Toronto Raptors - Brooklyn Nets: choque de ilusiones en el Atlántico

Sorpresa. Probablemente esa sea la palabra que defina a los dos equipos que están destinados a encontrarse en la primera ronda de Playoffs fruto del cruce entre el tercer y el sexto clasificado de la Conferencia Este. Se trata de Toronto Raptors y Brooklyn Nets, respectivamente. Dos conjuntos que, bien por su inesperado gran rendimiento o por sus pronunciados altibajos, según el caso, no han dejado indiferente a nadie.

Los Raptors han sido, dejando atrás pronósticos pesimistas, la tercera fuerza del Este siempre por detrás de los todopoderosos Pacers y Heat. Con Chicago como rival más parejo, en Toronto han logrado asentarse en la liga, y se respira positividad y ambición en la franquicia canadiense. Los Nets, por su parte, tuvieron un lamentable inicio de temporada a pesar de las incorporaciones de estrellas como Pierce y Garnett, pero en 2014 se han destapado como un equipo peligrosísimo. Brooklyn resurgió de sus cenizas desde que el nuevo año entró en vigencia, y hoy por hoy es uno de los equipos más complicados con los que toparse en el Este.

Duelos en temporada regular: Raptors 2-2 Nets.

Pronóstico VAVEL: Raptors 2-4 Nets.

Toronto Raptors: la revelación canadiense

El proyecto de los Toronto Raptors para la temporada 2013-2014 estaba lleno de dudas al inicio de la competición. Con una plantilla sin demasiado potencial, los de Canadá veían en el poder de su perímetro, con Gay, Lowry y DeRozan como hombres más peligrosos, su principal arma para combatir este año. Todo ello con talento joven de la mano de jugadores como Valanciunas o Ross esperando a ser explotado.

Partiendo de esta premisa, Toronto comenzó la temporada con paso dubitativo, terminando el mes de noviembre con 6 victorias y 9 derrotas. Sin embargo, no serían estos primeros compases los que definirían el devenir de la temporada, ya que a principios de diciembre llegó el movimiento clave de los Raptors en el mercado de cara a este curso: traspasaron a Rudy Gay, junto a Quincy Acy y Aaron Gray, a Sacramento Kings, a cambio de Greivis Vaszquez, John Salmons, Patrick Patterson y Chuck Hayes.

Este traspaso no sólo dotaba a los de Toronto de un mayor fondo de armario, sino que la principal importancia del mismo era la salida de Rudy Gay. Con una estancia de menos de un año en los Raptors procedente de los Grizzlies, Gay monopolizó jugando en Canadá muchos de los ataques del equipo, ejerciendo de alero anotador. Sin embargo, el juego perdía así mucha fluidez, mientras que Gay, en el momento del traspaso, registraba un pobre 38 % en tiros de campo en lo que llevaba de temporada. La clave de su salida, dejando a un lado esos datos, se vería en el juego de los Raptors sin Gay.

Sin una aparente referencia ofensiva, surgió uno de esos jugadores de los que se sabe que tienen potencial, pero a los que no les ha llegado el momento de explotar. Ese jugador no es otro que DeMar DeRozan. El escolta de los Raptors ha sido desde entonces la referencia ofensiva del equipo, y está en el mejor año de su carrera. Sus promedios de temporada regular han sido de 22,7 puntos (18,1 el curso pasado), 4,3 rebotes (3,9 el curso pasado) y 4 asistencias (2,5 el curso pasado) por partido, erigiéndose como ese jugador franquicia consistente que tanto necesitaban en Toronto. El reconocimiento a su temporada llegó con su selección en el equipo del Este del All-Star 2014. Junto a él, Kyle Lowry (17,9 puntos y 7,4 asistencias por partido este curso, frente a los 11,6 puntos y 6,4 asistencias de la temporada 2012-2013) es el otro capitán del barco, cuyo buen rumbo en la presente campaña sería inconcebible sin ambos. Por último, también hay que destacar la evolución de un Terrence Ross mucho más protagonista tras la marcha de Gay (pasó de jugar 19,8 minutos por partido en noviembre a 32,5 el resto de la temporada), que promedia 10,9 puntos por partido y ha llegado a tener grandes noches, destacando por encima de todas la del 25 de enero, donde anotó 51 puntos, igualando la mejor marca de la historia de la franquicia.

