Derrick Rose fue, es y será materia de charla en Chicago. Quien hace apenas unos años fuera el Jugador Más Valioso (MVP) más joven en la historia de la NBA hoy representa una figura completamente distinta y extremadamente controversial, por donde se lo mire.

En una extensa entrevista con el periodista de ESPN, Nick Friedell, el jugador de Chicago Bulls habló de su presente en esta temproada 2015/16. "Me siento bien, aunque todavía necesito tiempo para mejorar. Sé que es un proceso y lo único que debo hacer es sacar lo mejor de cada día para convertirme en un mejor atleta", comentó Rose. 

Uno de los cambios más relevantes dentro de los Bulls fue la salida de Tom Thibodeau y el ingreso de Fred Hoiberg como entrenador en jefe. "Honestamente, no pienso en Thibs (Thibodeau) desde el año pasado. Tuve una gran relación con él, pero ahora estoy pensando en Fred (Hoiberg) y el equipo. Creo que Fred es una gran persona y me parece que podremos ganar con él. Tiene toda mi atención y mi respeto", afirmó el base.

Es ya de público conocimiento que las lesiones crónicas que sufrió Rose lo obligaron a evolucionar, en ambas facetas de su vida. "Como persona, creo que soy más paciente. Como jugador, creo que mi IQ ha subido en estos años. Ahora elijo mejor mis momentos, en vez de ir al máximo todo el tiempo. No tengo que hacer eso con éste equipo", remarcó.

Uno de los temas centrales giró alrededor del trato de Rose con la prensa. "Lo que se dice de mí cambia semana tras semana. Lo único que puedo hacer es reírme, porque hablan de cosas que no conocen. Desde siempre, dije que quiero jugar toda mi vida aquí y retirarme aquí. Eso no va a cambiar", manifestó el ex MVP.

A pesar de todas las lesiones que ha sufrido, el espíritu de Rose se mantiene intacto. "Sigo siendo un fanático y un estudiante del juego. Cuando termine mi carrera, quiero que me recuerden como un ganador y como alguien que dio todo lo que tenía", expresó el nacido en Englewood.

Por último, el base habló sobre su relación con Jimmy Butler, un tópico que ha dado que hablar en los últimos meses. "Se que él estará conmigo en cualquier batalla. Sé que el dará todo y estoy feliz de tenerlo como compañero. Sin dudas, es el mejor jugador con el que me ha tocado compartir equipo (en Chicago). Pero ojo: todavía puede mejorar", detalló Rose.