Como el mosquito que se oye en la habitación con la luz apagada, pero no se espanta debido al típico "ya se irá", somnolientos en la cama, pero cuyo zumbido vuelves a escuchar a los quince minutos en tu oído. Extrapolado al mundo del baloncesto norteamericano, ese viene siendo el modus operandi de los Spurs de Popovich en las últimas temporadas. Muchos los descartaban prácticamente antes de mediados de temporada cuando parecían no arrancar ni llegar al nivel mostrado el pasado junio. Ahora, la tortilla da la vuelta, metiendo miedo y dando un palo a los disidentes.

Y es que con la franquicia tejana siempre hay que pensar en el "ya llegarán". Este año se ha podido comprobar, más que ningún otro, que nunca hay que descartar a la franquicia propiedad de Peter Holt, uno de los más pacientes inversores, que demuestra total confianza en su entrenador, Gregg Popovich, que goza de plenos poderes muy merecidos, ya que sus cinco anillos y más de 1000 victorias allí, le avalan.

www.martiperarnau.com

Ocho victorias consecutivas, dejando a los rivales en unos pírricos 87 puntos y anotando más de 110 por partido. La lógica lleva a pensar en los rivales y en su calidad. Pues bien, han apabullado en esta racha a Dallas Mavericks de 18, a Oklahoma City Thunder dos veces, por 39 y 25 puntos (la última, la madrugada del martes), a Memphis de 14 puntos y, quizá el más sonado, al mejor equipo del año, a Golden State Warriors, casi sin despeinarse, por 25 tantos de diferencia.

Sus números de este año son sensiblemente inferiores a los del pasado curso, pero lo más destacado es el 46,6% en porcentaje de tiros de campo, el peor porcentaje de tiro de los últimos seis años, bajando en un 2% en relación al año pasado. Aún así, las diferencias en todos los apartados estadísticos son mínimas, de décimas, evidenciando la extrema regularidad de este maravilloso colectivo de jugadores profesionales hasta la médula.

18 de los últimos 21 partidos han finalizado con victoria de los de San Antonio. Son el equipo más en forma en la actualidad, qué casualidad, justo cuando se echa encima la lucha por el título, más intensa que nunca en su Conferencia Oeste. De estos últimos 21 partidos, sólo han bajado de 100 puntos en tres (uno de ellos cayeron derrotados ante los Mavericks). Sus rivales no han llegado la centena en 14 de esas 21 noches. Las cifras hablan por sí solas.

Antes de la llegada de Gregg Popovich, ningún entrenador de los San Antonio Spurs había superado los cuatro años que estuvieron Larry Brown, entre los años 88 y 92, y Doug Moe, entre 1976 y 1982. Este año se cumple el decimonoveno de Pops, habiendo llegado un año antes que Tim Duncan, con quien ha ganado sus cinco trofeos Larry O'Brien.

Es evidente que las figuras individuales del equipo también tienen que ver en este subidón de vértigo del último mes. Tony Parker es un claro ejemplo, ya que le ha costado coger el ritmo de competición, tras comenzar la temporada vacilante, perdiéndose varios partidos. Sin embargo, es el segundo líder en puntos por partido del equipo, con 14,5 y el primero en asistencias, con 5 por noche. Mención aparte merece Kawhi Leonard, que ha jugado 60 partidos, yendo muy claramente de menos a más, tanto que (aparte de un partido de diez puntos), no ha bajado de 13 puntos de anotación en los últimos 22 encuentros y le ha robado siete balones a los impolutos Warriors de Stephen Curry.

Los Caminantes de la Noche, según el tráiler de Juego de Tronos adaptado a la liga de baloncesto norteamericana. Una descripción acertada, ya que no se sabe que están, hasta que atacan para destrozar totalmente. Lo hacen en el momento en el que nadie lo espera y, aunque saben que siempre lo han hecho, nunca se les pone atención hasta que muerden.

Sus cinco mejores tiradores de tres puntos por encima del 36% y sólo un jugador promedia más de 30 minutos por encuentro: Kawhi Leonard (31,4), con 23 años.

Ese baloncesto que roza la perfección colectiva, en un grupo sin egos, sin grandes estrellas dentro de un vestuario unido, aunque siempre se podrán calificar como estrellas de la liga a Kawhi Leonard, Tony Parker, Manu Ginobili o (por supuesto) Tim Duncan, rodeados de jugadores con muy buenas y diferentes cualidades, como Danny Green (12 puntos por partido con un 42% en tiros de tres puntos), Tiago Splitter, Boris Diaw o Patty Mills, y se podría seguir hasta completar los 13 jugadores que completan su plantilla y que, en muchos partidos, Gregg Popovich ha dado entrada. Esa frescura es seguro una de las claves.

Manu Ginobili comentó recientemente que se retirará en uno o dos años, pero que actualmente disfruta jugando al baloncesto, aunque no tenga el físico de antes, y que esa carencia la suple con inteligencia en la pista. La definición perfecta del juego que ya ha tomado la marca Spurs: un pase más, un movimiento más, si la canasta puede ser más fácil, ¿por qué no hacerla más sencilla? Todo ello aderezado con el trabajo por costumbre, por el aliento en el cogote de Gregg Popovich, que cuenta a su lado con asistentes de la talla de Ettore Messina, uno de los mejores entrenadores de los últimos años en el viejo continente.

www.jameshouden.com

Sus cinco mejores anotadores desde el perímetro superan en 36% en tiros de tres puntos y sólo un jugador supera los 30 minutos por encuentro, y es Kawhi Leonard, a sus 23 años (¿Hasta los 39 como Tim Duncan?). El segundo en esa lista, curiosamente, es el segundo jugador más veterano de la liga, empatado en años con el base Andre Miller, Timmy Duncan, sin fecha de caducidad, con sus 13,7 puntos y 9,1 rebotes de media.

Muchas cosas son sabidas de este equipo, que funciona como un reloj, aunque muchas también desconocidas, como cuál es su techo esta temporada. Lo que queda más claro que el lago Michigan es que si continúan como el último mes, tan parecidos a la temporada pasada, los éxitos pueden asemejarse a los del pasado junio. El bautizado por muchos como el mejor juego jamás visto sobre un parquet de Estados Unidos, ese equipo que llegó al descanso de un partido de las Final de la NBA con un porcentaje de tiro superior al 70%, ha vuelto a acariciar ese nivel, y, de ser eso totalmente cierto y teniendo la certeza de que Michael Jordan no va a volver al baloncesto profesional, nadie les podrá parar.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Ginés Gómez
Redactor y co-coordinador de NBA VAVEL. El trabajo más idiota es el que no se disfruta. I feel basketball! También viviendo la actualidad NBA en twitter :) @GinesitoNBA