Un diamante en bruto, aún por pulir. Mario Hezonja ha decidido dar el salto al draft del presente año que se celebrará en la ciudad de Nueva York, el 25 de junio. Los estudios le sitúan, como mínimo, entre los diez primeros seleccionados, en torno al 7-8. Aunque ello es variable, cartel no le falta. Tiene una fianza de dos millones de euros con el Barça, que deberá abonar si finalmente sale.
Lo anunció su agencia de representación, Wesserman Media Group, después de caer en Euroliga, con un triple final de Printezis, ante Olympiakos, en un partido en el que no disputó ni un minuto. Xavi Pascual, técnico del Barcelona, no viene confiando en él en los playoffs para entrar en la Final Four de la Euroliga. Sus estadísticas en liga Endesa son, en 28 partidos, de 4,8 puntos, 1,5 rebotes y 1,3 asistencias, en 15 minutos de juego.
20 años, 2,02 metros y 99 kg. Muelles en los pies, muñeca privilegiada y liderazgo innato, una perla del baloncesto europeo
A sus 20 años recién cumplidos, le atrae el jugar en la liga norteamericana, así como la NBA lleva fijándose en el de Dubrovnik unos años, desde que empezara a destacar en la Adecco Oro. Esta temporada, aunque no ha sido un fijo de Xavi Pascual todo el año, ha tenido minutos importantes, y partidos en los que ha dejado claro cuál es su estilo, con actuaciones de superestrella, como los 22 puntos que le hizo al Real Madrid en el Top 16, u otros 15 que le anotó también al equipo de Pablo Laso, en ACB, con 5/6 en tiros de tres.
Este chico tiene algo, de eso no cabe duda. Sus armas: muelles, descaro y un liderazgo inusitado para un jugador de su edad y de su poca experiencia. Todo combinado con una muñeca de oro, mecánica excelente y mentalidad de ganador. Todo hace indicar que si retrasara su salto uno o dos años, sería una eminencia en Europa y en su club, atesorando un mayor volumen de minutos. Se ha visto perjudicado individualmente por la vuelta de Navarro y el resto de jugadores de perímetro al ritmo de competición, viéndose muy beneficiado en el grueso de la temporada por la plaga de lesiones sufrida por los exteriores azulgranas.
En una entrevista el 24 de marzo, recogida en un diario croata, dijo lo siguiente: "Yo debería ser el próximo número uno del draft". Distintivos de personalidad fuerte, como en febrero, cuando le preguntaron sobre si iría a ver a Leo Messi al Camp Nou, a lo que contestó: "¿Ir a ver a Messi? Que venga él a verme a mí". Además, hizo moverse a Danny Ainge, jefe de operaciones de los Celtics, hasta el Palau Blaugrana, en el enfrentamiento contra Galatasaray. Poco más que añadir.
No cabe duda de que estamos ante una de las elecciones más morbosas del próximo draft, que puede dar mucho que hablar en los próximos años. Talento a rebosar y un carácter firme, de campeón. El futuro le augura grandes cosas a SuperMario, uno de los mayores diamantes en bruto que, presumiblemente, cruzará el charco el próximo verano, hacia el sueño americano del baloncesto.
