La mala suerte ha llegado para uno de los favoritos a conseguir llegar de amarillo a los Campos Elíseos, pero ¿quién será el desafortunado?. El que la ha sufrido es el español Alberto Contador, que dice adios así a su opción de conseguir otro Tour de Francia.
Los Acontecimientos
Se llegaba a la décima etapa de un Tour de Francia que estaba mucho más abierto tras la baja de Chris Froome en el día del pavé, pero tras lo ocurrido hoy todo será mucho más imposible de predecir. Alberto Contador se ha montado en el coche de su equipo dirigiéndose así hacia su hotel, después de sufrir una aparatosa caída.
Todo arrancaba cuando a 95 kilómetros de la meta, el español se iba al suelo en la bajada del tercer puerto de la etapa de hoy, un asfalto con lluvia y la velocidad que llevaba el grupo grande hacían el resto para que Contador se diera un buen golpe quedando en la cuneta. El pinteño esperaba la llegada del médico que le evaluara vendándole la pierna, ya que sufría una herida. Contador le pedía rapidez al médico con sus gestos, pero toda la prisa que se intentaba dar quedaba en nada, ya que la zapatilla se le rompía teniendo que esperar aún más tiempo.
Con más de cuatro minutos se volvía a montar en la bicicleta estando los primeros compases acompañado del coche de equipo, que intentaba animarle y poner todo apunto para que pudiera continuar. Tras una pequeña exploración, el corredor del Tinkoff-Saxo se encontraba con cinco compañeros de equipo, que le echarían una mano hasta la decisión final.
Viendo que ya no podía más debido a que las heridas eran más graves de lo esperado, Contador ponía el pie a tierra a falta de 77,5 kilómetros para la meta. El pinteño se hacía a un lado quedando en la cuneta para subir en su coche de equipo y abandonar. Ahora ya solo le queda comenzar a pensar en la recuperación de cara a poder estar en la Vuelta a España, donde en principio se encontrará con Chris Froome, otro de los damnificados por las caídas.