El primer y tercer mejor equipo de la liga se enfrentaban anoche en el FedExForum dispuestos a hacer disfrutar a los aficionados del baloncesto, y desde luego que lo hicieron. Por un lado, Atlanta buscaba aumentar su racha de victorias a tres en lo que podría ser otra gran serie de imbatibilidad. Por su parte, Memphis quería resarcirse de la derrota cosechada en Minnesota por tan solo un punto de diferencia. En el único precedente hasta la fecha se impusieron los de Geogria, y este va a ser la segunda y última vez que se vean las caras, al menos en liga regular.

Una mera toma de contacto

El partido comenzó con una canasta de Kyle Korver a la salida de un bloqueo, que tardó dos minutos en verse contestada por Jeff Green desde la línea de tiros libres. En los dos primeros minutos solo se anotaron cuatro puntos por culpa de consecutivas pérdidas entre ambos conjuntos. Aunque Marc Gasol rompía la sequía, respondido por Jeff Teague con un triple en la siguiente posesión. A lo largo de los cuatro primeros minutos solo hubo cuatro tiros de campos anotados, con Gasol siendo responsable de seis de los ocho primeros puntos de los de Tennessee.

Siete minutos dentro del primer cuarto, los Grizzlies doblaban a los Hawks, 14-7. Por tanto, ante la pasividad de ambos quintetos, los banquillos comenzaban a moverse con el objetivo de obtener una diferencia en la pista, iniciada por Kent Bazemore con una bandeja. Pero en breve la diferencia de siete volvía al marcador con una canasta de Tony Allen cortando por línea de fondo. Dennis Schroder hacía la guerra por su cuenta y sumaba tres puntos más que necesarios al luminoso de los Hawks.

El desacierto y las defensas marcaron los primeros doce minutos, que dejaba cuatro puntos arriba a los locales. Zach Randolph marcaba territorio en la pintura con cinco rebotes.

La importancia del banquillo

Kosta Koufos, reemplazo de Gasol en la posición de pívot, inauguraba el segundo cuarto con dos tiros libres para aumentar la producción del banquillo de David Joerger. El único oponente capaz de batir la defensa local fue Schroder con un 2+1 que aumentaba las aspiraciones visitantes. El fallo en el tiro seguía siendo el protagonista pero nadie era capaz de dominar el rebote defensivo.

Con casi cuatro minutos jugados la diferencia se mantenía en cuatro puntos tras triples de Mike Scott, y en el otro lado Beno Udrih. La línea de tres puntos parecía ser la llave al ataque visitante y Bazemore convertía otro más. El juego de los de Mike Budenholzer era irreconocible si se comparaba con el que habían estado realizando a lo largo de la temporada. Los pases no eran buenos, los tiros no estaban bien seleccionados y los sistemas no fluían adecuadamente. Con todo y con eso, conseguían ponerse por delante después de que Bazemore anotara dos tiros libres, 32-33.

Joerger reaccionaba y volvía a introducir a los titulares en la pista para intentar frenar la ascendencia rival. Y la decisión no hacía más que agravar los problemas en ataque aunque conseguían llegar al descanso pegados en el marcador, 42-43. Los Grizzlies no anotaron un solo triple en toda la primera parte y estuvieron por debajo del 40% en tiros de campo. Con 24 minutos consumidos Bazemore registraba siete puntos y cuatro rebotes. En el otro lado Randolph llevaba cuatro puntos junto a ocho rebotes.

Los locales muestran la garra que les caracteriza

Los dos aciertos tras la reanudación fueron un despliegue de juego interior en el que Randolph y Horford hicieron acto de presencia. Un minuto después, el partido quedaba empatado a 46 después de que Conley anotase. En los primeros minutos del tercer cuarto Zach Randolph recogía su décimo rebote, sin conseguir un doble-doble con tan solo seis puntos. Otro compañero a destacar fue Jeff Green demostrando por qué le ficharon con un gran despliegue atlético para poner tres arriba a los de casa. También hay que decir que la ventaja no les duraría mucho ya que en menos de un minuto dos triples consecutivos por parte de Carroll y Korver devolvían a los Hawks al frente del marcador.

El encuentro no paraba de tener respectivas acometidas y cambios de ventajas en el marcador, pero a doce minutos del final, los Grizzlies se imponían 69-66 con un aleey-oop de Conley a Koufos en el último segundo.

La consumación de una gran victoria

Teague continuaba con su gran juego para comenzar el cuarto definitivo, que junto a un triple de Korver situaban con dos puntos de ventaja al conjunto de Georgia. La réplica la encontraban en la línea de tres de la que Conley se hacía dueño y señor para dar colocar a los suyos cinco arriba. El partido estaba completamente loco, y cada canasta local encendía más si cabe a la afición.

A los dos últimos minutos se llegó con el marcador a favor de los anfitriones 88-86. El minuto siguiente fue de dominio local, con dos tiros libres de la última adquisición, Jeff Green, y una bandeja de Mike Conley, 92-86. En los últimos sesenta segundos los Hawks tiraron todas las oportunidades de remontada tras dos triples muy forzados de Paul Millsap que no entraron. El partido terminó en los tiros libres.

Por parte visitante destacaron Jeff Teague con 22 puntos y seis asistencias, junto a Kent Bazemore que desde el banquillo sumó 14 puntos y cinco asistencias. En los victoriosos locales sobresalieron por una parte el juego interior, entre Gasol, Randolph y Koufos aportaron 37 puntos más 32 rebotes. Otro gran protagonista fue el director de juego, Mike Conley, anotando 21 puntos y repartiendo seis asistencias.

El desenlace de este partido supone retomar el camino de la victoria para la franquicia de Memphis, mientras que en Atlanta cosechan su segunda derrota en cuatro partidos.