Tras una larga Temporada Regular en la que Chicago Bulls terminaba en la tercera posición de la Conferencia Este y Milwaukee Bucks finalizaba sexto, los dos primeros puntos de la eliminatoria iban a parar a manos de los Bulls, por 103-91 y 91-82 respectivamente para colocarse 2-0, disputándose el tercer punto en el BMO Harris Bradley Center.

A sabiendas de la importancia que tenía el partido, Jason Kidd afrontaba el encuentro con todas sus grandes bazas en cancha, con un quinteto inicial formado por Michael Carter-Williams, Khris Middleton, Giannis Antetokounmpo, Ersan Ilyasova y Zaza Pachulia. Por su parte, Tom Thibodeau arrancaba el partido con Derrick Rose, Jimmy Butler, Mike Dunleavy, Joakim Noah y Pau Gasol.

Máxima igualdad al comienzo

A pesar de que los Bulls arrancaran con un parcial de 4-10 a su favor, siete pintos consecutivos de Milwaukee darían la vuelta al marcador por poco tiempo, siendo Pau Gasol quien conseguía volver a poner a Chicago por delante, pasando el ecuador del primer cuarto con un marcador de 11-12 para los visitantes, teniendo que pedir tiempo muerto Jason Kidd para reajustar cosas en su equipo.

Con un pabellón entregado a los Bucks, la franquicia local demostraría querer alargar la eliminatoria, por lo que pronto daban la vuelta al electrónico, poniéndose con cinco puntos de ventaja. Por medio de un triple de Tony Snell y una canasta en suspensión de Derrick Rose sobre la bocina, Chicago Bulls recortaría la desventaja y conseguiría que al final de los doce primeros minutos de partido el marcador reflejara un empate a 27 puntos.

Milwaukee desaprovecha una amplia ventaja

Un nuevo arreón de Milwaukee llegaría en los primeros compases del segundo cuarto, logrando colocarse con hasta siete puntos de ventaja. La ventaja de los Bucks crecería como la pólvora y segundos por encima de llegar al ecuador del segundo parcial, ni más ni menos que quince puntos era la renta que el equipo de Jason Kidd se encontraba a su favor, teniendo Tom Thibodeau que levantarse cabreado de su asiento para pedir un tiempo muerto que detuviera la sangría anotadora favorable a la franquicia local.

Foto: Milwaukee Bucks

De la mano de un espectacular Derrick Rose, un parcial de 0-14 a favor de los Bulls haría que el conjunto visitante se colocara a tan sólo dos puntos con un minuto por jugarse. Giannis Antetokounmpo se echaría a Milwaukee a la espalda para con una canasta en suspensión hacer llegar el partido al descanso con un marcador de 53-49, quedando aún 24 minutos por decidir el tercer punto de la serie de Playoffs. 

Aparece la intensidad defensiva de Chicago

Quedando atrás una primera mitad de infarto, los Bulls saldrían claramente con una mentalidad diferente que les haría dar la vuelta al marcador poniéndose con dos puntos de adelanto. El marcador iría sufriendo cambios en el dominio casi continuos, pasando de Chicago a Milwaukee como la espuma, algo que entusiasmaba a los aficionados locales.

Foto: Chicago Bulls

Hasta los siete puntos de ventaja se iría el electrónico en favor de Chicago, y es que Derrick Rose no encontraba freno en la blanda defensa de Milwaukee, que se rendía al poderío del base visitante. No sabría como reaccionar al poderío de los Bulls, Milwauke, y es que la franquicia visitante terminaba el tercer cuarto con un marcador favorable de 71-74, tras fallar Jimmy Butler sobre la bocina.

Chicago y Milwaukee firman la prórroga

Imparables era la palabra que definía a los Bulls, y es que bordaban el baloncesto en la segunda mitad con un Derrick Rose fusilando desde la línea de tres puntos con un cinco de siete a falta de ocho minutos para el final, momento en que el marcador reflejaba un 73-82 favorable a Chicago.

Foto: Milwaukee Bucks

Tony Snell aparecería en el momento oportuno, cuando más apretaban los Bucks, el jugador de Chicago anotaría dos triples consecutivos que darían aire a su equipo en el electrónico. Khris Middleton también se uniría a la fiesta y con dos triples al hilo conseguiría que Milwaukee estuviera tan sólo dos puntos abajo con un minuto por jugarse. Middleton a diez segundos de la conclusión pondría a los Bucks un punto arriba, y Derrick Rose empataría el encuentro a 95 con 4.9 segundos. Sobre la bocina Middleton lo intentaría y fallaría, terminando con 95-95 yéndose el encuentro a la prórroga.

Una prórroga no es suficiente

Cinco minutos extra tendrían los equipos para sacar el partido hacia delante, pero la igualdad sería la tónica que marcara la prórroga, y es que con menos de un minuto por jugarse el marcador reflejaba 101-101. Jimmy Butler fallaría desde la línea de tres puntos, y OJ Mayo sobre la bocina tampoco conseguiría introducir el balón en el aro, por lo que el encuentro se iba a una segunda prórroga, tras mantenerse el empate, en este caso a 101 puntos.

Foto: Milwaukee Bucks

Chicago no sucumbe

No estarían acertados los Bucks de cara al aro y eso lo pagarían con creces ante Chicago, que cogería ni más ni menos que una distancia de seis puntos, ampliada hasta ocho con una bandeja en suspensión de Derrik Rose. Sabiendo aguantar el resultado a base de casta y coraje, Chicago Bulls se llevaría el tercer partido de la eliminatoria tras 58 minutos por 106-113 con 34 puntos, cinco rebotes y ocho asistencias, de Rose, acompañado por un nuevo doble-doble de 17 puntos y catorce rebotes por parte del español Pau Gasol.