El Barcelona se ha impuesto de forma clara ante el Bidasoa en el último partido liguero antes del parón por compromisos internacionales, en un partido muy desequilibrado ya que se enfrentaban el colista, el Bidasoa Irun, que solo tiene un punto en su casillero.

Inicio de partido igualado

El partido comenzaba con un Bidasoa muy enchufado. Querían demostrar ante su público la mejoría de juego que están experimentando conforme pasan los partidos ante el todopoderoso líder de la Liga, el Barcelona. El conjunto local se ponía 2 goles arriba con el marcador (3-1) al poco de comenzar el partido, lo cual hizo que los espectadores que se dieron cita en Artaleku se viniesen arriba y comenzaran a animar con más fuerza que nunca. Pero nada más lejos de la realidad. Enseguida la maquinaria azulgrana comenzó a funcionar y rápidamente le dieron la vuelta al marcador con un parcial de 0-3, dejando el marcador en 3-4 a los seis minutos de partido.

A pesar de la reacción azulgrana, el Bidasoa no se vino abajo y continuó plantando cara al líder. Tanto es así que a los diez minutos de partido el marcador estaba en 6-7, lo que reflejaba la igualdad de estos primeros minutos. Pero en ese momento, el guardameta local, Saric, consiguió detener un lanzamiento de 7 metros que hubiese sido el empate a 7 y eso hizo que los visitantes metieran una marcha más para ir distanciando a su rival.

Momento de sacar ventaja

Desde el minuto 10, tras la parada de 7 metros de Saric, el Barcelona se puso las pilas y subió la intensidad en defensa, además de atacar con mayor tranquilidad. Todo ello hizo que la ventaja fuese aumentando progresivamente hasta el 7-12 del minuto 20. En ese momento el Bidasoa sacó su orgullo y se acercó en el marcador a 3 goles, 10-13. Pero de nuevo los blaugranas se distanciaban con un parcial de 2-7 para llegar al descanso con un marcador de 12-19.

Saric recibió un balonazo en la cara tras un lanzamiento de un rival y se vio obligado ha retirarse de la pista con una contusión sin mayores consecuencias, a pesar de lo cual no volvío a jugar por precaución.

Segunda parte cómoda

La segunda mitad comenzó con un Barcelona muy intenso en defensa, frente a un Bidasoa que se estrellaba una y otra vez, lo cual fue aprovechado por los visitantes con diversos contraataques que propiciaron un 0-3 de parcial, poniendo el marcador en 12-22 nada más volver del descanso y obligando a Fernando Bolea a pedir el primer tiempo muerto del partido.

El resto del partido siguió el mismo guion, con una buena defensa culé que provocaba contragolpes y la ventaja seguía creciendo hasta llegar a la máxima ventaja del partido en el minuto 40, 14-26.

Los locales no se dieron por vencidos y no dejaron que la goleada fuera a más, gracias en gran medida a la buena actuación de su portero Otegi, que realizó varias intervenciones muy buenas.

El preparador del Barcelona, Xavi Pascual, aprovechó la cómoda ventaja del marcador para que debutara Adrià Figueras y dar varios minutos a otros canteranos como Kasal y Balaguer. En este partido Pascual dejó fuera de la convocatoria para darles descanso a Victor Tomás, Juanín García y Sorhaindo.

Tras este partido el Barcelona sigue siendo líder de la Liga ASOBAL, con 8 victorias en 8 partidos, y el Bidasoa continuará siendo colista otra jornada sin conocer la victoria.

Homenaje para un campeón del mundo

El partido sirvió para que el Bidasoa homenajeara a uno de sus exjugadores con más éxito en el balonmano, el campeón del mundo Julen Aginagalde. El jugador irundarra del conjunto polaco KS Vive Targi Kielce fue un espectador de lujo en este partido, en el que fue homenajeado por el Bidasoa Irun.