Una temporada más, el conjunto Garmin-Sharp ha vuelto a quedarse a las puertas de algo grande. Aunque las victorias hayan sido numerosas y en algún caso, importantes, la calidad de sus integrantes podría hacer presagiar llegar a cotas mucho mayores. Daniel Martin, Andrew Talansky, Ryder Hesjedal o Tom Slagter han pinchado en las generales de las grandes carreras por etapas. La mala suerte también se ha cebado con ellos, ya que las caídas han sido un lastre constante difícil de superar.

Daniel Martin vio como se escurrian todas sus expectativas en el Giro de Italia con un caída en la crono por equipos inicial. También en la Lieja acabó en el suelo con todas sus posiblidades en el garete. Por otra parte, Andrew Talansky sufrió varias caídas que le hicieron decir adiós a sus posibilidades en el Tour de Francia. Dejando a un lado la mala suerte en las generales, los picoteos constantes en forma de victorias a lo largo de la temporada han sido de un nivel aceptable.

Phil Gaimon, Jack Bauer, Nathan Haas o Ramunas Navardauskas, la segunda unidad de Garmin, realizó un buen inicio de temporada y consiguieron todos ellos victorias en carreras de segundo nivel. Sus triunfos hacían presagiar una buena temporada del equipo antes de la aparición de los primeros espada. En la primera gran carrera, Tom Jelte Slagter empezó como un tiro y ganó dos etapas en Paris Niza. Parecía que el joven holandés se comería el mundo en 2014, pero no volvió a probar las mieles del éxito en todo el año. Rohan Dennis y Raymon Kreder consiguieron dos parciales más para seguir incrementando la gran campaña de los secundarios de Garmin.

En Dauphiné Liberé llegó la guinda a un buen inicio de temporada. Andrew Talansky sorprendió a propios y extraños apuntándose la general el último día. El “Pitbull” superó a Contador, Froome o Nibali para llevarse una victoria de gran prestigio que hacía presagiar un gran Tour de Francia para ellos. Nada más lejos de la realidad. Al igual que en el Giro, el líder de Garmin sufrió una caída y dijo adiós a todas sus posibilidades. La papeleta en el Tour la salvó una vez más el combativo Ramunas Navardauskas, que se llevó un parcial en Bergerac.

Tom Danielson se dejó ver en Estados Unidos y se apuntó el Tour de Utah. En la Vuelta a España, la suerte empezó a sonreír un poco a los grandes nombres de Garmin. Ryder Hesjedal se llevó una etapa tras luchar sin descanso y Daniel Martin se coló en el top 10. Garmin-Sharp no vio aparecer a su gran líder hasta los coletazos finales de año. Daniel Martin se sacó toda su rabia de las caídas en Lieja y en el Giro en el Giro de Lombardía. El irlandés se llevó en solitario el último monumento de la temporada y vio cómo su trabajo tuvo recompensa.

Los líderes no estuvieron a su nivel, pero los secundarios salvaron la temporada de Garmin-Sharp. Muchas victorias, muchos nombres distintos. Todos trabajaron a una para contrarrestar la mala fortuna en los momentos cumbre del año.

El líder: Daniel Martin

La temporada del irlandés Daniel Martin ha sido una larga pesadilla con final feliz. El líder de Garmin lo apostó todo a dos citas. La Lieja-Bastogne-Lieja, donde defendía título, y el Giro de Italia, que arrancaba desde su país natal. En las dos citas la mala suerte se cebó con él. En Lieja sufrió una dura caída en la última curva cuando encaraba la meta en la primera posición. En el Giro de Italia, otro duro choque le hizo abandonar justo en la primera etapa, una contrarreloj por equipos. La segunda posición en la Flecha Wallone fue lo único destacado en la primera parte de temporada. Dan Martin descartó el Tour de Francia y se recuperó de sus lesiones para preparar la Vuelta a España. Fue valiente, atacó y buscó con ahínco la victoria. En esta ocasión, tampoco tuvo demasiado acierto y se marchó de vacío ante la superioridad de Contador, Froome, Purito y Valverde. Se quedó con la séptima posición de la general. Cuando parecía que todo estaba perdido, el Giro de Lombardia le resucitó. La clásica de las hojas muertas fue la recompensa de Martin. El irlandés se llevó la clásica con un ataque certero en los últimos metros. La victoria le supo a gloria en una temporada que estaba siendo para el olvido.

La sorpresa: Andrew Talansky

No es una sorpresa como tal, ya que de sobra es conocida su calidad encima de una bicicleta. La sorpresa llegó en el Dauphiné Liberé. Talansky se quitó la máscara y batió a toda una aureola de cracks mediáticos que parecían infranqueables. En la última etapa, Talansky superó a Froome y Contador para apuntarse la mejor victoria de su carrera profesional. Ni en el Tour ni en la Vuelta pudo estar bien, pero la sorpresa del Dauphiné demostró que tiene por delante un futuro brillante.

El gregario: Ramunas Navardauskas

El lituano es un cazador habitual y nunca suele fallar. Escondido en el pelotón trabajando para sus líderes, siempre aparece en el momento en el que se le necesita. Esta temporada lo hizo en el Tour de Francia. Con su equipo descompuesto por las caídas, el espigado ciclista cabalgó bajo la lluvia para salvar los muebles de Garmin con una gran victoria. Además de esto, firmo otras tres victorias a lo lago de la temporada.

El hombre rápido: Tyler Farrar

Una temporada más, Tyler Farrar decepcionó. El esprínter americano parece que nunca podrá recuperar su verdadero nivel. En 2014 tan solo firmó una victoria, en el Tour de Pekin. Al igual que los líderes del equipo, no tuvo demasiada suerte. Farrar consiguió una infinidad de puestos de honor a lo largo de todo el año. Segundos, terceros, cuartos… aun así, las victorias son las que valen y Farrar, por desgracia, sigue lejos de ellas.

La decepción: Nick Nuyens

La llama de este habilidoso clasicómano belga parece totalmente apagada y todo son cenizas a su alrededor. En 2014 parecía que iba a resurgir, pero tampoco pudo recuperar su mejor golpe pedal y a los 34 años las posibilidades del regreso del gran Nuyens empiezan a ser cada vez menores. Nuyens no ha podido brillar ni en una carrera a lo largo de la temporada. No ha estado cerca de ningún top 10 y una lesión le privó de disputar las clásicas más importantes del año.