La prueba beloften será la primera de las dos pruebas que se disputen el domingo uno de febrero, y será una prueba marcada por el escándalo y la confusión provocados por las acusaciones de dopaje de uno de los favoritos (quizás el máximo) de la prueba: el belga Laurens Sweeck. Por suerte para el espectáculo, el joven belga podrá defender a su país en Tábor y tendrá con Michael Vanthourenhout una de las últimas peleas de un fabulosa temporada para la categoría sub-23, tanto en nivel de sus ciclistas como en tensión, emoción y espectáculo.

Y la sub-23 ha sido una categoría marcada en el principio de temporada por el pequeño de los Vanthourenhout durante las primeras pruebas del calendario hasta que ha pasado a manos de Laurens Sweeck y de Wout Van Aert, cuando éste ha bajado para correr alguna de las pruebas de la Copa del Mundo. Tras ellos dos, las opciones de pódium se abren para dejar ver a los franceses Clément Venturini y Fabien Doubay y a los belgas Toon Aerts o Diether Sweeck. Por parte de España, Felipe Orts y Kevin Suárez llevarán la ilusión española y buscarán colarse lo más adelante posible, para redondear un gran año por parte de ambos.

Duelo belga pensando en oro

El ciclista rubio ha sido una de las sensaciones de la temporada. Alto, espigado y con unas piernas que le han dado muchas alegrías este año. Una de ellas la victoria en la Copa del Mundo, gracias a la participación de Van Aert y Van der Poel en la categoría élite en varias de sus pruebas. Empezó el año como uno de los protagonistas, ganando hasta cuatro pruebas. Pero el secreto del éxito de Michael Vanthourenhout ha sido su regularidad. Desde octubre hasta el pasado fin de semana solo se ha bajado del top-5 en una ocasión, en Koksijde, cuando corrió con los élites.

El otro nombre propio del año ha sido el de Laurens Sweeck. De menos a más este año, empezó como ciclista de calidad y ha acabado como favorito al Mundial y como posible futuro campeón del mundo. Empezó a ganar a principios de noviembre y desde entonces ha llevado casi una impoluta trayectoria hasta el día de hoy. Essen, Zolder, Loenhout, Baal, Hoogerheide, los campeonatos belgas... Sweeck era el mejor colocado para ganar el oro hasta que saltaron las acusaciones por dopaje.

Francia encabeza la lista del bronce

Lejos de la habitual pelea Bélgica - Holanda, los belgas tendrán este año en los franceses Clément Venturini y Fabien Doubay la más dura pugna por uno de los lugares de pódium. Los franceses han explotado este año y han podido evitar que la lucha Vanthourenhout - Sweeck fuese inalcanzable para los demás. Ganador y pódium de la categoría júnior enlos mundiales de Sankt Wendel de 2011 y tercero y cuarto de la Copa del Mundo de la categoría este año, los dos franceses ya saben ser lo que es ser de los mejores del mundo. Y quieren dar un pasito más el próximo domingo.

Bélgica también estará luchando por la tercera plaza en Tábor y lo hará de manos de Diether Sweeck (hermano de uno de los máximos favoritos a la victoria) y Toon Aerts. El primero, eclipsado por los resultados de su hermano, no ha conseguido grandes resultados este año, pero su presencia en las partes altas de las clasificaciones durante las semanas previas a esta cita. Por eso, no tiene nada que perder y todo por ganar. Toon Aerts no ha realizado una temporada para el recuerdo, pero lo innegable es que su momento de forma es excelente. Segundo en Baal y en los nacionales, al ciclista del Telenet le va el barro, algo que le costará encontrar en la ciudad checa.

Diether Sweeck tendrá mucho que ganar en Tábor. (Foto: Nieuwsblad).

Y por si estos cuatro ciclistas fallasen en su propósito de conseguir la medalla de bronce el domingo, ciclistas como Stan Godrie o Jens Nieuwenhuis (Holanda), Gioele Bertolini (Italia) o los jóvenes y locales Jakub Skala o Adam Toupalik (República Checa).

España: a por el top-20

El valenciano Felipe Orts y el cántabro Kevin Suárez serán los únicos representantes que tendrá España el día de la prueba. Pero los dos han hecho una temporada brillante, peleando incluso en algunas pruebas con los mejores del panorama nacional. Y en sus escasas salidas al extrangero (donde solo ha podido ir el cántabro) los resultados no han sido los esperados en él. El mejor puesto de éste ha sido el 16º conseguido en Essen. Más adelante en el calendario, no ha podido pasar del 29º puesto.

El valenciano lo tendrá más difícil. Sin experiencia en lo que es correr con los mejores del mundo este año, las expectativas del valenciano son menores, y la sorpresa de poder verle haciendo una gran actuación podría ser mayor. El frío y la nieve no son a lo que el valenciano está acostumbrado, como si puede estarlo el cántabro, que ya ha probado varias veces este año el frío del norte de Europa. El top-20 para los dos está difiícil con la calidad que hay en la categoría, pero no es imposible para el futuro del ciclocross español.