Tony Martin, corredor del equipo Omega Pharma-Quick Step, ha vencido en la 9ª etapa del Tour de Francia, de 170 km entre las ciudades de Gèrardmer y Mulhouse. El corredor alemán ha cogido la escapada buena del día y ha impedido que el gran grupo perseguidor le alcanzara junto a De Marchi. En cuanto pudo, se quitó de encima a De Marchi y marchó solo hacia Mulhouse.
La de hoy era una etapa con hasta seis puertos de montaña, pero todos a principio de etapa o a la mitad, ya que los últimos 53 km eran en descenso y posteriormente en llano. 170 km en pleno corazón de los Vosgos, donde no parecía que hubiera grandes movimientos en la clasificación general. También era muy previsible la llegada de una gran fuga.
Dos escapados y un gran grupo perseguidor
Después de que al inicio de la etapa muchos corredores intentaran formar una fuga y fueran cazados, en la bajada del Col de la Schlucht saltaron dos corredores, Tony Martin (Omega Pharma-Quick Step) y Alessandro De Marchi (Cannondale). Estos dos corredores fueron aumentando la diferencia con el pelotón debido a su lejanía en la clasificación general.
Cuando la carrera llegó al Col du Wettstein, un gran grupo de corredores salió en busca de la cabeza de carrera. Estos corredores eran: Rojas (Movistar), Rodríguez, Spilak (Katusha), Paulinho (Tinkoff), Koren (Cannondale), Boom, Kruijswijk (Belkin), Cherel, Montaguti (AG2R), Dumoulin (Giant), Valls (Lampre), Ladagnous (FDJ), Gallopin (Lotto), Moinard, Van Avermaet (BMC), Rolland, Gautier, Pichot, Quemeneur, Reza (Europcar), Cancellara (Trek), Navarro, Edet (Cofidis), Meier (Orica), Chavanel (IAM), Machado (NettApp), Feillu y Bideau (Bretagne). El pelotón pensaba que ningún corredor podría poner en peligro el maillot amarillo de Vincenzo Nibali, pero no sería así.
En el descenso del segundo puerto, algún que otro escapado del grupo perseguidor arrancó para ver si podía alcanzar al dúo que encabezaba la etapa.
Martin y De Marchi aumentaban la diferencia con sus perseguidores
A pesar de que en el grupo de cabeza solo lo formaban dos corredores y el grupo perseguidor era de 28, la distancia solo hacía que aumentar debido al empeño que ponían el alemán y el italiano. Por detrás, Joaquim Rodríguez atacaba antes de los puertos de montaña, demostrando que su objetivo en este Tour de Francia será el maillot de lunares de la montaña.
Por delante, Martin tiraba del italiano cuando era un tramo llano o de descenso. El italiano hacía lo mismo cuando era una ascensión, lo que demostraba el acuerdo mutuo entre los dos. Cuando se iniciaba Le Markstein (1ª), un acelerón del ciclista de Omega Pharma dejó atrás al de Cannondale sin que pudiera evitarlo, lo que hacía que el alemán tuviera que hacer la ascensión en solitario.
El pelotón coronaba el puerto de 1ª categoría a más de siete minutos de los escapados, lo que hacía presagiar que la victoria estaba delante. Además, Tony Martin metía casi un minuto a De Marchi y casi tres minutos a Purito, Rolland o Gallopin.
Tony Martin inició su "contrarreloj personal" hacia la victoria
Coronado el puerto de la Grand Ballon, el contrarrelojista alemán iniciaba su propia contrarreloj en busca de la victoria. Tenía por delante más de 50 km en los que iba a tener que luchar en solitario. Además, el corredor alemán se colocaba como nuevo líder de la montaña.
En el segundo grupo, Tony Gallopin (Lotto-Belisol) tiraba de sus compañeros de fuga, a sabiendas de que era más que probable que se colocara como el nuevo líder de la Grande Boucle. Los dos grupos perseguidores entraron en los últimos 20 km, los cuales eran totalmente llanos, con una diferencia alrededor de los tres minutos, mientras que el pelotón estaba a ocho minutos.
Sin grandes consecuencias en el llano, Tony Martin alzaba los brazos en meta llevándose su tercera victoria en el Tour de Francia, la primera en línea. Todavía le queda la contrarreloj de la penúltima etapa. Por detrás, Cancellara entraba en segunda posición y Van Avermaet en tercera. En ese mismo grupo entraba Tony Gallopin. El francés es el nuevo líder de la carrera ya que Astana no apretó para defenderlo.
A cinco minutos del francés Gallopin entraba el pelotón con todos los favoritos a la general, lo que demuestra que para los grandes líderes esto era más bien una etapa de transición antes de la primera gran batalla en La Planche des Belles Filles.
Y mañana...
Mañana llega la primera jornada de alta montaña. Serán 161 km de distancia con solo 20 km de terreno llano. Veremos hasta seis puertos de montaña de 1ª y 2ª categoría la mayoría, con solo uno de 3ª. El plato final será La Planche des Belles Filles, lugar donde Froome hizo una memorable etapa en 2012, un puerto de 1ª categoría de 5,9 km al 8,5%. O los escapados o algún gran favorito a la victoria final levantará los brazos en meta.