Resumen de la jornada 1 de la Champions League: naufragio alemán

Se completó el primer fin de semana del mejor balonmano europeo. La EHF Champions League levantó el telón y la función no dejó indiferente a nadie. Las principales sorpresas afectaron a los equipos alemanes. Los finalistas de la última edición, el campeón Flensburg y el subcampeón Kiel, tropezaron -el primero estrepitosamente- en sus estrenos ante Kolding y HC Zagreb, respectivamente. El Rhein-Neckar salvó el orgullo teutón, mientras otros favoritos como Barça, Veszprem, Vardar o Kielce también solventaron su partido de primera jornada.

El Naturhouse La Rioja comenzó de la mejor manera posible, venciendo en casa al HC Meshkov Brest por ocho goles y colocándose como líder de su grupo. Los equipos franceses, por su parte, también sufrieron una jornada aciaga, pues aunque el PSG ganó, el Montpellier y el Dunkerque cayeron derrotados de forma clara.

Grupo A

El equipo español ha entrado en la Champions 2014/15 con el pie derecho. Se enfrentaba al que a priori es el rival más débil del grupo, pero no por ello es el Meshkov un equipo fácil. Tiene en sus filas jugadores reconocidos como los recién fichados Stojkovic, Manojlovic, Nikulenkau o Dzianis Rutenka. Pero los franjivino hicieron un partido muy serio y encarrilaron la victoria en una gran primera mitad.

El Natur, con la vuelta de Thiagus Petrus, cimentó el triunfo en el primer tiempo

Los fichajes del equipo de Jota González funcionaron a la perfección. Philip Stenmalm demostró que es uno de los lanzadores de más futuro de Europa con auténticos cañonazos que desesperaron al portero Pesic. También brillaron los extremos, especialmente los nuevos, Juanín García y Albert Rocas. El primero metió goles de todo tipo y acabó con ocho dianas. El zurdo recuperó las sensaciones y parece que su mal partido en Granollers es cosa del pasado. Se le vio sonreir de nuevo. Estos tres argumentos permitieron a los riojanos alcanzar una ventaja en la primera parte que llegó a ser de siete goles. Por si fuera poco, Javi García Rubio se unió a la fiesta. En Liga venía brillando más Ángel Romero en la posición de pivote ofensivo, pero en el debut europeo el ciudadrealeño demostró que la competencia va a ser grande entre los dos.

En el segundo tiempo los de Brest volvieron a acercarse, pero en los minutos finales la defensa local volvió a imponerse y el resultado se disparó para el Natur. Fue muy importante la vuelta de Thiagus Petrus. El brasileño está de vuelta después de pasar unas semanas complicadas, en las que ha sufrido la muerte de su hermano. Su presencia se notó en defensa y en el pabellón se vieron pancartas de ánimo para un jugador muy querido en Logroño.

Con este resultado se colocan líderes de grupo, aunque la próxima semana tendrán la difícil misión de visitar Kiel. La empresa es complicada, pues el potencial de los germanos es enorme, pero los españoles deberán aprovechar las dudas con las que los blanquinegros han comenzado la temporada.

El PSG se ha propuesto hacer borrón y cuenta nueva. La horrorosa temporada pasada, en la que se quedó fuera de la Final Four de Champions y fue tercero en la LNH pese a ser favorito en ambas, ya está olvidada. En el tercer año del megaproyecto se espera que las piezas estén ya lo suficientemente conjuntadas para aspirar a cotas muy altas. De momento han empezado imponiéndose con claridad en una pista difícil como la del Metalurg macedonio. Dos de sus máximas estrellas, como Mikkel Hansen y Luc Abalo, fueron los más destacados con seis y cinco goles, respectivamente.

El PSG comienza bien una temporada en que quiere borrar el pasado

El equipo de Philippe Gardent comenzó muy enchufado, con su flamante fichaje, Thierry Omeyer, en portería. Se pusieron con una ventaja importante de 3-7 en el marcador, pero los locales, guiados por el central Mirkulovsky y el joven extremo Manaskov, volvieron a meterse en el encuentro. Un gol del pivote Marsenic casi sobre la bocina llevó el empate a 11 al descanso.

En el segundo periodo los locales se mantuvieron en el partido hasta los últimos minutos. A ocho para la conclusión Ojleski tuvo una contra para ponerse a un gol, pero apareció Omeyer para sacar un fantástico pie y cortar el ímpetu macedonio. Otro de los refuerzos galos, el 'Martillo' Accambray, terminó por decidir el duelo del lado visitante.

