Si bien es cierto que Hinkie ha ido aglutinando talento a lo largo de estos tres años que Philadelphia ha vagado por el desierto, este no ha servido para ganar partidos. Política de ‘tanking’, mala fortuna con las lesiones o no dar con la tecla en el banquillo podrían ser algunas de las razones. Lo que es seguro, es que los Sixers solo han ganado 47 partidos y ha perdido 195 durante la estancia de Hinkie. No llega al 19% de victorias.

La familia Colangelo al rescate

Quizás la siguiente temporada, con todos sus prospectos sanos, el pick de este año, y piezas más acopladas, podrían dar un pequeño salto, traspasar algún jugador para compensar la plantilla y empezar a ganar. Pero Hinkie no ha aguantado la presión que le ha puesto la organización, con la llegada de Jerry -quien posee y ha dirigido varias franquicias de varios deportes-, que ocupa en estos momentos el puesto de director de operaciones de baloncesto, un puesto con bastante relevancia dentro de la franquicia, que cortaba el poder que ostentaba Sam antes de su llegada. El ya ex mánager general de la franquicia dimitió esta semana alegando que ya no tenía confianza para realizar los mejores movimientos de cara a los inversores.

Los Sixers ostentan un 18,7% de victorias en los últimos tres años

Para sustituir al defenestrado Hinkie llega el hijo de Jerry, Bryan. El propio Bryan ha conseguido ganar dos veces el premio a mejor ejecutivo del año, en 2005 con los Suns -entre otras muchas cosas por fichar a Steve Nash- y en 2007 en Toronto Raptors - por formar un equipo sólido, que pasó de 27 victorias en 2006 a 47 en 2007 y ganando su primer título de División, gracias en parte a varias operaciones del propio Colangelo-. También tiene varias operaciones de dudosa renta a sus espaldas como la venta de Joe Johnson a los Hawks cuando estaba en los Suns, y la más polémica; la elección de Bargnani con el número 1 del draft de 2006, por delante de nombres como LaMarcus Aldridge, Brandon Roy, Kyle Lowry o Paul Millsap. Aunque en aquellos momentos Bargnani era mínimo top-3 en todos los ‘mocks’ de los drafts, más tarde no salió como se esperaba.