En el Staples Center de Los Ángeles se veían las caras dos equipos lastrados por las lesiones en lo que llevamos de temporada, Los Angeles Lakers y Oklahoma City Thunder. Los angelinos estaban inmersos en una racha de tres victorias consecutivas y venían de ganar al equipo revelación de la Conferencia Este, Milwaukee Bucks, mientras que los Thunder se presentaban en LA después de caer derrotados en sus dos últimos encuentros.

El técnico local, Byron Scott, tenían las bajas ya sabidas de Steve Nash, Julius Randle y Kobe Bryant, además de las de Nick Young y Ronnie Price. Por su parte, Scott Brooks no podía contar con sus dos mejores jugadores, Kevin Durant y Russell Westbrook, aunque se espera que estén de vuelta a las canchas en las próximas semanas. Los antecedentes favorecían a OKC, que había superado a los Lakers en el enfrentamiento previo entre estos dos equipos esta temporada, aunque en un encuentro muy igualado.

Buen inicio de Thunder

Desde los primeros compases del choque los visitantes llevaron el control del juego y del marcador, liderados por Augustin, que jugaba su primer partido como titular, sustituyendo al lesionado Westbrook. La aportación de Robertson y el dominio de la pintura de Ibaka y Kanter, permitió que los Thunder disfrutasen de diferencias importantes, 10-22.

Los angelinos tardaron en entrar en el encuentro, lastrados por su poco acierto en el lanzamiento a canasta, lo que aprovechó OKC para distanciarse en el electrónico, llegando al final del primer cuarto con una cómoda ventaja, 19-28. Una canasta de Clarkson en el último segundo dejaba la diferencia por debajo de la barrera psicológica de los diez puntos, dando vida a los Lakers de cara al segundo periodo.

Mejoría angelina

Un segundo periodo que comenzó igual que el primero, con los Thunder controlando el juego, de la mano de Augustin, y con Ibaka y Kanter haciéndose grandes en la zona. Un parcial de 6-0 volvió a meter a los angelinos en el choque, que incluso llegaron al igualar el marcador mediado el segundo cuarto, 43-43, con Ed Davis rompiendo el entramado de la defensa visitante.

Scott Brooks se vio obligado a parar el partido, con el objetivo de frenar las embestidas ofensivas de los Lakers. Después del tiempo muerto Oklahoma City salió con más intensidad, volviendo a recuperar al control del juego y del marcador, lo que les permitió llegar al descanso con ventaja, 48-56, gracias a un triple de Augustin sobre la bocina. Un segundo cuarto en el que ninguno de los dos conjuntos cometió una sola pérdida de balón.

OKC supo resolver

Tras el paso por los vestuarios el partido recuperó el guión de los primeros instantes de la noche, los visitantes controlaban el juego y el marcador y los angelinos luchaban para no descolgarse. Volvieron las ventajas de más de diez puntos, con una máxima de trece mediado el tercer cuarto, 61-74, gracias al buen rendimiento de Augustin (18 puntos), que cumplió en la difícil tarea de sustituir a un enrachado Westbrook.

Ibaka (18 puntos y 14 rebotes) y Kanter (16 puntos y 15 rebotes) controlaban la pintura ante el débil juego interior del conjunto local, que vivía de la aportación de sus hombres de perímetro, con Lin (20 puntos y ocho asistencias) liderando las operaciones. El choque encaraba su último y definitivo periodo con una cómoda ventaja para OKC, 72-84, que en ningún momento de la noche había ido por detrás en el marcador.

Los Thunder no querían sorpresas y se dedicaron a controlar la diferencia que habían conseguido, a pesar de los esfuerzos de Lin y los Lakers por remontar el partido. La aportación de Lamb (14 puntos), nueve de ellos en el último cuarto, la dirección de Augustin y el control del rebote de Ibaka y Kanter, fueron claves en los compases finales del choque. Un triple del propio Lamb a cinco minutos para el final ponía el más catorce en el electrónico, una diferencia que ya sería insalvable para el conjunto californiano. Los hombres de Brooks sumaban un nuevo triunfo, 101-108, rompiendo la racha de dos derrotas consecutivas.

OKC conseguía su octava victoria en los últimos diez encuentros, lo que les permite conservar el octavo puesto de la clasificación en la Conferencia Oeste, aunque con menos de un partido de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, New Orleans Pelicans. Los Lakers vuelven la senda de la derrota y, una semana más, continúan en la zona baja de la tabla con un récord de 16-42.

Oklahoma City Thunder no volverá a la acción hasta la jornada del miércoles, cuando reciban la visita de Philadelphia 76ers. Por su parte, Los Angeles Lakers tendrán que viajar a Charlotte para medirse a los Hornets en la noche del martes, donde intentarán volver a la racha triunfal de la última semana.