Si bien hace unos meses la ilusión que se iba al limbo era la de los corredores del Euskaltel-Euskadi, hoy le tocaba a otro equipo vasco, Euskadi, que tras la Vuelta a Burgos puso fin a su última temporada en las carreteras. 

Para valorar todo lo ocurrido, esta misma noche pasaban por los micrófonos de la Cadena Ser el presidente de la Fundación Euskadi, Miguel Madariaga, Carlos Barbero, Rubén Perez y el propio Pablo. 

A Pablo, desde que se terminó su aventura en el equipo vasco, la suerte no le ha ayudado, ya que su andadura en el PinoRoad de Chile acabó en fracaso por la mala gestión económica y deportiva. "En Chile nos encontramos con un mánager, Juan Pablo Pino, que nos robó la ilusión y nos engañó con un proyecto que luego era falso", explicó.

Una historia bastante habitual en estos tiempos de crisis. "De la noche a la mañana te encuentras con un proyecto que desaparece y estás en la calle", finalizó.

Futuro entre tinieblas

Desde que terminó su última carrera con Euskaltel-Euskadi,  las ofertas tanto para él como para muchos de sus compañeros han brillado por su ausencia, salvo Igor Antón, Samuel Sánchez, o los hermanos Izagirre, que consiguieron equipo. "Estoy entrenando, creo que me quedan tres o cuatro años de ciclismo y espero encontrar mi hueco, trabajo para ello", finalizó.