Dirk Nowitzki es uno de los mejores jugadores que ha pasado por la NBA. Es la opinión de la mayoría. Solo hay que citar su extenso currículum: un campeonato, 13 participaciones en el All-Star, sexto anotador histórico, primer MVP europeo de la historia (y único hasta el momento)... La lista es muy larga, y solo es el reflejo de años de carrera que quedarán en la memoria de los aficionados de la mejor liga de baloncesto del mundo. Pero no todo son palabras amables para el jugador alemán de Dallas Mavericks. Como cualquier jugador, tiene una serie de admiradores y detractores. El último en dar su opinión acerca del juego de Nowitzki fue Kareem Abdul-Jabbar, el seis veces MVP y máximo anotador de la NBA.

Y su opinión no ha sido precisamente positiva. Y es que la leyenda de Los Angeles Lakers considera que el ala-pívot alemán no es un jugador dominante dadas sus carencias defensivas, por lo que le considera un jugador unidimensional. Todo esto salió a colación de que los periodistas comparasen el fade-away de Dirk con el famoso gancho (sky hook) del integrante del Salón de la Fama. Abdul-Jabbar no tardó en opinar al respecto: "Es un tiro muy difícil de taponar, pero no creo que le haya servido para ser dominante en su carrera. Si pudiese rebotear y taponar igual de bien, tendría más mérito. Para mí hubiese tenido mucho más valor si hubiese hecho otra cosa que no fuese solo tirar". 

Estas polémicas declaraciones levantaron ampollas, y el propio Dirk Nowitzki tuvo que salir a la palestra para comentar la situación. "No es la primera vez que él [Abdul-Jabbar] hace este tipo de declaraciones. Y no sé por qué". Estas fueron las primeras palabras del alemán, aparentemente confuso por el testimonio del jugador retirado. Posteriormente Nowitzki intentó razonar el porqué de estas críticas: "Supongo que no es muy fan de mi juego, lo cual está bien. Pero yo creo que fui dominante en mis buenos tiempos, en ataque especialmente". Por último, el ala-pívot lanzó un mensaje con el fin de zanjar la polémica: "Es uno de los mejores jugadores de toda la historia, así que no quiero empezar una guerra por esto. Respeto su opinión, pero no la comparto". Palabras que incitan a la tregua por parte del alemán, que el pasado 15 de enero fue nombrado tercer mejor ala-pívot de la historia por la cadena estadounidense ESPN, que parece no compartir la opinión del ex-jugador.