Gracias a todos estos avances y movimientos, los Raptors han conseguido ser un equipo sólido y ganador. Prueba de ello es su tercera posición en el Este con 48 victorias y 34 derrotas, que es el mejor récord de toda la historia de la franquicia. Tras cinco campañas sin llegar a postemporada, Toronto ha vuelto por la puerta grande. Es un bloque joven que en una ronda de Playoffs puede ser realmente correoso, pero el momento de su confirmación no ha llegado hasta ahora. Deberán batirse a duelo contra un equipo que aúna muchos más años de experiencia en la liga, con jugadores que tienen una gran cantidad de batallas en Playoffs a sus espaldas, y que han encontrado la química necesaria entre ellos. Los Nets serán el gran reto para los Raptors, para medir si el sueño canadiense sigue vivo o, por el contrario, se queda en mera ilusión. Lo que es seguro que no faltarán serán las ganas, y perfecto reflejo de ello es el vídeo promocional que ha realizado la franquicia de cara al tramo decisivo de la temporada:

Brooklyn Nets: veteranía y química para seguir creciendo

La temporada regular de los Nets en su segundo año en Brooklyn se puede dividir de forma radical en dos etapas bien diferenciadas. En primer lugar, el caos, el desastre más absoluto. El proyecto 2013-2014 trajo consigo las incorporaciones de Paul Pierce y Kevin Garnett, destinados a liderar a los Nets junto a Deron Williams, Joe Johnson y Brook López formando un quinteto temible lleno de estrellas. Junto a ellos, llegaron incorporaciones como las de Terry, Livingston o Kirilenko para dar profundidad a la plantilla. Sin embargo, el arranque fue extremadamente duro. Con un juego tedioso y con un equipo sin alma sobre el parqué, los Nets cerraron el 2013 con un balance de 10 victorias y 21 derrotas. El capítulo de desgracias se agravó al máximo cuando Brook López, el hombre interior por excelencia del equipo y mejor jugador de Brooklyn en los primeros meses de competición, se lesionó para toda la temporada.

El panorama no podía ser más desolador para los Nets, que veían cómo les llovían críticas dirigidas a su novato entrenador, Jason Kidd, y su plantilla, que tanto dinero había costado. Sin embargo, 2014 ha sido un nuevo comienzo. En un proceso de transformación baloncestística radical, los Brooklyn Nets de este año son un conjunto muy distinto al que decepcionó en los primeros dos meses de competición. Con un juego no necesariamente rápido, una gran mejora defensiva y la fundamental importancia del colectivo por encima del individualismo de las estrellas, los Nets encontraron su juego, y en 2014 han sido de los mejores equipos del Este y de la liga, con un récord en ese periodo de 34 victorias y 17 derrotas. Además, han hecho de su pabellón, el Barclays Center de Brooklyn, un fortín, y han establecido el récord histórico de la franquicia con 15 victorias consecutivas como locales. Eso sí, como curiosidad hay que destacar que Chicago Bulls, con su juego de tremenda intensidad y defensa férrea, es uno de los equipos que más les cuesta a los Nets. Tanto es así, que en los últimos partidos de temporada regular Kidd ha reservado a sus estrellas, perdiendo partidos a priori fáciles y cayendo al final hasta el sexto puesto del Este, dando pie a rumores sobre una supuesta intención de evitar a los Bulls. De esta manera se han emparejado con unos Raptors que, aunque vayan a dar mucha guerra, no dan la imagen de bestia negra que tiene Chicago.

