Con la máxima igualdad como marco principal desarrollo, el factor Paul George acabó siendo diferencial en el duelo entre Pacers y Magic. Con 27 puntos (19 de ellos en el primer cuarto y cinco en los últimos seis minutos de partido), la estrella de Indiana reiteró su magnífico nivel en la vuelta a la senda de la victoria de su equipo. Por parte de los visitantes, un Evan Fournier en estado de gracia (21 puntos) volvió a ser el más destacado en un equipo que no pudo contar con Nikola Vucevic, su máxima estrella ofensiva.

Exhibición ofensiva de Paul George

Si bien su aparatosa lesión amenazó con condenarle en el olvido, Paul George se está encargando en este inicio de temporada de recordarle a todo el mundo el fantástico jugador que es. Y este partido ante los Orlando Magic no ha sido una excepción. Asumiendo los galones desde el salto inicial, el jugador natural de Palmdale comenzó el partido con una fantástica serie de tiro, anotando siete puntos consecutivos y dando las primeras ventajas a su equipo (3-9, minuto 3). 

Estos primeros compases del encuentro dejaban claramente, una vez más, el destierro del plan de usar a Paul George como cuatro abierto, pues era CJ Miles quien ejercía este rol, mientras que PG se encargaba de defender a Fournier en la posición de alero.

Por parte de los visitantes, el inicio mostró las consecuencias ofensivas de la ausencia de Vucevic: demasiado tiro exterior al no poder contar con su principal referente interior y generador ofensivo. Sin embargo, gracias a una magnífica primera línea defensiva, encabezada por Víctor Oladipo, los Magic robaban el balón para anotar fácil al contraataque y mantener la igualdad en el marcador.

Tras ver cómo Orlando tomaba la primera ventaja del partido, Paul George daba otro paso más al frente, forzando una falta desde el triple y conseguiendo un 2+1, y prolongar así su exhibición anotadora en los primeros diez minutos: 19 puntos de los 25 que sumó su equipo con un inmaculado 2/2 en triples y 6/9 en tiros de campo.

Llegan los errores, se mantiene la igualdad

En los primeros compases del segundo cuarto, pudimos ver el porqué Mario Hezonja es una de las grandes promesas del último draft. Absorbiendo 2vs1 y doblando el balón junto con una magnífica acción de poste bajo ante Paul George, el jugador croata demostraba que es mucho más que un gran tirador. Estas acciones, sin embargo, eran la excepción en unos Magic perdidos en ataque.

Sin contar con grandes tiradores, el equipo dirigido por Scott Skiles abusó del triple en malas selecciones de tiro (4/15 desde el perímetro al descanso) concediendo las primeras ventajas importantes del partido (parcial de 0-9, minuto 18).

Sin contar en este segundo cuarto con la anotación de su principal estrella, Indiana no supo aprovechar esta situación desde la segunda unidad y echó por tierra la renta obtenida. Un acertado Elfrid Payton (11 puntos, cuatro asistencias al descanso) mantenía el pulso anotador provocando la llegada al descanso con una igualdad máxima: 48-49.

Orlando toma el mando del juego

El regreso de los vestuarios arrojó a ambos equipos cometiendo demasiados errores en el manejo de balón, cometiendo excesivas pérdidas sin forzar en los primeros compases del tercer cuarto. Esta situación inicial quedaba reflejado en una mala versión de Paul George, que acumulabra tres pérdidas consecutivas y cometía errores defensivos que devolvían el liderazgo en el marcador a Orlando (58-55, minuto 27).

Los Magic, gracias a buenas acciones de poste bajo de Harris sobre Miles, tomaban el mando del desarrollo del juego, llegando a obtener su máximo ventaja del partido (+5) mediado este tercer período. Sin embargo, debido a su excesiva acumulación de faltas, vieron como unos Pacers erráticos en el ataque en estático, sin una buena circulación de balón, llegarían por delante en el marcador (71-72) al último cuarto gracias a sumar desde el tiro libre.

Aparece PG para decidir el partido

Con la segunda unidad en pista, el inicio de los últimos diez minutos se caracterizón por una versión gris de Aaron Gordon: malas acciones ofensivas e incapaz de parar a Jordan Hill, cargando a su equipo de faltas de manera temprana. Sin embargo, dos buenas acciones de CJ Miles junto a un triple de Channing Frye certificaban un parcial de 8-0 que ponía el 81-78 en el marcador a falta de siete minutos para el final.

Fue ahí cuando apareció el talento de Paul George para decantar el partido. Asumiento toda la responsabilidad, el alero encadenó una sucesión de jugadas positivas (triple, dos asistencias y dos tiros libres) para certificar la victoria de su equipo con un parcial de 13-0 (81-90, minuto 44). Los Orlando Magic, totalmente superados, fueron incapaces de contrarrestrar desde el ataque el poderío local, viendo así truncada su racha de dos victorias consecutivas con un marcador final de 84-97 que no reflejaba la continua igualdad del choque.