En el American Airlines Arena de Miami se veían las caras dos equipos con mucho en juego en esta última semana de temporada regular, Miami Heat y Chicago Bulls. Los locales venían de ganar a los Charlotte Hornets y necesitaban la victoria para mantener vivas sus opciones de clasificarse para los playoffs, mientras que los Bulls llegaban al encuentro inmersos en una racha de dos derrotas consecutivas y en plena pelea con los Toronto Raptors por hacerse con la tercera plaza de la Conferencia Este.

El técnico local, Erik Spoelstra, tenía la baja de Henry Walker, además de las ya sabidas de Chris Bosh, Josh McRoberts y Shabazz Napier. Por su parte, Tom Thibodeau no podía contar con Jimmy Butler, pero recuperaba a Derrick Rose que ya había jugado algunos minutos contra Orlando en la pasada jornada. Estos dos equipos ya se habían visto las caras varias veces en lo que llevamos de temporada regular, con una victoria para cada uno. Chicago superó a los Heat en su visita a Miami, y los de Florida hicieron lo propio con los Bulls en el encuentro que se disputó en el United Center.

Igualdad y poco acierto

En los primeros compases del encuentro asistimos a un gran duelo interior entre Hassan Whiteside y Pau Gasol, con ambos equipos anotando con facilidad y con un gran porcentaje de acierto en el tiro, 10-10. Chicago mandaba en el marcador, pero solo tres de sus jugadores sumaron puntos en este primer cuarto, el mencionado Gasol, Rose y Brooks.

Miami fue encontrando su juego con el paso de los minutos, liderados por Whiteside desde la zona, y con Dragic y Wade dirigiendo las operaciones desde el perímetro. El primer periodo finalizó con ventaja para los Bulls, 18-20, pero con mucha igualdad en todos los aspectos del juego, en especial en el lanzamiento a canasta, faceta en la que ambos conjuntos fueron de más a menos en estos primeros doce minutos de partido (Chicago, 10-27 TC; Miami, 9-23 TC).

Beasley catapulta a los Heat

El guión del primer cuarto se mantuvo en los instantes iniciales del segundo periodo, con máxima igualdad en el juego, pero con los locales ligeramente por delante en el electrónico, 27-26. Según avanzaba el choque, Miami comenzó a marcar las primeras diferencias de la noche, 34-28, liderados por Wade y Dragic, bien secundados por Whiteside.

La irrupción de Beasley catapultó en el marcador a los Heat, que endosaron un parcial de 29-6 a los Bulls en poco más de seis minutos. Miami subió considerablemente su porcentaje de acierto en el tiro, sobre todo desde el perímetro, donde contó con un inspirado Beasley (3-3 T3 en el 2º cuarto). Mientras que Chicago tan solo anotó tres canastas en juego en este segundo periodo (3-24 TC y 0-7 T3), un lastre que les llevó a caer por hasta 19 puntos, 51-32, a la finalización de la primera parte del encuentro. Los de Spoelstra tenían el encuentro donde querían, con una cómoda ventaja en el marcador de cara a la parte decisiva del choque y con todos los jugadores aportando en ambos lados de la cancha.

Chicago remonta y sentencia

Tras el paso por los vestuarios los de Thibodeau se pusieron manos a la obra para remontar el partido, situándose rápidamente a poco más de diez puntos, 51-39, después de anotar su primer triple de la noche. Los Heat se contagiaron del poco acierto de Chicago en el segundo cuarto y comenzaron a fallar las canastas que antes anotaban. Cinco minutos pasaron hasta que Miami anotó su primera canasta, lo que aprovecharon los Bulls para recortar la diferencia y colocarse a tan solo cinco puntos mediado el tercer periodo, 57-52.

Los de Spoelstra se quedaron un tan solo ocho puntos anotados en este cuarto, bajando considerablemente su porcentaje de acierto en el tiro y perdiendo el dominio que tenían en otros aspectos del juego como el rebote o la anotación desde la pintura. Un parcial de 14-0 favorable a los visitantes, les permitió llegar al último y definitivo periodo con ventaja, 59-65. Chicago había llegado a perder de hasta 19 puntos, pero liderados por Gasol (16 puntos y 15 rebotes), y Brooks (14 puntos) y Gibson (14 puntos y 12 rebotes) entrando desde el banquillo, habían logrado darle la vuelta al partido a base de defensa y trabajo en equipo.

Los Bulls ampliarían la ventaja hasta la decena de puntos en los primeros compases del último cuarto, 59-69, una diferencia que sería insalvable para los Heat, ya que no lograron encontrar el juego que les coronó en el segundo periodo. Se llegaron a situar a ocho puntos en varias ocasiones, pero en ningún momento pusieron contra las cuerdas a la defensa de Chicago, que certificaría la victoria a poco más de tres minutos del final con dos triples de Mirotic, 78-89. Con este triunfo los pupilos de Thibodeau vuelven a ocupar la tercera plaza de la Conferencia Este, mientras que Miami se complica su presencia en los playoffs, ya que se encuentran a más de un partido del octavo clasificado a falta de tres encuentros para llegar al final de la temporada regular.

Ambos equipos volverán a la acción en la jornada del sábado. Los Chicago Bulls regresarán al United Center, donde se medirán a Philadelphia 76ers. Por su parte, los Miami Heat recibirán la visita de los Toronto Raptors, en un partido clave de cara a sus aspiraciones de estar en los playoffs.