El primer gran contrato ya está cerrado. Apenas unas horas tras comenzar el periodo de negociación, en New Orleans se aseguraban de que el futuro de la NBA se quedase en casa. Firmaban al ala-pivot, Anthony Davis, por el máximo, cinco años y 145 millones de dólares. Este nuevo acuerdo le convierte en el jugador mejor pagado de toda la liga y le permite añadir cinco intentos al anillo con los Pelicans a los tres que ya ha realizado. Aunque no es agente libre, era un movimiento esperado por ambas partes de cara a construir una franquicia ganadora alrededor de la estrella que desde el primer minuto no dejó indiferente a nadie.

Savia nueva para el éxito

"Quiero que sigas trabajando y expandiendo tu tiro. Puedes ser un buen tirador desde la esquina", le comunicó Gentry

El gran cambio que ha habido últimamente en New Orleans ha sido la contratación del ex-ayudante de Steve Kerr, y reciente campeón de la NBA, Alvin Gentry. Un entrenador que sabe cómo moverse en ataque sin descuidar el aspecto defensivo. Davis necesita un cuerpo técnico que le ayude a mejorar áreas de su juego. Y parece confiar en su nuevo entrenador para conseguirlo.

Foto: nba.com

Un jugador que toda franquicia querría

La pasada campaña Anthony Davis llevó a los Pelicans a los playoffs dominando a lo largo de la fase regular. Sus números parecen propios de alguien que va a dejar su huella en este mundo (24.4 puntos, 10.2 rebotes, 2.9 tapones y 1.5 robos por partido). En principio no ha habido cambios en el vestuario por lo que el equipo podrá seguir creciendo con las mismas bases, aunque si quieren dar un cambio de efecto necesitan incorporar agentes libres que puedan aportar de forma significativa con un espacio salarial ajustado. Por lo demás, el futuro en New Orleans se presenta esperanzador con uno de los mejores jugadores en sus filas.