En el Palace of Auburn Hills de Detroit se veían las caras dos equipos con trayectorias muy diferentes en este inicio de temporada. Detroit Pistons, que tras armar una gran plantilla en verano, todavía no han encontrado su idea de juego, sufriendo siete derrotas consecutivas y situados en la zona baja de la tabla en la Conferencia Este, y Golden State Warriors, un conjunto que en las dos últimas campañas ha crecido tanto en juego como en resultados y que parece que este curso, de la mano de Steve Kerr, serán uno de las franquicias de referencia en la Conferencia Oeste y en la NBA.

El entrenador local, Stan Van Gundy, contaba con toda la plantilla a su disposición, salvo la baja ya sabida de Meeks, mientras que Kerr, como ha venido ocurriendo en este primer mes de competición, no podía contar con David Lee, que se espera que regrese a los terrenos de juego en las próximas semanas.

Dominio local

En los primeros compases del encuentro, Detroit dominaba el electrónico, aunque el juego estaba marcado por el poco acierto en el tiro a canasta de ambos equipos. Van Gundy dio entrada a Caldwell-Pope y Singler en el quinteto titular, dejando de lado a su "big three" interior, formado por Drummond, Smith y Monroe, que además tampoco tuvieron una buena tarde (12-38 tiros de campo entre los tres jugadores).

Los Warriors fueron entrando poco a poco en el transcurrir del choque, liderados por Stephen Curry, que anotaba y hacía jugar a sus compañeros, y por Draymond Green, que disfrutó de uno de sus mejores partidos en la NBA. Los locales llegaron a disfrutar de ventajas de hasta ocho puntos, pero con varios ajustes en defensa los californianos recuperaron terreno, hasta el 24-21 con el que se llegó al final del primer cuarto.

Vendaval Warrior

En los segundos doce minutos Golden State desarrolló su mejor juego, el juego que le ha llevado a las cotas más altas en este inicio de curso, con todos los jugadores aportando en ambos lados de la cancha. Curry (16 puntos y 10 asistencias) y Green (20 puntos) marcaban el ritmo en ataque, bien secundados por Speights entrando desde el banquillo. La defensa marcó el devenir del choque en este segundo cuarto, con los visitantes dejando en un pobre 27% de acierto en el tiro a los Pistons en la primera parte.

Thompson (15 puntos) e Iguodala también se unieron al gran momento de los californianos, con el primero aportando en el aspecto ofensivo, con varias canastas 'marca de la casa', y con el segundo dotando de intensidad a sus compañeros, tanto en defensa como en ataque. Los Warriors le dieron la vuelta al choque en este segundo periodo y llegaron al descanso con ventaja en el marcador, 40-53.

Leve mejoría de Pistons

Tras el paso por los vestuarios, los visitantes siguieron con la misma idea de juego, intensidad en defensa y salidas rápidas al contraataque. Los de Oakland se fueron en el electrónico, gozando de máximas diferencias de hasta 20 puntos, liderados por un imperial Draymond Green que dominaba la zona y que rompía la defensa local desde el triple (5-8 T3). Los Pistons fueron mejorando su porcentaje en el tiro a canasta según transcurría el encuentro, acercándose a menos de 15 puntos antes de llegar al final del tercer cuarto, liderados por Jennings (22 puntos, 6-19 TC) y Caldwell-Pope (23 puntos, 8-15 TC).

Las pérdidas de balón, el punto débil de Golden State, propició que los locales se metiesen en el partido (82-71), aunque con varios ajustes en defensa, y con Curry en el banquillo por problemas en su brazo derecho, los Warriors lograron controlar el juego y el marcador, consumando una nueva victoria, 93-104, la novena de manera consecutiva y la sexta seguida "en la carretera".

El equipo de Oakland se mantiene en la segunda plaza de la Conferencia Oeste (14-2) con un gran récord de 9-1 lejos del Oracle Arena, además de completar una gira perfecta (5-0), algo que no conseguían desde el año 1978. Por su parte, Detroit Pistons ha sufrido su octava derrota de manera consecutiva, la peor racha de derrotas de Stan Van Gundy en su carrera como entrenador, y seguirán durante una jornada más en la zona baja de la clasificación en la Conferencia Este, con tan solo tres triunfos en 17 partidos disputados.

Ambos conjuntos volverán a la acción en la jornada del martes, Golden State Warriors, que se reencontrará con sus aficionados tras una larga gira de cinco partidos, tendrán la oportunidad de continuar con esta racha triunfal si logran vencer a Orlando Magic. Mientras que los Pistons volverán a jugar en el Palace of Auburn Hills, esta vez ante Los Angeles Lakers, con el objetivo del volver a disfrutar de las mieles de la victoria.