Muchos no habrían nacido por aquel entonces, pero hoy, nos iremos hasta 1993, más exactamente, entre el 26 de abril y el 15 de mayo, fechas para una Vuelta a España, que a día de hoy sorprenderían a muchos, viendo que la edición de 2014 partirá de Jerez el 23 de agosto terminando el 13 de septiembre.

Suiza fue la gran dominadora

Dos hombres fueron los que dominaron la 48º edición de la ronda española: un ya sólido corredor por aquel entonces, como era el suizo Tony Rominger, que a la postre se alzaría ganador, en una lucha a cara de perro con su joven compatriota Álex Zülle.

En la primera etapa, sería Zülle el que se impondría en un prólogo de diez kilómetros. Conseguiría una amplia distancia, de alrededor de 30 segundos, la cual le haría mantener el liderato durante trece etapas. A priori el maillot de líder lo debería haber perdido en la quinta etapa, una cronoescalada en Navacerrada, pero, de la cual salió muy reforzado consiguiendo alzar los brazos totalmente a contra pronóstico.

Para cortar la racha triunfal del corredor del equipo español, ONCE, sería Tony Rominger, el cual venía de ganar la edición anterior de la Vuelta a España, cogería el liderato en la decimocuarta etapa, la cual terminaría en Ezcaray, y de ahí en adelante ya no lo soltaría hasta llegar el quince de mayo a Santiago de Compostela.

Recorrido duro y con varias contrarrelojes

Si a día de hoy pensamos en un recorrido en la Vuelta a España con bastante montaña, no estaríamos viendo un espejismo, lo que nos sorprende, de aquella edición es que tuviera hasta cuatro luchas contra el crono, en las que el claro dominador sería Álex Zülle, que se impondría en tres de ellas, las correspondientes a, la primera etapa de diez kilómetros, la sexta, con 24 kilómetros, y por último, la última etapa de la ronda española, con una distancia de 44,6 kilómetros, ya en tierras gallegas.

El honor de no dejarle hacerse dominador de dichas etapas en la 48º edición de la Vuelta sería para el español, Melchor Maurí, del equipo Amaya Seguros, el cual conseguiría alzar los brazos en la decimotercera etapa, la cual tendría un total de 37,1 kilómetros, y justamente sería esa, en la que Zülle, perdería el liderato tras llevarlo sobre sus hombros durante trece etapas.

Tony Rominger, dominó de cabo a rabo

Cuando cogió el liderato en la decimotercera etapa, ya no lo soltaría hasta la última línea de meta, pero no solo sería este, el único premio que se llevaría Rominger de la ronda española. Dos victorias de etapa, en la catorce y diecinueve respectivamente, no serían su único botín, ya que su dominio sería aplastante. A sus vitrinas se llevaría hasta tres maillots diferentes, los cuales corresponderían al de Campeón de la Vuelta a España, Campeón de la Clasificación por Puntos y Clasificación de la Montaña.

España supo realizar un buen papel

Con corredores como Jesús Montoya, Melchor Mauri, Laudelino Cubino, Oliverio Rincón y Pedro Delgado, entre otros, la ronda española tenía asegurado el conseguir hacer un buen papel. Cinco etapas sería el botín que se llevarían los hombres españoles a casa.

La primera victoria con color hispano llegaría pronto, ya que en la segunda etapa, sería Alfonso Gutiérrez el que alzaría los brazos, sobreponiéndose a una dura distancia de 251,1 kilómetros, la máxima de esa edición entre La Coruña y Vigo. Habría que esperar poco para volver a ver a un español triunfar, ya que en la quinta etapa, sería en este caso Mariano Alonso el que volvería a celebrar tras imponerse a 219,8 kilómetros entre Salamanca y Ávila.

Poco a poco, las etapas pasaban, y España continuaba viendo como sus corredores alzaban los brazos, el siguiente en tener la oportunidad de hacerlo sería Juan Carlos González, el cual se impondría en la décima etapa entre Valencia y La Senia con 206 kilómetros de sufrimiento que se iban acumulando en las piernas.

La Clasificación por Equipos se quedó en casa

Melchor Maurí y Jesús Montoya serían los últimos españoles en conseguir un triunfo de etapa, en la decimotercera etapa le llegaría la suya a Maurí, en una contrarreloj de 37,1 kilómetros, mientras que a Montoya aun le quedaría esperar unas etapas más, hasta que entre Santander y el Alto de Campoo, correspondiente a la decimosexta etapa, cerrando así el amplio palmarés del país local en su carrera “fetén”.

Para terminar, el Amaya Seguros, sería el equipo que acabaría imponiéndose en la Clasificación por Equipos, demostrando que Montoya, Pedro Delgado y compañía consiguieron hacer un buen papel, marcando al final un tiempo en total de 288h 36' 41, nada comparado con las 96h 07' 03" de Tony Rominger.