El Valencia Basket logra la victoria en la pista del París Levallois en un choque que no tuvo demasiada historia. Pese a que el partido empezó con los dos equipos desconectados, pronto Van Rossom y Lafayette enchufaron a los valencianos para que se marcharan con tranquilidad al descanso. Tras el mismo, los franceses tiraron de orgullo y lograron bajar la renta a 7 tantos mediado el tercer cuarto, pero de nuevo, Lafayette, esta vez ayudado por Aguilar y Dubljevic, sellaban la el primer triunfo del curso 2013/14.

La andadura europea arrancaba con triple de Sam Van Rossom, pero el rimo era lento y los dos equipos empezaban desacertados en el tiro. Valencia no encontraba a su juego interior por tanto debía abusar del tiro exterior. Un arma que comenzó a funcionar puesto que Van Rossom pronto lograba un nuevo tiro de 3 puntos. Los franceses sin muchas ideas, intentaban hacer daño y no perder comba con un 2+1 de Anagonye. Pese a ello la defensa asfixiante del Valencia hacia estragos en el equipo parisino, y todavía con mayor efecto con la salida de Lischuk y Lafayette, uno dando estabilidad interior y el otro, aportando físico exterior junto con Sato.

Lafayette afinó la escopeta exterior

La salida del americano supuso el punto de inflexión en el partido. Las ayudas defensivas provocaban que los franceses no tuvieran ninguna opción exterior, y luego con 2 triples casi consecutivos de Lafayette cortaban la posible reacción francesa poniendo la diferencia en 7 puntos. Con el segundo cuarto Albicy intentaba meter de nuevo a los suyos en el partido, sin embargo, cada vez que el equipo local lograba algo positivo, Lafayette de nuevo respondía a base de triples. La entrada de Dubljevic fue clave para mantener el ritmo, Oniague era entonces el encargado de mantener la bandera francesa en pie, pero nada mas lejos de la realidad, Van Rossom cerraba la primera mitad como había comenzado con un triple que dejaba la contienda en (29-45).

El descanso despertó a los franceses

Sane con 2 triples tras la reanudación hacía presagiar el bache que el equipo valenciano iba a pasar en el tercer periodo. Oniague y Sane aprovechaban la caraja visitante y con un parcial de (11-2) se metían de nuevo en el partido. La defensa de Velimir Perasovic decaía y las alarmas volvían a sonar como ocurriera en el Palau Blaugrana en el partido de liga. Dubljevic, que sumaba puntos con sigilo, cortaba ese parcial negativo antes del último cuarto.

Lafayette volvía par a dar la puntilla al partido

Los 10 minutos postreros del encuentro tendrían un nombre propio: Oliver Lafayette. Y es que el jugador que ya había catapultado a los suyos en la primera mitad, volvía ahora a su estado de gracia para culminar la primera victoria naranja del curso y de la competición europea. Lafayette marcaba el camino a base de tiros exteriores, aunque ayudado de Aguilar y Rafa Martínez que seguían aumentando la distancia. Solo Ewing con algún momento de lucidez daba la cara en un equipo que ya había alzado la bandera blanca hacía unos minutos. Los instantes finales sirvieron para perfilar el marcador con un festival visitante que dejaba el (68-85 )a la conclusión.