Temporada nueva, vida nueva. O eso al menos esperan por la Ville lumière.

Una de las grandes sorpresas de la jornada se produjo en la capital de Croacia. El Kiel, tricampeón de la Champions, actual finalista y máximo favorito para esta edición, cayó ante el HC Zagreb, un rival sobre el papel muy inferior. Las incorporaciones de los alemanes dan miedo, sobre todo su primera línea, a la que se han sumado el croata Duvnjak, el español Cañellas y el alemán Weinhold. Pero el inicio de temporada de los de Alfred Gislasson está siendo decepcionante. En Bundesliga acumulan ya dos derrotas, ante el Lemgo y el Balingen, y su comienzo en la máxima competición continental ha sido también decepcionante. La baja de Filip Jicha -operado del tobillo izquierdo- se notó demasiado en un equipo que por profundidad de plantilla no debería echar de menos a nadie.

El inicio del partido no daba pie a pensar en que la sorpresa podía producirse. Los 'zebras' empezaron dominando y controlaron el partido a su antojo en el primer tiempo, llegando al descanso con una renta de 9-13.

La juventud del HC Zagreb pudo con un Kiel que está en una pequeña crisis

El HC Zagreb es sin embargo un equipo del que nadie puede fiarse. Son un bloque joven que a buen seguro serán la base de la selección croata de aquí a unos años -algunos ya han debutado-. Los Obranovic, Stepancic, Brozovic y compañía quieren comerse el mundo y su ambición no conoce límite. Por ello, acompañados por una afición enfervorecida, en la segunda parte se comieron al rival. La experiencia en el equipo la pone el genial extremo Zlatko Horvat. Sus goles guiaron la remontada balcánica y el HC Zagreb llegó a los minutos finales manejando rentas de dos y tres goles. En el último minuto el Kiel necesitaba remontar rápido, por lo que dejaron a Pavlovic lanzar solo, con la esperanza de que Sjostrand detuviese el balón y tuvieran una última opción, pero el lateral no falló y finiquitó el encuentro.

En el Kiel lo intentó con ahínco Aron Palmarsson, pero el islandés estuvo demasiado fallón. Tampoco Domagoj Duvnjak jugó su mejor partido en su vuelta a casa -aunque con la camiseta del rival-.

El resultado no es bueno para el Naturhouse, que ve cómo uno de sus principales rivales para clasificarse para octavos suma ante un rival que se esperaba le batiese. Esto obligará a los riojanos a sacar puntos contra alguno de los gallos del grupo.

Grupo B

El gran batacazo de la jornada se lo pegó el campeón. A nadie se le escapa que el Flensburg, además de ser una sorpresa que ganara la pasada edición, ha perdido potencial con las salidas de Knudsen y sobre todo de Weinhold. Puede incluso que una derrota en Copenhague entrara dentro de la lógica, pues los daneses tienen un gran equipo. Pero lo que nadie esperaba es que los teutones salieran apalizados de su visita al Norte.

La vuelta de un sano Kim Andersson puede ser una de las noticias del año para los amantes del balonmano

Pero ocurrió. La primera línea danesa estuvo excepcional, con Bo Spellerberg y los zurdos Irming y Kim Andersson dando un recital. La recuperación del sueco es una fantástica noticia para el balonmano, que se ha visto privado de su calidad en los últimos años por culpa de las lesiones. Desde el lateral fue capaz de marcar diferencias y ser una pesadilla para los alemanes. El duelo de porteros veteranos también lo ganó el equipo danés, pues Kasper Hvidt estuvo bastante más inspirado que Mattias Andersson.

El Flensburg aguantó en el partido durante casi 40 minutos, aunque siempre por detrás. Pero en los minutos finales no pudieron con el vendaval danés y con Hvidt, que dio un auténtico recital bajo los palos. Sólo el extremo Anders Eggert mantuvo el tipo por los visitantes.

La diferencia final evidencia que Ljubomir Vranjes tiene mucho trabajo por delante. El Flensburg no parte como favorito a repetir título, pero las cosas tienen que cambiar si no quieren que su aventura termine antes de lo esperado.

El equipo catalán solventó con éxito su primera prueba. El pivote Noddesbo dio una nueva lección de juego en los seis metros y defensa para liderar a los de Pascual en tierras suecas. El rival se dedicó durante todo el partido a correr todo lo que pudo, pues su juego en estático dejó mucho que desear. Pero mientras aguantaron las piernas su vertiginoso juego les permitió sobrevivir en el marcador. Las contras y los saques rápidos de centro hicieron que el Barcelona, algo lento en el balance, no lograra poner tierra de por medio. En los últimos minutos el cansancio hizo mella y las pérdidas de balón alejaron al campeón sueco de un buen resultado ante el FC Barcelona.

