Tyronn Lue está aprendiendo a hacer su trabajo mientras hace su trabajo. Esa expresión, si bien carece de sentido gramático, hace alusión al presente de Cleveland Cavaliers, que hace poco más de dos semanas despidieron a David Blatt, técnico que había llevado a esta franquicia a las Finales en la temporada pasada.

El récord de Cleveland (36 victorias contra 14 derrotas) indica que el equipo está teniendo un buen año, pero la realidad es otra. Lue asumió como entrenador y se vio inmerso en una situación de inmensa presión desde el primer momento en el que se supo la noticia. 

Los problemas principales de los Cavaliers siguen ocurriendo en ofensiva. "Muchas veces caminamos con el balón en vez de correr. No creo que estemos en buena forma física. Estamos jugando un básquetbol sin decisión, porque no sabemos qué tipo de jugada vamos a realizar", confesó el joven entrenador de la franquicia líder de la Conferencia Este.

En los primeros 15 días desde la asunción de Lue, Cleveland ha disputado nueve encuentros. Es decir, practicamente no han tenido tiempo ni para respirar. "Sólo hemos tenido dos entrenamientos desde que soy director técnico. Tenemos mucho por mejorar", remarcó Lue.

LeBron James, uno de los principales adeptos al cambio realizado por la franquicia, sostuvo que ni Lue ni Mike Longabardi (nuevo coordinador defensivo) han tenido demasiado tiempo para enseñar sus sistemas. "Es un proceso difícil. Hemos jugado varios partidos en pocos días y no tuvimos tiempo para mirarnos y corregirnos. Creo que eso nos podrá ayudar", comentó James.

Antes del parón por el Partido de las Estrellas, Cleveland tiene que enfrentarse a Sacramento Kings y a Los Angeles Lakers. Ante tan poca competencia, el entrenador novato manifestó que pondrá un énfasis en las prácticas, para poder ir dándole forma a su equipo.

"Tenemos que seguir construyendo nuestro equipo. Hoy, nuestro ritmo ofensivo no es bueno. Debemos utilizar las prácticas para que nuestros jugadores vayan entendiendo los conceptos. Por ahora, la cosa viene difícil", cerró Lue. Mientras tanto los Cavaliers siguen primeros en el Este. Tiempo sobra, paciencia falta.