Cumplida una semana desde el último All-Star de New Orleans, a diferencia de lo ocurrido otros años, no parece haberse encendido ninguna polémica reseñable en las designaciones de los participantes. La ausencia de Goran Dragic no se encuentra entre las brasas producidas por las llamas que iluminaron el pasado fin de semana. El carácter afable y humilde que muestra el esloveno también ha contribuido al escaso tratamiento dispensado por los medios de comunicación estadounidenses. Una vez confirmada su ausencia, el jugador resolvió brevemente afirmando que la competencia es realmente grande y se mostró contento con su participación en el Concurso de Habilidades.

Aunque algunas voces provenientes de Europa han manifestado su parecer, fuera de los contornos de Arizona y Eslovenia apenas se ha generado un debate que sí se produjo más intensamente otros años, con jugadores como Rajon Rondo en 2011 -que finalmente sí fue llamado debido a la lesión de Joe Johnson- o Stephen Curry, en el All-Star celebrado el año pasado en Houston.

Si bien a nivel colectivo el equipo de Phoenix Suns se ubica en la clasificación general detrás de los equipos de Lillard y Parker -Trail Blazers y Spurs-, un aspecto que siempre se valora a la hora de ser seleccionado para un All-Star, existen pocas discusiones a la hora de señalar a los Suns como la mayor sorpresa positiva del campeonato. Desde el inicio de liga transita por zona de playoffs en la dura Conferencia Oeste y es uno de los 10 mejores equipos de la competición. Es decir, se trata también de un equipo ganador.

Al mismo tiempo, en conexión al número de victorias del equipo, el Win Share, una de las más destacadas “advanced-stats” que tan de moda están actualmente en la NBA y que hace referencia al número de victorias a las que ha contribuido un jugador, destaca la actuación de Goran Dragic por encima de los dos bases All-Star seleccionados.

Otra de las estadísticas inteligentes que están ganando progresivo protagonismo y relevancia es el PER (Player Efficiency Rating), básicamente la combinación de varias estadísticas que establece la producción integral de un jugador, por minuto de permanencia en pista. Aquí también Dragic se sitúa por encima de Parker y Lillard:

Pero no hace falta escarbar en rimbombantes estadísticas para destacar, con el grado de objetividad que permiten los números, el nivel de juego del esloveno este año. Un rápido vistazo a la producción en cuatro de los aspectos más destacados del juego –puntos, asistencias, porcentaje de tiro y robos de balón- es suficiente para dirimir, también aquí, una ligera superioridad del número uno de los Suns:

PPG

ASIST.

FG%

STL

Damian Lillard

21

5,8

42,7

0,7

Tony Parker

17,7

6,2

50,1

0,5

Goran Dragic

20

6,3

50,2

1,4

Sin dejar de valorar la buena temporada de los seleccionados, además de la buena marcha de sus respectivos equipos, el rendimiento de Goran Dragic y sus Phoenix Suns sólo parece desmerecer en el terreno del prestigio y la fama. Si bien el gran paso que ha dado este año el juego de Lillard parecía encaminarle directamente al fin de semana de las estrellas, el caso de Tony Parker resulta más llamativo. Su rendimiento ha sufrido un retroceso con relación al pasado año y su estado físico y de forma actual es precario. Esta situación se ha vuelto más objetiva una vez que su entrenador ha considerado, justamente después del All-Star, dar descanso al francés durante algunos días.

En definitiva, desde algunos sectores zanjan este tipo de discusiones señalando el inconveniente que supone para ciertos jugadores carecer de tirón mediático. Días previos al All-Star, Devin Harris realizaba unas declaraciones en este sentido, acerca de la ausencia de José Manuel Calderón en el concurso de triples, relacionando este tipo de designaciones al índice de popularidad de los jugadores.

En cambio, desde otros lugares se remarca la importancia de elegir a quienes llevan más de un año en la élite, con independencia de que una temporada concreta puedan padecer un rendimiento menor con respecto a algún jugador puntual. Su propio entrenador ha realizado unas prudentes manifestaciones en este sentido, quién sabe si para motivar al jugador de cara a su próxima temporada.

Será, en cualquier caso, muy interesante seguir disfrutando con las evoluciones de este zurdo de Ljubljana, un jugador todavía joven, de acciones frecuentemente espectaculares y con un despliegue de juego que se ha elevado ya al nivel de los mejores.