El Alingsas se jugó todas sus cartas a correr más que el rival

Los culés deben estar contentos con su inicio de competición. Además de Noddesbo, con sus nueve dianas, brillaron Karabatic y Lazarov, con seis tantos, el extremo Saubich, que estuvo muy acertado en el comienzo del encuentro, y el portero Gonzalo Pérez de Vargas, que dejó un cuarto de hora final para poner en vídeo a los niños que quieren dedicarse a defender porterías.

El que no salió muy bien parado de los minutos finales fue Rutenka. El bielorruso recibió mucha 'estopa' por parte de Nilsson y Bergendhal, es cierto, pero no supo encajarla y terminó expulsado por propinar un codazo en la cara de un rival. Pasan los años y el lateral sigue teniendo problemas para salir airoso de ambientes calientes.

El equipo de Manolo Cadenas aprovechó el hecho de enfrentarse en el debut al rival que tiene todas las papeletas para terminar último del grupo. Los polacos manejaron los tiempos del partido en todo momento y no dieron ninguna opción a su rival. El joven rumano Racotea, que a sus 19 años disputaba su primer encuentro en Europa, tuvo un partido redondo y finalizó con siete goles.

El gran debut de Corrales en Champions fue una agradable noticia

Otro debutante como el gallego Rodrigo Corrales fue el gran artífice de que el equipo local se marchara en el marcador. Sus intervenciones en portería permitieron a los de Cadenas generar una gran brecha en el marcador. Los polacos se marcharon al descanso con la máxima ventaja (13-7) en el luminoso.

En el segundo tiempo siguieron aumentando las diferencias, que llegaron a ser de 10 goles y se mantuvieron en los últimos minutos rondando los dos dígitos. Importante fue el papel del hispanorruso Sasha Tioumentsev dirigiendo el ataque del Wisla Plock, dejando además para la grada alguna de sus eléctricas fintas. El otro español del equipo, el toledano Ángel Montoro, aportó un gol a la victoria local.

Grupo C

El único equipo alemán que dio la talla en el primer encuentro europeo fue el Rhein-Neckar. Los 'leones' dieron buena cuenta de un rival, el Montpellier, al que no dieron ninguna opción. Los franceses estuvieron siempre fuera del partido y fueron incapaces de controlar el ataque de los de negro. Los pivotes del equipo alemán fueron las armas más importantes, con el noruego Bjarte Myrhol dominando el ataque estático y el español Gedeón Guardiola trabajando desde la defensa y aprovechando su velocidad a la contra. Niklas Landin demostró que esta temporada quiere asentarse entre los mejores y asaltar el trono de mejor portero del planeta.

Desde los instantes iniciales los alemanes pusieron tierra de por medio y dirigidos por el suizo Schmid decidieron el encuentro en la primera mitad. El extremo izquierdo Sigurmannsson puso también goles y el debate se ha abierto en el seno del equipo. El islandés está jugando más minutos en este comienzo de temporada que su compañero Gensheimer, la gran estrella y capitán del equipo. Al entrenador, Nicolaj Jacobssen, no se le caen los anillos y está apostando por un cambio que puede crearle problemas, sabiendo del carácter díscolo del gran extremo alemán.

Landin volvió a cuajar un gran encuentro

Pero lo cierto es que los resultados acompañan y el partido ante el Montpellier fue una nueva muestra de que el camino del Rhein-Neckar es bueno. Esta temporada quieren superar los cuartos de final en los que quedaron encayados el pasado curso. El equipo se ha reforzado con un jugador de gran futuro como Mads Mensah Larssen. En su primer partido con los 'leones' de Mannheim aportó un gol.

El Montpellier parece un paso por detrás del rival de este fin de semana. Habrá que ver cuando se incorpore el esloveno Borut Mackovsek si es capaz de elevar el nivel de su equipo y aportar lanzamiento exterior. En este primer partido el joven argentino Diego Simonet fue de los más destacados de los galos. El exjugador de Torrevieja terminó con cuatro goles.

La vuelta de los rusos al primer nivel europeo no fue demasiado exitosa. Cierto es que se enfrentaban a uno de los cocos de la competición, pero jugaban en casa y esperaban poder hacer valer el factor cancha para sacar algo positivo.

