La racha triunfal de los Minnesota Timberwolves no se ha podido alargar más. La visita a Cleveland se ha saldado con la primera derrota de la temporada, ante unos Cavaliers que estuvieron cerca de tirar su buen partido en el último cuarto, y en el último segundo. Los locales dominaron desde el principio un partido donde los de Minnesota estuvieron faltos de puntería, y es que solo Martin acertó desde la línea de tres (5 de 7 en lanzamientos de triple). 

La ventaja de ocho puntos lograda al término del primer cuarto no hacía presagiar nada bueno para los de Adelman, que veían como cuatro tiros libres de Bynum dejaban el marcador en un 31-23. Miles, a quien no le frenaron sus pocos minutos en pista (18), se convirtió en el máximo anotador de su equipo anoche con 19 puntos, y fue una pieza vital a la hora de aumentar la ventaja con sus rivales. Un triple del jugador de los 'Cavs' ponía la diferencia en los diez puntos (37-27). Un desastroso segundo cuarto de los de Minnesota les llegó a dejar hasta 19 puntos por debajo de los locales, aunque dos tiros libres convertidos por Rubio dejaron el marcador al descanso en un 55-38.

No sería hasta el final del tercer asalto cuando los Wolves reaccionaran, y es que la diferencia llegó a ser de hasta 23 puntos, y de 20 a falta de dos minutos para el cuarto cuarto, coincidiendo con una canasta anotada por Irving, quien ganó sobradamente su duelo particular con un espeso Ricky Rubio, que no convirtió ningún tiro de campo (0-7). Sin embargo, un parcial de 7-0 a favor de los Timberwolves les devolvía vida para el último cuarto, y dejaba el tanteador en un 76-61

Otro gran parcial a favor de los visitanes (8-2), les volvían a meter de lleno en el partido. Los hasta ayer invictos 'Wolves' fueron reduciendo esa diferencia hasta el último segundo, si bien el marcador a falta de cinco minutos reflejaba un claro 91-75, tras un triple de Miles que parecía apagar toda llama de esperanza entre los de Adelman. De nuevo otro parcial a favor, esta vez de 2-15 dejaba a los Timberwolves a solo tres puntos a falta de un minuto, mientras los Cavaliers sufrieron la presión de poder perder un encuentro que un par de minutos antes tenían controlado a la perfección. Tras dos intentonas fallidas de Irving y Thompson, era el turno de los visitantes.

Un gran Kevin Love recogía un rebote ofensivo tras tiro de Barea, y ponía  a los suyos a solo un punto (93-92), con posesión para los 'Cavs' y 38 segundos por delante. Kyre Irving, apurando la posesión, fallaba su intento y dejaba el balón en poder de sus rivales, que dispusieron de 15 segundos de posesión para elaborar la canasta ganadora, recordando a lo ocurrido en el encuentro entre Orlando y Minnesota, donde Kevin Love forzaba la prórroga con un triple sobre la bocina.

Esta vez no fue así, de nuevo el ala-pívot de los Timberwolves sería el encargado de jugarse la última canasta, y de nuevo un triple, si bien esta vez el aro escupía el balón para dar el triunfo final a unos Cavaliers que fuerzan así la primera derrota del equipo de Minnesota.