A pocos días para que la NBA empieza la temporada regular, tanto Golden State Warriors como Los Ángeles Lakers se medían en el Staples Center en busca de una victoria que diese confianza sobre todo a los últimos mencionados anteriormente, la vuelta de Kobe Bryant sería un buen impulso además de servir para comprobar su estado de forma.

Tempranas bajas previas al encuentro

Para este partido, Byron Scott no podía contar en Los Ángeles Lakers para este partido con Steve Nash, el cual disfrutaba de un descanso, además de Ryan Kelly, Xavier Henry y Nick Young, reciéntemente operado, mientras que en los Golden State Warriors no podrían ser de la partida Ezeli y Livingston.

Antes de arrancar el encuentro, el Staples Center brindaba una sonora ovación en la presentación de los jugadores a la estrella del equipo, Kobe Bryant, el cual volvía a vestir de corto en el feudo Laker. En los primeros compases del encuentro los angelinos parecían volver a ser una misma imagen de la temporada pasada, ya que en poco más de seis minutos encajaban hasta 19 puntos.

Después de diez minutos de encuentro, Kobe Bryant se sentaba en el banquillo en un momento en el que parecía haber vuelto ya que contaba con 10 puntos y 2 robos, a pesar de esos buenos números, los Warriors contaban con una ventaja de ocho puntos al final del primer cuarto, estando en el luminoso impuesto el 27-35.

Golden State manda cómodamente

El segundo cuarto arrancaba teniendo a los Lakers buscando forzar en ataque, sobre todo con Ed David y Julius Randle, los cuales conseguían mantener cerca en el marcador a los angelinos, teniendo tan solo seis puntos de desventaja. Steve Kerr decidía pronto dar minutos a sus titulares superando así tanto en calidad como experiencia al quinteto planteado por Byron Scott, el cual estaba lleno de jóvenes jugadores.

Klay Thompson, se encontraba totalmente cómodo en la cancha teniendo un excepcional acierto, el cual llevaba a los Warriors a irse ganando al descanso por 44-62 siendo él con veinte puntos en su haber el mejor del encuentro, además de un 7/8 en lanzamientos de campo.

A la vuelta del descanso, Steve Kerr decidía realizar un cambio con respecto a su quinteto inicial dejando en el banquillo a Andre Iguodala para dar entrada en su lugar a Harrison Barnes. En los primeros compases de la segunda mitad, Jeremy Lin se mostraba activo repartiendo tanto asistencias como puntos propios, lo cual hacía recortar distancias a los Lakers.

Despiertan los angelinos

De la mano de un buen Carlos Boozer los Lakers se colocaban a tan solo doce puntos en una auténtica pájara por parte de los Warriors, el pívot recién llegado esta temporada a la franquicia angelina a pesar de crear bastanta juego recibía hasta tres tapones por parte de la defensa de los Warriors.

Las lesiones volvían a hacer acto de presencia en el Staples Center, teniendo que retirarse lesionados tanto Andrew Bogut como Harrinson Barnes, los cuales en principio no parecía nada grave siendo simplemente unos golpes. A pesar de colocarse a tan solo ocho puntos, los Lakers se volvían a alejar en el marcador hasta los dieciocho puntos.

Al final del tercer cuarto, los Warriors conseguían mantener parte de su ventaja estando a falta de doce minutos para el final con un marcador de 75 a 96, prosiguiendo Thompson en muy buen estado de forma además de Jeremy Lin, el cual tras no anotar en su debut estaba en un 100% de acierto en lanzamientos de campo con cuatro de cuatro.

Comienza el último asalto

Para arrancar este último cuarto, Byron Scott daba ya por perdido alineando un quinteto formado por: Julius Randle, Jeremy Tyler, Ronnie Price, Ed Davis y Wayne Ellington. Poco daba de sí este último cuarto teniendo los Warriors totalmente en su mano ante unos Lakers que en defensa seguían haciendo aguas de manera continua.

Lin, proseguía siendo el mejor por parte de los Lakers teniendo a Kobe Bryant en perfecto estado ya que en 22 minutos disputados conseguía transformar un total de quince puntos además de dos rebotes, tres asistencias y tres robos, completando un muy buen partido en su vuelta a casa, al Staples Center.

Al final, los Warriors dejarían escapar un poco de su ventaja ganando por quince puntos estando en el luminoso el 105-120 siendo Klay Thompson el mejor del partido tras terminar con 25 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias, todo ello acompañado por Stephen Curry, el cual finalizaba con 20 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias. Por su parte, en los Lakers el mejor era Jeremy Lin con 14 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias, Kobe Bryant terminó con 15 puntos y Carlos Boozer con 16.