El brazo de Momir Ilic y la definición de Cristian Ugalde, claves para la victoria magiar

Los de Maximov empezaron jugando de tú a tú al rival, aguantando el tipo en el primer tiempo y sin dejar que los visitantes cogieran más de dos goles de ventaja. Lo hicieron a base de buen juego ofensivo. Antonio Carlos Ortega intentó frenar el ataque rival con 6:0 primero y después cambió a un 5:1 con Ugalde en el avanzado. Pero ninguno de los sistemas dio demasiado resultado. Mikler tampoco destacó demasiado bajo palos. En ataque sí consiguieron dar el do de pecho. Momir Ilic castigó desde fuera -11 goles del cañonero serbio- y Renato Sulic, nombrado mejor pivote de la Champions 2013/14, hizo de las suyas en los seis metros. Así se llegó al descanso con un 17-19 que dejaba todo abierto para los segundos 30 minutos.

Al final los nombres del equipo magiar pesaron mucho y en el segundo tiempo el colchón se hizo más grande, hasta estabilizarse en torno a los ocho goles mediado el período. Cristian Ugalde fue el gran protagonista de la segunda parte, terminando el partido con ocho goles. Los otros españoles, Chema, Ruesga y Nagy, contribuyeron con un gol por cabeza a la victoria húngara.

El partido entre eslovenos y macedonios fue uno de los más emocionantes de la jornada. Los locales han perdido en los dos últimos años a sus dos máximas estrellas: Mackovsek y Marguc, pero el Celje es un equipo acostumbrado a reinventarse a base de jugadores locales. El central Miha Zarbec parece haber asumido a sus 22 años el relevo de sus compañeros como líder del equipo. Sus 10 goles le confirman como uno de esos jugadores a los que hay que tener en cuenta en el futuro. Su compatriota, mucho más veterano y conocido, Luka Zvizej, le acompañó en la faceta ofensiva con cinco tantos desde el extremo. El Vardar respondió al desafío goleador con sus dos jugadores más talentosos: el extremo ruso Dibirov marcó 11 goles y el cántabro Álex Dujshebaev añadió ocho más, algunos de ellos de muy bella factura, como es habitual en él.

El inicio del partido fue del Celje. Los eslovenos salieron muy concentrados en defensa, sin dejar hacer al rival. Así consiguieron disponer de un 10-5 en el marcador, preocupante para los de Raúl González. Ni siquiera el flamante fichaje de los de Skopje, el portero Arpad Sterbik, podía frenar el ímpetu local.

Dibirov pintó varias obras de arte en los momentos decisivos

Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos el Vardar consiguió recuperar la desventaja. A dos minutos para el descanso Dujshebaev aprovechaba el final de una superioridad para lanzar desde fuera y poner el empate a 11 en el electrónico.

Tras la reanudación, además de ver una genialidad de Timur Dibirov -golazo con un fuerte-flojo sin apenas ángulo- los espectadores vibraron con la igualdad del tanteador. En los instantes de máxima tensión los visitantes demostraron veteranía y saber estar. Dibirov fue clave en estos minutos, anotando tres de los cuatro últimos goles de su equipo, incluyendo una gran colgada.

A un minuto del final Sterbik demostró su clase con una gran parada al pivote rival, luciendo flexibilidad. La intervención definió el partido, pues su equipo entraba en los últimos 60 segundos con dos goles de ventaja. El mejor portero de la última década apareció de nuevo cuando tenía que hacerlo.

Grupo D

El partido que inauguró esta edición de la Champions enfrentó al favorito del grupo contra la 'cenicienta'. El equipo entrenado por Talant Dujshebaev se desplazó a tierras helvéticas para iniciar con victoria su andadura en esta edición del torneo europeo. Esta temporada buscarán volver a pisar el pabellón Lanxess Arena de Colonia, algo que consiguieron hace dos campañas cuando cayeron en semifinales con el Barcelona.

Los suizos aguantaron 30 minutos de mucho mérito

Los argumentos que utilizaron los polacos para llevarse los dos puntos fueron los previsibles. Gran juego combinativo para encontrar buenos lanzamientos de sus poderosos primera líneas, con Buntic, Jurecki y Bielecki a la cabeza. El veloz Cupic también tuvo lugar para el lucimiento, pero el que apareció menos de lo esperado fue el pivote Julen Aginagalde.

Pero lo cierto es que sufrieron más de lo esperado para conseguir la victoria. En el primer tiempo los suizos aguantaron el tipo, por encima de lo esperado. En parte gracias a buenas intervenciones del joven cancerbero Portner. El extremo Liniger y el lateral Küttel conseguían por su parte los goles necesarios para que los suyos se marcharan al descanso con un solo gol de desventaja.

