En el Verizon Center de Washington se veían las caras dos conjuntos llamados a luchar por los primeros puestos de sus respectivas conferencias, Washington Wizards en el este y Los Angeles Clippers en el oeste. Ambos equipos llegaban al partido en un gran momento de juego y resultados, los capitalinos venían de ganar a Orlando Magic con una canasta de Beal en el último segundo, mientras que los angelinos se presentaban en la capital de los Estados Unidos con una gran racha de triunfos, ocho consecutivos.

Ninguno de los dos técnicos presentaba bajas importantes, en lo que se presumía como un duelo entre dos de los mejores “backcourts” de la NBA, John Wall y Bradley Beal contra Chris Paul y JJ Redick, sin menospreciar a la gran batalla que se viviría en la pintura entre Humphries, Gortat, Griffin y Jordan. Tanto Wittman como Rivers formaría con sus quintetos “de gala”, con la única novedad de Nene, que saldría desde el banquillo como ya viene haciendo en las últimas semanas, por parte del conjunto local.

Buen inicio de los locales

No tardaron los Wizards en hacerse con el control del juego y del marcador baja la batuta de John Wall. El base de Carolina del Norte controló el partido a su antojo desde los primeros minutos, anotando y haciendo jugar a sus compañeros. En los visitantes, tan solo Crawford, desde la línea de tiros libres, era capaz de seguir el ritmo anotador. Los locales, con un gran 50% de acierto en tiros de campo y un 60% en triples, comenzaban a marcar las primeras diferencias.

La segunda falta personal de DeAndre Jordan, la aprovecharon los capitalinos para abrir una brecha en el electrónico, llegando al final de los primeros doce minutos con una cómoda ventaja, 30-21. Wall dirigía y Beal ejecutaba, con los hombres interiores, Humphries y Gortat, dominando el rebote y aportando puntos desde lejos de la pintura.

Wall comandaba las operaciones

En el segundo cuarto el guión seguía siendo el mismo, con el conjunto de Washington llevando el peso del partido, mientras los Clippers se mantenían en un segundo plano. La baja de Hawes, que se vio obligado a abandonar la cancha por problemas en su rodilla izquierda, redujo la rotación de Rivers que además tenía que dosificar a Jordan, con problemas de faltas.

Un parcial de 2-11 volvió a meter a los angelinos en el choque, aunque en los últimos compases del segundo periodo los Wizards pusieron toda su maquinaria anotadora en marcha, con varios triples de Pierce y Beal y con un gran trabajo en el apartado defensivo, logrando la máxima ventaja del encuentro, más 17 (38-45). Bajo la batuta de Wall, los de Wittman se marchaban al descanso con ventaja, 57-42.

Control total de los Wizards

Tras el paso por los vestuarios, los pupilos de Rivers salieron dispuestos a darle la vuelta al partido, pero sin éxito. La defensa de los locales, unida al gran acierto desde la línea de tres, les mantenía con una cómoda ventaja en el marcador. Wall (10 puntos y 11 asistencias), Beal (29 puntos) y Gortat (18 puntos) eran los encargados de llevar el peso del ataque, ante unos Clippers que no gozaron de su mejor noche en el tiro y en los que Paul (19 puntos) era el único que rayaba a buen nivel.

Los locales dominaron el juego y el marcador durante toda la noche, frenando cualquier tipo de reacción de los californianos, que se llegaron a situar a menos de diez puntos en los primeros compases del último cuarto, pero que no pudieron, en ningún momento del choque, con unos inspirados Wizards, 48% en tiros de campo y 56% en triples (9-16) que se acabarían llevando la victoria por 104-96, sumando así su tercer triunfo consecutivo y rompiendo la racha triunfal de los angelinos.

A pesar de la derrota, Los Angeles Clippers se mantienen en una cómoda quinta plaza en la Conferencia Oeste. Los hombres de Rivers tendrán la oportunidad de volver a la senda de la victoria esta misma noche, en la que tendrán que visitar la cancha de Milwaukee Bucks. Por su parte, Washington Wizards continúan en la zona alta de la tabla en la Conferencia Este, a tan solo medio partido del liderato. Los capitalinos volverán a la acción en la jornada del domingo, cuando reciban en el Verizon Center a Utah Jazz.