Con un buen récord inicial de 6-1, los Cleveland Cavaliers recibían en el Quicken Loan Arena a unos Utah Jazz que están rindiendo muy bien en este inicio de temporada pero que en la noche de ayer tenía todo en contra en Ohio. Los Cavaliers, habían conseguido hasta la fecha 15 victorias en 16 encuentros contra equipos de la Conferencia Oeste y ocho de manera consecutiva. Por su parte los Jazz venían como una de las mejores defensas de la liga con el objetivo de frenar a LeBron y compañía en la lucha por otra victoria que les diera algo de margen en su objetivo por conseguir la octava plaza que da acceso a Playoffs.

Los visitantes empezaron muy bien el encuentro (2-7) liderados por Gordon Hayward que se ponía rápidamente con cinco puntos. Los de David Blatt iban a equilibrar el encuentro pronto de la mano de un perfecto Mo Williams que se iba hasta los nueve puntos sin fallo en el lanzamiento. Love iba a aportar también en el primer cuarto siete puntos y cuatro rebotes de mucho mérito ante Gobert. El francés se mostró muy dubitativo en los tres tiros que hizo en la primera mitad y lo que pudo aportar fue rebote, tanto ofensivo como defensivo. Los de Ohio mandaban cómodamente en el electrónico y lo hacían sin la mejor versión de Lebron James que cometía cuatro pérdidas impropias de él y se iba al descanso con menos del 20% en tiros de campo.

Hayward acerca a los suyos

Los jóvenes Jazz necesitaban que comenzara a aparecer el Hayward del año pasado para poder acercarse en el marcador y esto no tardó en llegar. El alero se echó literalmente el equipo a la espalda y con ocho puntos en el segundo cuarto lideró la remontada de Utah que se ponía a sólo cuatro puntos a la llegada del descanso. En los reservas locales, destacó Dellavedova que en sus primeros siete minutos iba a repartir dos asistencias además de encestar cinco puntos mostrándose muy valiente de cara al aro. No así Booker y Burke que en los de Salt Lake City sólo eran capaces de encestar un tiro de los cinco intentos que realizaron.

Sólo dos minutos después del descanso, Utah Jazz ya había empatado el encuentro y los Cavaliers eran un mar de dudas después de dejar escapar la ventaja de la que gozaban. Los visitantes aprovecharon bien las pérdidas y consiguieron 18 puntos a través de pérdidas por 8 de los de David Blatt.

Gracias a los seis puntos de LeBron y la aportación de Love o Thompson, parecía que Cleveland rompía el partido cuando colocaba 10 puntos de diferencia. Pero los jóvenes de Utah demostraron ser más maduros de lo que parece y no sólo remontaron si no que se pusieron por delante en el marcador desde el 3-5 en el primer cuarto. Solo una canasta de Dellavedova al final, dejaba el partido empatado con todo por decidir para el último cuarto.

Exhibición de LeBron

Los Jazz comenzaron muy concentrados el último cuarto en el que llegaron a ir mandando por nueve puntos gracias a un parcial de 13-3 y a que los visitantes anotaron nueve tiros consecutivos sin fallo. David Blatt paró el partido y fue entonces cuando apareció un imperial LeBron James para llevar a los suyos a la victoria.

El alero anotó 17 en los últimos 12 minutos y se mostró imparable así como decisivo en jugadas claves en las que cogió rebotes, asistió y robó balones para los suyos. El arreón final de Utah solo sirvió para que el juego se parara y los Cavaliers fueran a los tiros libres para terminar de certificar una victoria muy difícil ante un rival al que le faltó saber cerrar el partido pero que promete dar muchas alegrías a los suyos esta temporada.