El ex jugador de Club Baloncesto Sevilla continúa levantando una expectación, en este caso positiva, antes de que comience la liga de baloncesto más seguida del planeta. Los Knicks debutarán el 28 de octubre ante los Bucks de Milwaukee.

El letón, número cuatro del último Draft del pasado 26 de junio, solo por detrás de Karl-Anthony Towns, elegido por los Wolves, de D’Angelo Russell, por los Lakers y Jahlil Okafor, por los 76ers, tiene encandilado al cuerpo técnico neoyorquino que ve en él a un jugador con unas cualidades tremendas y una gran ética del trabajo que podría marcar la diferencia en la competición dentro de pocos años.

Desde New York se confía mucho en las posibilidades de Kristaps Porzingis

De hecho, el entrenador asistente de Derek Fisher, Kurt Rambis, cree que Porzingis puede ser una mezcla entre Dirk Nowitzki y Pau Gasol, palabras mayores que el de Indiana no duda en afirmar: "Puede que sea una combinación entre ambos porque puede hacer muchas cosas. Todavía no lo habéis visto y puede que no se vea hasta dentro de tres, cuatro o cinco años. Tiene que crecer como jugador, madurar, desarrollar su juego, ponerse fuerte y acostumbrarse a la NBA. Ya entiende el baloncesto. Sabe lo que tiene que hacer. No es egoísta y toma muy buenas decisiones. Sabe cómo jugar. Va a ser divertido trabajar con él".

A sus escasos 20 años, el de Liepaja lleva todo el verano trabajando duro para llegar lo mejor posible al inicio liguero. De hecho, en estos meses, ha ganado peso y músculo, clave para triunfar en esta NBA. Los Knicks están muy ilusionados con las ganas con las que el jugador ha llegado hasta New York aunque aún no se sabe si será titular (en ese caso Carmelo Anthony jugaría de alero) o el gigantón letón tendrá que salir desde la banqueta.

Fotografía: Usatthebiglead