La temporada 2010/2011 pasaba a la historia como la primera que disputaban juntos en Miami Dwyane Wade, Chris Bosh y LeBron James. Un “Big Three” de ensueño que alcanzaba las Finales en su primer año, pero que terminaban cayendo ante los Mavericks de Nowizki por 4 - 2.

En la repetición de las Finales de 2006, los de Dallas se vengaban de los Heat y lograban el primer título de su historia, con el alemán de MVP. El bloque y la veteranía habían ganado a las individualidades y veteranos como Peja Stojakovic y Jason Kidd, podían presumir por fin de anillo tras una larga carrera en la NBA.

Los Heat, a por el primer título con el “Big Three”

Desde el anillo de 2006, los Heat navegaron sin rumbo, perdidos en un mar de dudas en el que Dwyane Wade era la única luz que señalaba el camino. Llegaba el verano de 2010, y tanto Wade como otras estrellas como LeBron y Bosh terminaban sus respectivos contratos. Los tres acordaron jugar juntos y terminaron firmando por los Heat. Su intención era crear una dinastía y ganar “no uno, no dos, no tres, no cuatro, no cinco, no seis, no siete…” títulos, según LeBron. A ellos se iban a unir en Miami otros jugadores como James Jones, Eddie House, Zydrunas Ilgauskas o Mike Miller.

Foto: bleacherreport.com

La temporada comenzaba con muchas dudas; el equipo arrancaba la liga regular con varias derrotas en los primeros encuentros. El récord al final del primer mes era de solo 9 victorias y 8 derrotas. El puesto de Erik Spoelstra peligraba y se rumoreaba la posibilidad de que Pat Riley asumiera las riendas del equipo como en 2006, cuando reemplazó a Stan Van Gundy con éxito. Tras cinco derrotas seguidas, tuvo lugar una reunión privada entre los jugadores. Después de esta charla, los Heat firmaron 12 victorias consecutivas y acabaron mejorando su imagen.

Llegaron refuerzos como Mike Bibby o Erick Dampier y a finales de temporada regular, los Heat acumulaban 58 victorias. Con el segundo mejor récord de la Conferencia Este tras los Bulls de Derrick Rose, los de South Beach afrontaban los Playoffs en busca del anillo sin complejos, pese a las críticas que les rodeaban continuamente. Muchos dudaban de sus posibilidades, ya que al mal juego se sumaban los malos resultados contra los mejores récords de la NBA.

El primer rival eran los Sixers de Philadelphia. Los de Doug Collins no eran rival y solo eran capaces de “robarle” a los Heat una victoria. Tras el 4 - 1, llegaba la prueba de fuego seria contra los Celtics, actuales subcampeones.

Wade y LeBron lideraron a su equipo al 2 - 0 en casa, con el factor cancha a favor. Los Celtics mostraron su orgullo y ganaron el tercero en el Garden, pero James anotaba 35 puntos y capturaba 14 rebotes en el cuarto para volver a Miami con el 3 - 1. LeBron nunca había eliminado a los Celtics y afrontaba la serie como “algo personal”. Pese a ganar 4 - 1 los duelos directos en temporada regular, los de Boston caían ahora por mismo resultado ante unos Heat que llegaban lanzados a por el título.

Los jóvenes Bulls de Rose eran el último obstáculo antes de las Finales. Los de Chicago llegaban con el mejor récord en temporada regular y Rose, con el premio de MVP. El equipo dirigido por Thibodeau ganaba el primer encuentro de la serie, pero los Heat respondían con cuatro victorias seguidas. Para la historia, los 12 puntos remontados en menos de tres minutos en el quinto partido. Los Bulls perdían cuatro partidos consecutivos por primera vez en toda la temporada y se quedaban fuera de las séptimas finales de su historia. Los Heat regresaban cinco años después.

Nuevo intento para Nowizki y los Mavericks

Al igual que los Heat, los Mavericks afrontaron una reconstrucción para volver a unas Finales tras las de 2006. Varios secundarios como Devin Harris o Josh Howard se marcharon y Mark Cuban se traía a Dallas a Jason Kidd, Tyson Chandler, Shawn Marion o Peja Stojakovic. El dinero no era un problema, ganar el título, una obligación.

Tras dos nuevos fracasos en los Playoffs, el más sonado, el de 2007 contra los Warriors, Cuban prescindía de Avery Johnson e incorporaba a Rick Carlisle como entrenador en 2008.

Los Mavericks comenzaban la temporada en un segundo plano en la lista de favoritos. En el Oeste, los Lakers iban a por su tercer título consecutivo, y las únicas alternativas parecían los Thunder o los Spurs. Los de Dallas iban de menos a más en la liga regular, y terminaban con 57 victorias, tercer récord del oeste tras Spurs y Lakers.

