dirigirá al equipo cuando no esté el joven Kevin Pangos y, si el canadiense no está acertado, el español verá más minutos, sobre todo en los momentos decisivos. Báez, por su parte, ya hizo daño a los merengues con su juego físico e intenso, que se combina con rango de tiro de tres. El trabajo de Alen Omic en la pintura y el acierto de exteriores como Xabi Rabaseda o Sasu Salin será vital para la venganza amarilla.

Fotos del texto: ACB