Los comienzos nunca son fáciles, y en la mejor liga del mundo de baloncesto no iba a ser menos. Brandom Ingram, flamante número dos del Draft hace unos meses empezará la temporada en el banquillo, según confirmaría el entrenador de los Lakers, Luke Walton, en el media day del equipo.
"No vamos a ponerle en la alineación inicial de manera inmediata", fue la respuesta acerca de este tema en el media day de los Lakers. La rueda de prensa no dejaría indiferente a los medios congragados y habló sin tapujos de las oportunidades que el núcleo joven tendrá esta temporada: "Uno desarrolla correctamente a su núcleo joven recompensándole cuando juegan bien. Si solo quedan diez partidos para que finalice la temporada y ya estás fuera de la lucha por Playoffs, quizás saques a todos tus jóvenes hasta terminar la campaña. Pero al iniciar el curso, no le haces ningún favor a nadie poniendo a los más jóvenes de la manera incorrecta y en los momentos inadecuados".
Luol Deng sería el mejor posicionado para ocupar la plaza que muchos aficionados esperaban que ocupase Ingram. El veterano jugador será una pieza clave en el esquema de Walton para ayudar y aconsejar a los novatos en su adaptación a la NBA.
Sin embargo, Walton también elogiaría el gran trabajo que realizaría el rookie en la Summer League, destacando su gran juego y versatilidad mostrada en esos días. Otro jugador del que destacaría su gran trabajo en este torneo veraniego sería D'Angelo Russell, que en su segundo año en la NBA debe demostrar el potencial que verían los Lakers en el Draft pasado en el base. "Está listo para dar ese paso al frente en la liga y ser un líder, convirtiéndose en uno de los mejores bases de la competición noche tras noche. Aún tiene mucho que crecer. Pero me ha demostrado que hay tres cosas que quiere: quiere ser bueno, quiere ganar, y quiere liderar. Y eso es justo lo que quiero de un point guard", diría el técnico angelino sobre Russell.
Muchas espectativas están puestas en estos Lakers. Un equipo con juventud y experiencia, en el que tendrán la dura papeleta de olvidar la larga sombra que dejaría Kobe Bryant en la franquicia de oro y púrpura.