El partido entre el Puente Genil y Bada Huesca presumia de ser igualado. Los aragoneses contaban con jugadores de mayor calidad. Pero muchos de los jugadores de José Nolasco no estaban en condiciones de jugar. Por otra parte, el conjunto cordobés no estaba pasando en su mejor momento ya que ocupaba la antepenúltima posición de la liga. Además, los dos equipos llegaban de disputar -y de vencer- en la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey.

Pero a pesar de la tremenda igualdad que marcaba el inicio del encuentro, el partido no tuvo apenas emoción. El equipo local pasó por encima de su rival. El resultado es un buen reflejo de lo que se vivió en la cancha. Bada Huesca apenas puso resistencia, nada salió bien. Todo lo contrario que Puente Genil, que suma su sexta victoria en liga y adelanta posiciones en la tabla. Justo por delante del equipo aragonés.

Los primeros de partido fueron muy igualados. Los dos equipos fueron intercambiando goles durante los primeros diez minutos de partido. Los porteros no detuvieron ningún balón y los goles subían con rapidez en el marcador. Hasta que Puente Genil disfrutó de su primera superioridad tras la exclusión del pivote Milan Rasic.

Los locales aprovecharon muy bien la ventaja numérica y abrieron una brecha en el marcador que se haría insalvable para los rojillos hasta el final del partido. A este hecho se le suma la aparición del guardameta local, Francisco Chirosa. El cancerbero detuvo los lanzamientos de Molina y compañia. Asi se llegaría al descanso con una ventaja para los de Barbeito de cuatro goles (14-10).

Festín para el Ángel Ximenez

La renta de cuatro goles fue insuficiente para el equipo andaluz, ya que durante los primeros minutos del segundo tiempo, los pupilos de Barbeito no dieron opción a su rival.

Un parcial de 9-2 en el inicio del segundo tiempo cerró el partido

Los locales dieron un recital de como jugar a balonmano. En ataque, el lateral Juan Antonio Vazquez y el extremo José Cuenca -pichichi del encuentro con nueve goles- fueron los encargados de poner los goles mientras Chirosa detenía balones con facilidad. El Bada Huesca, que echó en falta a todos los lesionados, no tuvo ninguna oportunidad de acercarse en el marcador. Con once goles de ventaja, el partido estaba listo para sentencia.

El resto del partido fue un intercambio de goles. Los locales apenas ampliaron su ventaja, pudieron disfrutar de una victoria más y poder alejarse de los puestos de descenso y ascender puestos en la tabla. Un buen comienzo para el equipo cordobés tras el paron invernal. Dos victorias consecutivas que suben la moral al equipo.

Todo lo contrario el Bada Huesca. Los peores presagios se confirman y el descenso, aunque esté a seis puntos, cada vez está más cerca. Muchas bajas para un equipo corto de plantilla que esta temporada se ha visto afectado por las tres competiciones. El cansancio acumualdo pasa factura para los de José Nolasco, que deberá encontrar la tecla para motivar a sus jugadores para así poder ver al Bada Huesca de la temporada pasada.