Los Hornets se impusieron a unos Chicago Bulls, que, pese a llegar a ir ganando por 19 puntos, acabaron sucumbiendo ante los de Steve Clifford. Los de Charlotte escalan de esta forma al octavo puesto de la clasificación, y sueña por unos Playoffs que parece que estarán muy peleados. Por su parte, los de Thibodeau caen a la cuarta plaza, y comienzan a complicarse en su lucha por arrebatar a los Cavaliers la segunda posición de Este.
Los de Carolina de Norte encontraron su fortaleza en la eficacia de su quinteto titular, pues todos sus integrantes alcanzaron los dobles dígitos en anotación, siendo especialmente destacable la actuación de Henderson, que sumó 20 puntos y rebotes. Los Bulls, por el contrario, volvieron a echar de menos a Rose y Butler, y, pese a que hombres como Gasol o Brooks brillaron, fueron más aquellos cuya presencia en el parquet pasó más bien desapercibida. Choques como este demuetrasn que necesitan a sus estrellas si quieren volver a ser competitivos.
Inicio arrollador de los Bulls
Marvin Williams anotó la primera canasta del partido, pero desde entonces el primer cuarto fue prácticamente un monólogo para los de Chicago. Con un espectacular acierto desde el triple (7 en el primer periodo), los Bulls se marcharían en el marcador guiados por un espectacular Aaron Brooks, que anotó en los primeros 12 minutos la mitad de sus 24 puntos. Marvin y Mo Williams tiraban del carro de los suyos, pero no pudieron evitar que al final del primer cuarto los Hornets estuviesen 16 abajo. Tocaba remontar.
Un gran acierto desde el perímetro puso rápidamente a los Bulls 19 arriba
El inicio del segundo periodo tuvo a McDermott como protagonista, pues el rookie anotó los ochos primeros puntos de los suyos y puso en el marcador la máxima ventaja del partido (21-40), pero todo cambió a partir de ahí. Charlotte comenzó a apretar en defensa, y el descomunal ritmo anotador que estaban llevando los de Illinois se frenó, lo que les permitió meterse en el partido. El acierto escaseaba, pero los Hornets fueron capaces de ir forzando tiros libres que poco a poco les hicieron acercarse en el marcador. Su desventaja llegó a ser de solo cinco puntos, pero un 2+1 de Brooks al borde del descanso establecía el 52-60 con la mitad del partido jugado. Tras el susto inicial, había partido en el Time Warner Cable Arena.
La defensa culmina la remontada
Podría decirse que en el tercer cuarto fue un solo equipo el que saltó a la pista. Los Bulls desaparecieron totalmente en campo ofensivo, y solo fueron capaces de hacer 10 puntos a la defensa de los Hornets, que, así como en el segundo parcial les había hecho meterse en el partido, esta vez les permitió llevárselo. Los de Clifford forzaron cinco pérdidas e innumerables malos tiros mientras poco a poco iban sobrepasando a su rival en el marcador, algo que hizo de forma definitiva Mo Williams con una cómoda penetración que puso el 65-63. No contentos con eso, los de Carolina del Norte siguieron golpeando como un martillo pilón, y con los puntos muy bien repartidos entre muchos de sus hombres continuaron abriendo una ventaja que solo un triple de Snell a falta de escasos segundos evitó que fuera de 10 puntos al final del tercer cuarto.
La defensa de los Hornets dejó a los Bulls en 16 puntos en los 19 primeros minutos de la segunda parte
Pero por mucho que los Bulls lo intentaran no había manera. La defensa de los Hornets seguía imponiéndose a su ataque, cada vez con menos recursos, y los de Thibodeau se quedaron estancados con solo seis puntos en casi siete minutos de último cuarto. Mientras, Charlotte se daba gusto, y aprovecharon un rato de inspiración de Henderson y Maxiell para abrir una brecha de 18 puntos que terminó de romper el choque. Fue entonces cuando Chicago trató de reaccionar, pero era demasido tarde. Los de Illinois recuperaron el acierto de los primeros minutos y llegaron a ponerse a seis puntos en el último minuto, pero los hombres de Clifford no fallaron cuando tuvieron que visitar el tiro libre y certificaron la victoria de forma cómoda.
Al final, el triunfo se quedó en el pabellón, un pabellón que está recuperando el optimismo de cara a la posibilidad de vivir unos Playoffs por segundo año consecutivo. Ahora mismo los Hornets ocupan la octava plaza, y parece que les queda una larga pelea que solo el paso del tiempo dirá si merece la pena. Los Bulls, mientras, irán restando días al calendario esperando el regreso de Butler y Rose para volver a recuperar la ilusión.