Nunca es fácil de asimilar para un aficionado que uno de los deportistas más carismáticos de un deporte se marche en busca de nuevos retos y resultados dada su calidad. Pero que regrese al inicio de la temporada para seguir haciéndole disfrutar de su calidad (aunque sea por un tiempo reducido) es una gran noticia para ese mismo aficionado, que ha estado esperando casi siete meses para verle otra vez compitiendo contra los mejores. Si se entiende por "un aficionado" todos aquellos que siguen el ciclocross a nivel mundial, la noticia de la vuelta al barro de Zdenek Stybar ha sido una de las más celebradas.

La noticia de la vuelta de Zdenek Stybar es una de las más celebradas por los aficionados a este deporte invernalEl corredor checo ha sido uno de los grandes especilistas de la modalidad invernal del ciclismo durante los últimos años, pero su fuga a la modalidad de ruta de manos de Omega Pharma - Quick Step no convenció mucho a los fieles seguidores del ciclismo de las campas y los prados. Dedicar toda la temporada a la ruta significaba un paso más en la carrera deportiva de Stybar, pero un palo a los aficionados, que se quedaban sin ver al carismático ciclista checo en su máximo esplendor durante el invierno.

Por suerte, el ciclista de Plana ha sabido establecer objetivos puntuales y largos descansos a lo largo de este 2014 para llegar fresco a la especialidad que le descubrió al mundo ciclista. Las clásicas de piedras como objetivo principal de la temporada, un largo descanso durante el verano y otra vez a la carga en las competiciones de otoño como Eneco Tour o las últimas clásicas del año, donde ha demostrado que está acostumbrado al mal tiempo y que las carreras con frío y con lluvia (elementos con los que se enfrentaba habitualmente en el ciclocross) le van.

El frío y la lluvia, los mejores aliados de Stybar en el Eneco Tour (foto: Eneco Tour).

Regresos efímeros, pero fructíferos

Cuando en 2011 cerró el fichaje por Omega Pharma - Quick Step (en aquél año aún QuickStep) después de ganar su segundo maillot de campeón del mundo, el ciclocross perdió a uno de sus mejores hombres en los últimos años y a uno de los más queridos y carismáticos del público. Por suerte para ellos, su calendario sólo mejoró en calidad, no en cantidad respecto a sus años anteriores, y en el mes de octubre se le volvió a ver con los Albert, Nys y compañía.

Stybar fue (y sigue siendo) uno de los corredores más queridos por el públicoEl cross de Middelkerke y el campeonato nacional (que lleva su nombre desde 2008) fueron sus únicas victorias parciales de aquél año. Un tercer puesto tanto en la Copa del Mundo como en el Superprestige dejaron a unos fans sabiendo que Stybar no había estado a la altura de sus anteriores temporadas, pero que habían presenciado como el checo había demostrado que doblar carretera y ciclocross al más alto nivel se podía conseguir.

La pasada temporada fue en la que menos se le vió. Una fuerte apuesta por las piedras le centró demasiado en la modalidad estival dejando a un lado la invernal. Consciente de la dura temporada que había tenido, sólo pudo llevarse el campeonato nacional y dejarse ver ante los mejores, pero sin vencerles.

Por último, la temporada pasada jugó un all - in al Mundial. Sólo una victoria en sus siete pruebas, pero qué victoria. Por tercera vez alzaba los brazos en una cita mundialista en el que fue el más peleado de sus tres triunfos, después de un apasionante duelo contra el belga Sven Nys sobre el prado holandés de Hoogerheide.

Sólo dos carreras... ¿o más?

Deseado por los aficionados y temido por sus más directos rivales. El checo no ha podido resistirse a volver al ciclocross una vez terminado su calendario de ruta y volverá para disputar en Ronse (Gran Premio Mario de Clercq) su primera carrera de la temporada junto a rivales como Sven Nys o Lars Van der Haar, a quién ya derrotó en algunas carreras durante la pasada campaña.

Finalmente Ardooie será su última prueba de este año, tal y como dijo hace varios días. Pero para ser francos, el corredor checo ha llegado muy bien a su cita con el barro con sus buenos resultados en estas últimas carreras y a cualquiera le sorprendería que no se quedase compitiendo un poco más para dejarse ver por tercera vez con el maillot de campeón del mundo vestido sobre su pecho.