Sus maltrechas piernas han intentado acabar con él una y otra vez, pero nada ha podido con él. Derrick Rose, la gran estrella de Chicago Bulls en el siglo XXI y el que fue en 2011 el MVP más joven de la historia, vuelve a ocupar todas las portadas por sus virguerías sobre una cancha de baloncesto. Contra unos aspirantes al anillo como Cleveland Cavaliers, con la serie empatada 1-1 y soportando la presión del último tiro, el ídolo de Illinois rememoró el famoso 'The Shot' de Jordan para ejecutar a LeBron James y compañía y dar una ventaja crucial a los suyos en su búsqueda de las Finales de Conferencia. Derrick Rose no ha vuelto, porque nunca se fue.

Inicio atípico

Tardaron algo más de dos minutos en estrenarse en el marcador Bulls y Cavaliers después de un comienzo accidentado sin acierto. Con cinco minutos disputados, el marcador de 4-2 reflejaba la poca inspiración anotadora de los dos contendientes. Fue un primer cuarto atípico, en el que los puntos se repartieron entre muchos jugadores, y James fue el máximo anotador con apenas cinco puntos. Cleveland enmendó sus malos números en tiros de campo, y su 42,9 % de acierto comparado con el 26,9 % de los locales fue clave para el tanteo final del primer cuarto: 18-24.

Como en el primer periodo, pasaron unos minutos iniciales del segundo cuarto imprecisos. Ambos conjuntos se apresuraron en exceso a la hora de buscar puntos, y atravesaron una fase de juego atropellado. Cleveland acusó la mala racha chocando contra la defensa de los Bulls, y permitió a los locales acercarse en el marcador.

Imprecisión e igualdad definieron los dos primeros cuartosLeBron James se echó entonces a su equipo a la espalda, y atacó la defensa contrincante haciendo valer su poderío físico con penetraciones que no supieron parar los hombres de Thibodeau. Para contrarrestar la aparición de The King, los Bulls confiaron muchos balones a Mirotic, que aportó 11 puntos en el cuarto, y Dunleavy, que sumó diez y dio otro aire al equipo con su aportación.

La contienda subió sus revoluciones, y con ello Cavs y Bulls intercambiaron canastas para no dejar escapar a nadie en el marcador. Se reencontraron con la precisión desde la línea de tres puntos y tiradores como Smith o Brooks sacaron a relucir su muñeca para generar ventajas. Sin embargo, el tanteo al descanso se mantuvo apretado: 47-49.

Calentando motores

Tras el paso por vestuarios, el duelo se mantuvo en la cuarta marcha, dinámico y muy exigente a ambos lados de la cancha. Rose en Chicago y James en Cleveland fueron las puntas de lanza, aportando puntos en el arte del ataque a las zonas con penetraciones y moviendo a sus equipos haciendo circular el balón.

Los dos equipos se enzarzaron varias veces mientras las pequeñas diferencias continuaron vigentes en el tercer cuartoLos árbitros pitaron una técnica a James después de que el 23 realizara un espectacular mate ante Noah y acto seguido increpara al ala-pívot de los Bulls. Ese suceso fue un aviso: la contienda comenzaba a calentarse. Nadie quería ceder terreno con 1-1 en la serie, y si alguien quería conseguir la segunda victoria debía bajar al barro.

La pelea siguió marcada por pequeños parciales contestados rápidamente para no permitir brechas importantes en el tanteo. Los Cavaliers aguantaron los tirones de unos Bulls apoyados por un público que aprovechaba la mínima ocasión para desgañitarse. Un triple de Dunleavy cerró el cuarto poniendo por delante a Chicago (74-73) y encendió el United Center.

