Las ciudades de Mannheim y Colonia distan menos de 200 kilómetros. El FC Barcelona pretende que estas dos localidades germanas sean el escenario del primer y el último partido de Champions League que dispute su equipo de balonmano. Un año más, lo único en la mente de aficionados, jugadores, técnicos y directivos barcelonistas es la clasificación para la 'Final Four' que se disputará en el Lanxess Arena de Colonia. Con el recuerdo reciente de Víctor Tomás levantando el trofeo de campeón, el sueño es repetir título y conseguir la décima Copa de Europa.

La primera piedra en este duro camino es nada más y nada menos que el Rhein-Neckar Löwen. El Barça no guarda un buen recuerdo de su última visita al SAP Arena, ya que en los cuartos de final de la temporada 2013/14 cayó con claridad en el partido de ida ante los 'Leones' de Mannheim por 38-31. Fue sin duda uno de los peores partidos del equipo catalán en los últimos años, llegaron a perder hasta por once goles. Finalmente consiguieron reducir la diferencia hasta los siete tantos y dejar para el partido de vuelta una misión casi imposible, la de la remontada, que finalmente consiguieron llevar a cabo. En el Palau Blaugrana protagonizaron un heroico partido en el que vencieron por siete tantos y, gracias al número de goles anotados fuera de casa, lograron clasificarse para las semifinales. Fue la última vez que estos dos grandes de Europa se vieron las caras.

El Rhein-Neckar no es un rival que se le dé demasiado bien al Barcelona

Antes de aquella ocasión, el Barça ya había rendido visita al Rhein-Neckar Löwen. Fue tres temporadas antes, cuando otro trepidante partido terminó con empate a 38. En aquel curso 2010/11 estos dos equipos se golpearon el uno al otro en partidos para el recuerdo. Además de este empate, el Rhein-Neckar logró asaltar el fortín azulgrana por un ajustado 30-31 en la fase de grupos, pero no fue la última vez que se vieron las caras. Alemanes y españoles volvieron a encontrarse en la semifinal de Colonia. Entonces el Barça se tomó la revancha y accedió a la final al vencer por 30-28. El equipo de Xavi Pascual terminó ganando aquella EHF Champions League.

Un hombre llamado Gensheimer

Si hay alguien que disfrute jugando contra el FC Barcelona, ese es Uwe Gensheimer. Probablemente sea la mejor muñeca del balonmano munidal y a la vez uno de los jugadores con carácter más indomable, características que le convierten en genio o villano, dependiendo del día. El Barça es sin duda una de sus presas favoritas y así lo ha demostrado en numerosas ocasiones. En los enfrentamientos de la temporada 2010/11 castigó a los azulgranas con cinco goles en el Palau y la friolera de 15 dianas en Mannheim durante la fase de grupos, mientras que en el enfrentamiento de semifinales consiguió otros siete. Esa temporada fue el máximo goleador de la Champions League con 118 goles en 16 partidos.

Gensheimer sabe lo que es meter 29 goles al Barça en dos partidos

Tres años después volvió a salirse contra el equipo de Xavi Pascual. En el partido de ida fue el máximo responsable del baño de los 'Leones' con sus 14 goles sin apenas fallos de lanzamiento. En el partido de vuelta, sin embargo, los culés habían aprendido la lección y anularon al capitán del equipo alemán, dejándole en dos goles.

A punto de cumplir 29 años, Uwe Gensheimer sigue siendo la gran referencia del Rhein-Neckar Löwen. Aunque este verano se ha especulado mucho con el interés del Paris Saint-Germain en hacerse con los servicios del genial extremo izquierdo alemán, Gensheimer sigue fiel a su equipo de toda la vida y tratará de ser de nuevo el líder que le haga llegar a las rondas finales de la competición.

Discreto lavado de cara

Stanic y Appelgren han llegado en lugar de Landin; Pekeler y Baena sustituyen a Myrhol

Otro de los grandes nombres del Rhein-Neckar Löwen en los últimos años era el de Niklas Landin, uno de los porteros más determinantes del planeta. Pero el meta danés ha fichado por el Kiel y la portería de Mannheim será defendida ahora por otro guardameta capaz de lo mejor y de lo peor, el serbio Darko Stanic. La directiva teutona también ha incorporado al internacional sueco Mikael Appelgren. Entre los dos formarán una pareja sólida y de perfiles distintos, aunque hacer olvidar a Landin será, seguro, un imposible.

También ha dejado el equipo el pivote noruego Bjarte Myrhol, que en las últimas temporadas se había destapado como uno de los mejores jugadores ofensivos en su posición. Para su reemplazo han llegado dos jugadores de garantías, Hendrik Pekeler y el andaluz Rafa Baena.

Para el resto del equipo se ha apostado por la continuidad. Con Gensheimer como dueño del extremo izquierdo, el derecho es el territorio de Patrick Groetzki, otro jugador de características similares: muy rápido a la contra y definitivo en el lanzamiento. La primera línea será liderada por el talentoso Andy Schmid en el centro, mientras que los laterales están ocupados por Kim Ekdahl du Rietz y Alexander Petersson. El joven Mads Mensah Larssen fue un fichaje ilusionante el pasado verano y, aunque no destacó en su primera temporada como se esperaba de él, seguro que con un año más de adaptación será importante en el ataque del equipo, ya sea desde el lateral o el central.

En defensa todo pasa por el mando de Gedeón Guardiola en el centro de la zaga. El petrerí es uno de los mejores defensores del planeta y así lo lleva demostrando en la selección española y en el Rhein-Neckar Löwen en los últimos años.

Un debut para tomarle la medida a la Champions

Muchas son las voces que dicen que esta edición de la EHF Champions League es la más igualada que se recuerda y que los favoritos no caben en los dedos de las manos. Entrar en competición con una victoria no es sencillo en este torneo, ni siquiera para los equipos más competitivos. La primera jornada ya está dejando algunas sorpresas destacadas.

El actual subcampeón de Europa, el Veszprem húngaro, no ha sido capaz de pasar del empate a 27 goles ante el Wisla Plock que entrena Manolo Cadenas. Es un gran ejemplo de la dificultad del primer partido, aunque la mayor sorpresa de la jornada hasta el momento ha sido la contundente derrota del todopoderoso Kiel en casa del HC Zagreb por 29-22.

PSG, Kiel, Veszprem y Kolding ya han pinchado en la primera jornada

Tampoco ha comenzado con buen pie el Paris Saint-Germain, para muchos el gran favorito para ganar esta edición de la Champions, pues a la pléyade de estrellas que ya tenía ha sumado a Nikola Karabatic. En su debut en la competición ha caído con claridad en Flensburg por 39-32. Tampoco se esperaban a priori las derrotas del Kolding en Suecia contra el Kristianstad o del Naturhouse La Rioja ante el Chekhovskie Medvedi, como tampoco apostaba prácticamente nadie por la victoria del Elverum en casa de un equipo que está convirtiéndose en clásico de la competición, como el Kadetten Schaffhausen.

La suerte del FC Barcelona Lassa es además una 'desgracia', pues no se puede decir que una derrota en su primer partido sea una sorpresa. El rival al que se mide el equipo de 'Pasqui' es un grande de Europa, lleno de jugadores de primer nivel y se juega en una pista en la que nunca ha ganado el cuadro catalán.

Será una buena prueba para demostrar que el nuevo proyecto es tan fuerte como el de la temporada pasada. El Barcelona ya ha perdido un partido esta temporada, la semifinal de la IHF Super Globe contra el Füchse Berlin. Otro equipo alemán se encuentra ahora en el camino culé, un camino que tiene como meta Colonia, Alemania.