Chris Johnson y Jack Cooley serán nuevas piezas de los Utah Jazz, al menos hasta el final de la presente temporada. Jack Cooley firmó la prorrogación de su contrato con la franquicia por varios años, sin conocerse todavía las cifras y los detalles del documento, debido a las políticas internas de los Jazz. Anteriormente, jugó dos partidos de pretemporada con los Jazz, con presencia testimonial, por lo que decidieron prescindir de los servicios del ala-pívot de Illinois.

El detonante de su vuelta puede que haya sido su rendimiento actual en la Liga de Desarrollo. En los cuatro últimos partidos, con los Idaho Stampede, ha firmado 21,8 puntos y 20 rebotes de media, siendo extraño el partido que no superaba los 15 puntos-15 rebotes. Ha jugado 20 partidos en la D-League, promediando 16,8 puntos y 12,5 rebotes.

Cooley firmó su último contrato de diez días con los Utah Jazz el pasado 16 de marzo, hace seis partidos, en los que ha conseguido 1,7 puntos en 4,3 minutos en pista. En un juego interior poderosamente joven, con Derrick Favors y Rudy Gobert, no tiene demasiada cabida, pero le avalan sus 23 años, 2,06 metros y afán de trabajo.

www.usatoday.com

Chris Johnson, 24 años, tercer año en la liga, firma por lo que resta de temporada con los Jazz también, sin tener confirmado el año que viene, especulándose con que hubiera firmado un contrato similar al de Elijah Millsap o Bryce Cotton.

Ha sido el último para conformar una plantilla de 15 jugadores, el máximo permitido en la liga norteamericana. El alero formado en la universidad de Dayton, Georgia, firmó dos contratos de diez días con la franquicia a finales de enero y principios de febrero, recalando en los Bucks, donde firmó otros dos contratos temporales sin éxito.

Poco antes, en noviembre, fue cortado por los Sixers, donde comenzó la temporada. Sus números son 5,2 puntos y 2,1 rebotes en 18,6 minutos de juego este año. Sólo ha jugado dos partidos en los Jazz, promediando siete puntos y tirando por encima del 50%. Ha pasado también parte de la temporada en la Liga de Desarrollo, donde ha firmado partidos de más de 25 puntos, con los Rio Grande Valley Vipers.

La pasada temporada militó en los Boston Celtics, donde jugó 40 partidos de temporada regular, todos saliendo desde el banquillo, promediando 6,3 puntos y 2,4 rebotes, con porcentajes alrededor del 30%. Lo cierto es que estos intercambios de pequeñas fichas hacen presagiar la colocación de la plantilla de cara a futuros trueques en el próximo mercado de fichajes, donde los Jazz intentarán seguir sumando talento a un equipo ya de por sí interesante a largo plazo.