Llegados los Playoffs, los de Popovich se quedaban en el camino después de ser eliminados por los Grizzlies. Los Lakers pasaban a semifinales con dudas, por lo que los Mavericks no podían fallar. Contra los Blazers de Brandon Roy y LaMarcus Aldridge llegaban 2 - 0 a Portland. Los de McMillan ganaban el tercero antes de un cuarto partido histórico. Los Mavs ganaban por 18 al principio del último cuarto (49 - 67), pero 18 puntos de Roy y un desastroso cuarto del equipo de Dallas, provocaba la remontada de los locales (84 - 82). Desde ese día, los Mavericks darían un giro de 180 grados y serían un gran aspirante al título.

El camino comenzaba en el quinto partido contra los Blazers. Los Mavericks ganaban ese partido y el sexto y avanzaban a las Semifinales del Oeste contra los Lakers. Los angelinos, a pesar de haber realizado una buena temporada y de haber ganado los dos últimos campeonatos, eran arrollados 4 - 0 por los tejanos en una de las series más inesperadas de la historia. Con una superioridad abismal, los Mavericks ganaban a los Lakers 122 - 86 con 20 triples anotados, igualando el récord de la liga. Phil Jackson se retiraba de los banquillos de la manera más triste.

Clasificados para las Finales del Oeste, los Mavericks esperaban rival del Thunder - Grizzlies, que había llegado al séptimo. Los de Oklahoma ganaban y eran su rival. Tras ganar 4 - 0 a los californianos, los de Scott Brooks tampoco opusieron mayor resistencia. Los Thunder ganaban el segundo en Dallas, pero los de Rick Carlisle respondían con tres triunfos seguidos, incluidos los dos de Oklahoma City. Con un juego ofensivo demoledor y una defensa infranquable, los Mavericks regresaban a las Finales cinco años después, y de nuevo contra los Heat.

Los Mavs, muy superiores al “Big Three”

Los Mavericks no tenían el factor cancha a su favor, pero poco tardaron en hacerse con él. Los Heat tomaron la delantera en el primer partido. LeBron y Wade se combinaron en ataque para remontar una desventaja de ocho puntos en el tercer cuarto. Por su parte, los de Dallas temieron por Nowitzki, que sufrió una lesión en el dedo.

Sin embargo, en el segundo partido fueron los Mavericks los que iban a remontar 15 puntos de diferencia. Nowiztki, lesionado, anotaba una bandeja con la izquierda a 3,6 segundos del final que daba la victoria a los tejanos e igualaba la serie antes de marcharse a Dallas.

Los Mavericks volvían a recuperar una importante desventaja en el tercer partido. Pero LeBron asistió a Bosh para que anotara una suspensión a 39 segundos para el final que colocaba a los Heat dos arriba. Nowizki falló en la réplica y no pudo forzar la prórroga. Los de Miami se volvían a adelantar 2 - 1, pero esa iba a ser su última victoria en las Finales.

En el quinto encuentro, los Heat vieron como los Mavs les remontaban de nuevo nueve puntos en el último cuarto, tras desperdiciar el 65 - 74 a principios de último cuarto. Nowizki y Terry colocaban a su equipo tres arriba a nueve segundos del final. Miller dispuso de un triple sobre la bocina para igualar, pero no tocaba aro y los Mavericks empataban a 2. LeBron se había quedado en solo ocho puntos.

Los Mavericks se hacían con el “match ball” tras ganar de nuevo el quinto partido, con una gran actuación de Terry, Kidd, Nowitzki en los minutos decisivos, yaque el encuentro llegó igualado a los instantes finales. Dos triples de Kidd y Terry y dos acciones defensivas de Chandler, dejaban el título en bandeja para los tejanos.

La serie regresaba a Florida, y los Heat iban a jugar con la obligación de ganar ambos. Pero los Mavericks volvieron a ser mejores y ganaron el sexto en una nueva remontada tras el inicio trepidante de LeBron y compañía. Los de Dallas se hicieron una ventaja de 12 puntos en el inicio de último cuarto, que acabaría siendo definitiva. Nowizki, MVP de las Finales, sentenciaba el partido y ganaba el primer título de su carrera. Lo mismo pasaba con la franquicia y el resto de componentes de la plantilla, que estrenaban su palmarés.

Un año más de espera para LeBron

Los Heat tendrían que esperar solo un año para volver a las Finales. Con refuerzos como Shane Battier, ahora sí LeBron y el “Big Three” se enfundaban su primer anillo tras ganarle las Finales a los Thunde, para repetir éxito de nuevo en 2013 contra los Spurs.

Los Mavericks perdían a Chandler, Barea y Stojakovic y los refuerzos como Odom y Carter no iban a funcionar. El equipo se quedaría fuera de los Playoffs en primera ronda en 2012 y 2014 y en 2013, ni siquiera accedería a la postemporada. Cuban quiere seguir invirtiendo para darle a Nowitzki y a la franquicia el segundo título.