Turno para las estrellas

Como no podía ser de otra manera, el mano a mano sin tregua siguió definiendo el choque. Llegó el tiempo de los grandes, los que no se arrugan cuando el reloj se acerca al final, e Illinois vivió un bonito careo entre James y Butler. El alero de los Cavs propuso varios aclarados para poder medirse al escolta de los Bulls, y The King resolvió con garantías varios tiros en suspensión cruciales para seguir con la igualdad. En el otro aro, el propio Butler y Rose monopolizaron las posesiones y mantuvieron constantes las pulsaciones de los suyos.

Con Irving desconectado durante toda la noche, secundarios como Thompson, que se partió la cara bajo los tableros para capturar rebotes y defender el aro visitante, y Smith, que empató el marcador a 91 con un triple a falta de dos minutos, prestaron una ayuda fundamental a James.

Rose y Butler en los locales y James en los visitantes monopolizaron las posesiones en un último cuarto con todo por decidirA falta de un minuto para el final, Chicago llegó con 92-91 a favor. El United Center se levantó al completo para vivir los últimos segundos en pie, pero tras una buena defensa visitante los Bulls agotaron su posesión y, en el turno de Cleveland, el omnipresente James puso un peligroso 92-93 con 41 segundos por jugar gracias a dos tiros libres.

El escenario no intimidó lo más mínimo a Butler. Thibodeau entregó el alma de los Bulls a su escolta y Rose, y dio una posesión capital al dorsal 21. Butler resolvió un cara a cara con Smith remontando la línea de fondo, amagando y encestando dos puntos fáciles. 94-93, y turno para Cleveland con 33 segundos en el reloj.

Falló James una bandeja desesperada contra toda la defensa, y mandó inmediatamente después a Gibson a la línea de tiros libres con una falta intencionada para detener el reloj. El de los Bulls cumplió encestando los dos intentos desde la línea, y a los Cavaliers les quedaría una última bala para empatar el partido con 96-93.

'The (New) Shot'

Con la soga al cuello, no fue James, de quien todo el United Center esperaba que saliese el tiro para empatar, el que ejecutó el lanzamiento. El movimiento en el perímetro de Cleveland habilitó un tiro abierto para Smith, y The King cedió la pelota a su compañero para que este decidiera el destino de los de Ohio. Macarra, indisciplinado y rebelde, pero también osado y valiente cuando los focos le iluminan, Smith puso las tablas con un tiro que introdujo limpia la bola en la red. La presión pasaba ahora a unos Bulls que veían cómo se les había escapado una muy valiosa ventaja. Aún tenía que llegar lo mejor.

26 años después del 'The Shot' de Michael Jordan, Rose volvió a inventar una canasta ganadora imposible contra Cleveland sobre la bocina26 años se cumplieron el pasado 7 de mayo de aquella canasta ganadora de Michael Jordan en el quinto partido de la primera ronda del Este contra Cleveland Cavaliers, conocida como 'The Shot'. El ídolo del siglo XXI en Chicago, Derrick Rose, decidió en la madrugada del 8 al 9 de mayo de 2015 inventar un nuevo lanzamiento inolvidable tras los pasos de Air. Otra vez playoffs, otra vez Cleveland, otra vez en un momento crucial. Recibió de Dunleavy desde la banda, buscó un espacio inexistente sin apenas tiempo y soltó el balón con más fe que técnica. El esférico naranja tocó el cielo, bajó, rebotó en el tablero y entró mientras la bocina sentenciaba el partido.

La mirada serena, seria, orgullosa e implacable con la que Rose observó a una grada en éxtasis y rendida a sus pies fue la de un jugador que, tras alcanzar la cima con su premio MVP en el año 2011, ha sufrido un calvario de lesiones continuo en los últimos tres cursos para regresar ahora con todas sus fuerzas. El triple milagroso de Rose es un "estoy aquí" en toda regla, un recordatorio para todo aquel que le haya olvidado. Pero no solo el base de Chicago avisa al mundo del baloncesto: los Bulls, con 2-1 en su serie contra Cleveland, advierten de que no son un farol. Puestos a recordar a Jordan, en Illinois quieren volver a tocar la gloria.