Todos esperaban un paseo militar del Fraikin BM Granollers en la visita del AX Puente Genil al Palau d'esports de la ciudad vallesana, en una jornada de suma importancia para los de Toni García, ya que no podían dejarse ningún punto en la jornada previa a su importante partido frente al 'Natur' en la particular pugna que mantienen por la única plaza Champions que queda libre.

Pese a todo, el encuentro comenzó igualado, sin demasiada participación de los ataques, dando preeminencia a unas defensas que se hacían valer, como demuestra el mísero parcial que marcaba el marcador en el minuto 10 (2-1).

Entonces surgió el potencial defensivo de los catalanes que pusieron la sexta marcha, amén de la gran actuación de un guardameta que cada día demuestra por qué es uno de los mejores de la liga ASOBAL, Matías Schulz. El argentino desquiciaba una y otra vez a los atacantes del Puente Genil, que no veían ni dónde ni cómo podían perforar la portería local.

Los de Toni García salían al contraataque y ponían el 9-2 en el electrónico cuando sólo se habían cumplido 16 minutos. El partido parecía finiquitado para el tercero de la clasificación.

Nada más lejos de la realidad. Cuando mejor estaba funcionando el juego, tanto en ataque como en la zaga, vallesana, el siete visitante se vino arriba y metió el miedo en el cuerpo de los locales con un 0-4 de parcial, que obligaba a García a solicitar tiempo muerto.

Ni siquiera con un hombre menos, tras la exclusión a Demovic, el Fraikin podía frenar el vendaval pontanés que se había desatado sobre el 40x20. Mención de honor a la defensa visitante, que dejó en un único gol al Granollers en los segundos quince minutos del primer periodo. Pese a ello, el AX Puente Genil no llegó a igualar la contienda y se llegó al descanso con 10-8 para los locales.

Los cinco últimos minutos, cinco minutos de infarto

Si el final del primer tiempo había sido espectacular en los de Antonio Ortiz, los primeros minutos del segundo no iban a ser menos. Con un parcial de 1-3 igualaron el electrónico por primera vez en todo el encuentro y comenzaron a soñar con la machada en uno de los campos más complicados de toda la liga.

Pero el Granollers es mucho Granollers y, consciente de lo que se jugaban en el día de hoy, dieron un poco más de sí mismos y con un parcial de 3-0 borraron cualquier ilusión de la mente de los andaluces, renta que no dejarían marchar hasta los últimos cinco minutos de partido.

Entonces llegó la verdadera sorpresa. El Ángel Ximénez, sin nada que perder, conquistó un parcial de 1-5, que daba la vuelta al marcador (25-26, a falta de apenas cuatro minutos para el pitido final), lo que dejó noqueado al cuadro local que no supo reaccionar, ni con el tiempo muerto de su técnico. Al final, 25-27 para las huestes de Antonio Ortiz.

Con esta derrota, el equipo vallesano ya no depende de sí mismo para conseguir una plaza para la próxima Champions League. Todo pasa por derrotar la semana que viene al Naturhouse en el trascendental duelo y esperar a que el cuadro franjivino pinche en alguna de las otras tres jornadas que quedan.

Por su parte, el Ángel Ximénez se sitúa duodécimo, con 19 puntos, a tres del equipo que marca el descenso, el Cuatro Rayas Valladolid, que cuenta con 16, a falta de cuatro partidos para el término de la campaña.

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