En la segunda parte las debilidades locales se hicieron más evidentes y no aguantaron el altísimo ritmo goleador del rival. De esta forma el Kielce amplió la distancia hasta asegurarse el triunfo.

El campeón francés sigue demostrando que no se le da bien la Champions. Después de su decepcionante actuación de la pasada campaña, esta vez han comenzado con un tropiezo en casa. El Aalborg fue superior en el segundo tiempo y gracias a la aportación de Isaías Guardiola y Havard Tvedten -seis goles cada uno- se llevaron la victoria en la maleta de vuelta a Dinamarca.

Isaías Guardiola debutó en Europa con el Aalborg con un partidazo

Empezó el partido muy entonado el danés Morten Slundt, pero los galos respondieron con una gran facilidad ofensiva, pese a las intervenciones de Ole Erevik. Llegó a ponerse por delante el Dunkerque, aunque Tvedten con uno de los goles de la jornada, reenganchó a los visitantes. El descanso llegó con empate a 13 en el marcador.

El Aalborg ganó el partido en el tercer cuarto de encuentro. Consiguieron un colchón de cuatro goles que consiguieron mantener e incluso ampliar en los minutos finales gracias al buen hacer de Erevik cerrando a cal y canto la puerta.

Hubo dos partidos en la jornada que se resolvieron por un gol y los dos tuvieron curiosamente el mismo resultado. En esta ocasión el equipo local, el Pick Szeged de Juan Carlos Pastor, fue quien se llevó el gato al agua en su enfrentamiento ante el Motor ucraniano. La capacidad goleadora de la primera línea magiar fue clave en el devenir del encuentro. Entre los centrales Bombac y Mindegia y los laterales Ilyes, Ancsin y Balogh firmaron 21 de los goles de su equipo, raro en un conjunto que cuenta con extremos de la calidad de Jonas Kallman o Roberto García Parrondo. Su rival sí que utilizó más su segunda línea, surtiendo de balones al pivote Oleksandr Shevelev. El ex de Ciudad Real fue el máximo anotador de su equipo con ocho dianas.

Los de Pastor consiguieron una pronta escapada con dos contras bien finalizadas por Blazevic y Bombac que obligaron a Serhiy Bebeshko a pedir tiempo muerto. El parón vino bien a los ucranianos, que poco a poco -y gracias a un Stochl que le estaba ganando a Sierra la batalla bajo el larguero- redujeron la ventaja local hasta que mediado el primer parcial Sergii Burka empató con un lanzamiento salvando el pasivo. Salió el navarro Niko Mindegia para dirigir el ataque húngaro y Bombac pasó al lateral. La consecuencia fue que la goma volvió a estirarse y llegaron de nuevo los tres goles de ventaja. Con 13-11 se llegó al final de los primeros 30 minutos.

El Motor Zaporozhye consiguió darle la vuelta al partido en los primeros minutos de la segunda parte. Llegaron incluso a gozar de cuatro goles de ventaja tras una contra de Zhuk a falta de jugarse los últimos 12 minutos. Pidió Pastor tiempo muerto para pedir defensa a su equipo y aconsejar a Mindegia aprovechar los bloqueos de su pivote. Pero avisó también el vallisoletano de que todavía quedaba mucho tiempo.

Los locales se vieron obligados a remontar en los últimos minutos una gran desventaja

Los españoles tiraron entonces del carro y entre Mindegia, García Parrondo y Sierra resolvieron la papeleta. El cuarto gol de Ilyes sirvió para que los locales pusieran el empate a 25 a falta de cuatro minutos. En la siguiente acción Sierra sacó un gran pie para evitar el gol del ucraniano Onufryienko y Mindegia a la contra volvió a poner al Pick Szeged por delante. Una nueva intervención de Sierra permitió otro contraataque magiar que culminó Vranjes para poner el 27-25 en el electrónico.

Un penalti transformado por Stetsyura y la exclusión de Blazevic dio una última opción a los visitantes. El fallo en ataque de Mindegia dio al Motor la opción de empatar en la última jugada, con un jugador más. Pero entonces la defensa local multiplicó su intensidad y aun en inferioridad consiguieron llevar al rival al pasivo. Al final los colegiados sancionaron una dudosa falta en ataque de Shevelev, aunque para despejar dudas Sierra había detenido el lanzamiento.

Con mucho más sufrimiento del esperado, pero el Pick Szeged había conseguido la victoria en su primer partido en Champions.