Uno de los puntos que mejor ha conseguido desarrollar Jason Kidd al mando de los Nets es la ya mencionada importancia de todos los hombres que forman parte de la rotación. Así, el máximo anotador del equipo en temporada regular ha sido Joe Johnson con apenas 15,8 puntos por partido. En cuanto a sus estrellas, mientras Garnett apenas ha bajado muchísimo sus prestaciones debido a las lesiones y su necesidad de rotar más, Pierce sí que es una pieza importante, y ha promediado 13,5 puntos y 4,6 rebotes por partido. Williams, por su parte, 14,3 puntos y 6,1 asistencias por partido forman sus medias esta temporada. Junto a ellos, los Raptors tendrán que prestar especial atención a secundarios como Blatche (11,2 puntos y 5,3 rebotes por partido), Livingston (8,3 puntos por partido) o el llegado en el mercado de invierno a cambio de Terry y Evans, Thornton (12,3 puntos por partido desde que llegó a Brooklyn).

Ahora que han puesto la directa y se han encontrado a sí mismos, los Nets son uno de esos equipos que pueden dar la sorpresa en primera ronda. Un exceso de confianza del rival por lo baja que resulta una sexta plaza sería hasta beneficioso para un equipo que, sin embargo, presenta un gran récord en 2014, y que en enfrentamientos directos con Toronto ha empatado a 2 esta campaña. Será una eliminatoria tremendamente igualada, pero la veteranía, la buena dinámica y la fortaleza en casa de los Nets pueden ser determinantes al final.

Estadísticas de la temporada regular

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Las claves de la serie entre Raptors y Nets

Ambos conjuntos tendrán ahora muchos partidos para medirse, muchos días en los que todo se reducirá a un mano a mano con sólo un rival en la cabeza. En estos choques habrá varios puntos a los que los respectivos equipos tendrán que prestar especial atención si quieren deshacerse del contrario.

En primer lugar, un factor determinante será el perímetro de Toronto Raptors, especialmente Kyle Lowry y DeMar DeRozan. El base y el escolta de la franquicia canadiense han hecho mucho daño a los Nets en sus enfrentamientos esta temporada, y las estadísticas son la prueba más evidente de ello. Cuando Lowry ha sido defendido por Livingston o Williams, ha anotado 34 puntos con un 15-26 en tiros de campo y 7-14 en tiros de tres puntos. Por su parte, cuando Johnson ha estado emparejado en defensa con DeRozan (6:55 minutos entre todos los partidos), este ha anotado 22 puntos con 8-9 en tiros de campo. Se antoja por tanto fundamental que Brooklyn sepa gestionar la defensa de las dos estrellas de los Raptors, con el fin de anular el mayor peligro que tienen sus rivales.

La lucha por la pintura se perfila como otro punto decisivo en el desarrollo de la serie. Con Brook López lesionado, los Nets suelen jugar con un quinteto de pocos centímetros, colocando en muchas ocasiones a Paul Pierce de ala-pívot y Plumlee o Blatche de pívot. Es en esa posición donde los Raptors, con Patrick Patterson y Amir Johnson, tienen ventaja, al menos en tamaño. Pierce puede sufrir mucho en la defensa de los hombres grandes, aunque también será un peligro en el aro contrario con su mayor movilidad y capacidad de tiro abierto propia de un alero como él es. Por otro lado, esta diferencia de centímetros puede ser también determinante en el apartado reboteador, donde los Nets han demostrado que sufren mucho (son el segundo peor equipo de la liga en este apartado).

Por último, un principio básico del baloncesto que se hará aún más importante en este enfrentamiento será la importancia del colectivo. Los jugadores a los que se dirigen menos focos, como Livingston y Blatche en Brooklyn o Ross y Valanciunas en Toronto, pueden y deben ser el elemento diferenciador de sus respectivos equipos. De la aportación de los secundarios dependerá buena parte de la suerte de ambas franquicias en el duelo.