Rajon Rondo está viviendo una etapa difícil en su carrera deportiva. A nivel estadístico y de juego no ha recuperado el nivel que llegó a alcanzar en su época de máximo esplendor y además suele sufrir algunos problemas extradeportivos allá donde va. 

Desde la desintegración del equipo que ganó el anillo para los Boston Celtics, Rondo no lo ha tenido nada fácil. Se quedó atrapado en un equipo en reconstrucción sin aspiraciones reales para el anillo. Luego le vino una lesión bastante grave, y para cuando volvió a jugar en un equipo que seguía lejos de los puestos altos de la Conferencia Este, fue traspasado a Dallas. Allí su adaptación no fue sencilla, problemas para adaptarse al juego de los Mavericks y problemas con su entrenador Rick Carlisle hicieron que su breve estancia en el estado de Texas no fuera demasiado prolífica.

No está yendo demasiado bien. Hemos tenido un par de discusiones los últimos días. Espero que podamos seguir hablando y la cosa mejore

Ahora la polémica se traslada hacia Sacramento. Sin haber empezado todavía la temporada regular, la franquicia ya ha tenido que lidiar con el problema DeMarcus Cousins, y cuando parece solventado llega Rondo. Al igual que el center, el problema de Rondo es de nuevo con su entrenador, esta vez con George Karl, fichado este mismo verano: "No está yendo demasiado bien. Hemos tenido un par de discusiones los últimos días. Espero que podamos seguir hablando y la cosa mejore". Esas fueron las palabras del base a 'Cowbell Kingdom'. 

Pero no todo son malas noticias. Rondo también se muestra contento de estar en su nuevo equipo, desando poder hacer cosas grandes con DeMarcus Cousins, algo que ya se está pudiendo ver en los partidos que los Sacramento Kings van disputando en la pretemporada de cara a la preparación del inicio de la liga regular.

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Javier Jiménez Montoya
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