La Liga de Desarrollo de la NBA está en crecimiento. Cada vez más equipos poseen su propia franquicia para tener a esos potenciales miembros de la plantilla más seguidos por la directiva, y en una NBA donde el nivel sube cada año y no todo el mundo tiene plaza en los rosters, es muy importante observar a jóvenes promesas o veteranos con ganas de una última aventura en la mejor liga del mundo.
La gran innovación sería ampliar las plantillas de 15 a 17 plazas de cara a la temporada 2016-17, que es cuando acaba el actual convenio de la liga. ¿Qué supondría esto? 60 nuevos contratos profesionales en la NBA, algo que no sería ninguna quimera a nivel económico dado el nuevo contrato televisivo que elevará el margen salarial por encima de los 100 millones de dólares por equipo. "Podría ser una gran idea" - Comentó un directivo de la NBA, quién prefirió mantener su nombre en el anonimato.
Evidentemente, salvo lesiones de los miembros más asentados de cada plantilla, esos dos jugadores no siempre contarán con minutos en la franquicia NBA que les escoja y de la cual formen parte, pero eso no supone ninguna novedad respecto a muchos rookies o complementos para cada roster. La solución será la misma, asignarlos a la D-League, pese a su contrato NBA, cómo se viene haciendo desde que se creara esta liga en 2001.
Volviendo al tema económico, actualmente los jugadores inscritos en la D-League sin contrato alguno con ningún equipo de la NBA (aunque hayan jugado la Summer League) perciben aproximadamente 25.000 dólares por temporada, mientras que aquellos que forman parte de una de las 30 franquicias y son asignados temporalmente a la liga de desarrollo mantienen su salario. Aquí se introduciría un nuevo cambio para esos dos puestos adicionales por equipo: esos jugadores percibirían como mínimo 100.000 dólares al año por su contrato, aunque pasaran toda la temporada asignados a un conjunto de la D-League.
Adam Silver busca una liga con más oportunidades, menos jugadores que por falta de interés de los equipos de la liga se vayan a Europa y/o Asia. Probablemente no podrá frenar la nostalgia de algunos europeos por volver al 'viejo continente' ni la codicia de otros por los jugosos salarios de la liga china, pero de realizarse este cambio, la NBA daría un gran paso para crecer y ser todavía más global.