Julio César Chávez Jr. comenzó en el boxeo directamente en el mundo profesional, sin disputar ni una sola pelea amateur. Desde entonces, a sus 26 años está invicto con un récord de 46 victorias y un empate y puede presumir de contar en su vitrina con el cinturón del peso medio del Consejo Mundial de Boxeo.

Su coronación vendría rodeada de polémica después del que el WBC ascendiera a Sergio Martínez a la categoría de Campeón Emérito, en un acto en el que muchos vieron una clara maniobra para quitárselo de encima y proporcionarle a Chávez la oportunidad de ser campeón mundial. Algo que conseguiría tras vencer al alemán Sebastian Zbik a los puntos en 2011.

A partir de entonces su reinado ha sido cuestionado por las continuas largas de su equipo a un combate contra el anterior campeón, que no se cesaba de pedir una oportunidad para recuperar el cinturón “que por derecho es suyo”. La sombra de su padre, mejor boxeador mexicano para muchos también ha pesado en gran medida en los argumentos de los que le echaban en cara su favoritismo por parte del organismo presidido por José Sulaimán.

Ahora, más de año y medio después y tras tres defensas, el combate que todo el mundo pedía está a punto de celebrarse. La verdadera prueba de la verdad para saber hasta qué punto el Junior es un producto o un campeón memorable.

Cómo llega

Desde que lograra coronarse campeón Chávez ha realizado tres defensas con rivales marcadamente progresivos. De un combate fácil contra Peter Manfredo en su primera defensa hasta la última y más complicada contra Andy Lee pasando por un enfrentamiento contra su compatriota   Marco Antonio Rubio  . Pero la mejoría de los rivales ha estado acompañada también por la de su boxeo, convirtiéndose en un púgil mucho más técnico y sobre todo mucho más poderoso.

Puntos fuertes

Su fortaleza y envergadura junto con su juventud es claramente su mayor ventaja sobre Sergio Martínez. Su quijada y boxeo frontal ha demostrado que puede resistir muchos golpes, llegando a sacrificar su defensa para poder acercarse a rivales que pretendían boxearle en la distancia. Contra ‘Maravilla’ le irá bien si consigue achicar el ring y evitar que este se mueva golpeando y saliendo.

Resultado decisivo

En caso de ganar Chávez Jr. callaría todas las voces que le acusan de ser un campeón impulsado por el WBC y el nombre de su padre. Acabaría con su mayor fantasma y seguramente abandonaría una división en la que le cuesta mucho dar el peso para subir a la categoría de los supermedianos.
Una derrota supondría la pérdida de su título y de su récord invicto además de dar la razón a todos los que piensan que Sergio Martínez es el mejor peso medio con diferencia y que el Junior debe su récord a su controlada carrera.