Después de tres intensas jornadas en la que los ciclistas han tenido que superar recorridos de constantes subidas y bajadas, esta última jornada de la Challenge de Mallorca permite a los ciclistas afrontar  con más calma los 168 kilómetros que la componen y que salvo sorpresa acabarán en llegada masiva.

Sin duda este trofeo es el más suave de todos los propuestos por la organización dado que la única dificultad montañosa de la jornada es el alto de Coll Grau de tercera categoría, cuya cima está a cincuenta kilómetros de meta, por lo que no debería ser ningún problema para la mayoría de hombres rápidos que están presentes.

La jornada arrancará desde el paseo marítimo de Palma de Mallorca a las 9:50. Desde allí los ciclistas se dirigirán hacia el noroeste aproximadamente cincuenta kilómetros hasta llegar al primer sprint intermedio del día, situado en la localidad de Santa Margalida.

Una vez superado dicho pueblo se irán escorando hacia el oeste por el interior de la isla hasta Esporles, donde se encuentra el inicio de la única ascensión de la jornada y tras la cual el pelotón se orientará hacia el sur para llegar a la meta situada en Palma, por donde harán un primer paso.

Los espectadores que decidan acercarse ver la carrera en directo podrán disfrutar de segundo paso bajo la pancarta de llegada, y es que los corredores, una vez llegado a Palma, harán dos vueltas a un circuito de diez kilómetros antes de jugarse la victoria final en el tercer paso por la línea final.

En cuento a perfil de la etapa, se trata de una etapa en la que los hombres rápidos y sus equipos tendrán que tomar la responsabilidad. El día arranca con un inicio bastante quebrado, con ascensiones no puntuables que podrían facilitar la creación de la fuga. Sin embargo el recorrido se vuelve apacible pasada la mitad del recorrido, donde la única dificultad será el Coll Grau. A partir de ahí desdenso rápido hacia Palma y final en un circuito de veinte kilómetros llanos y realizados a la altura del mar.

Claramente es un día para los velocistas, por lo que las estructuras de los mismos serán los que lleven el peso del pelotón y los encargados de gestionar las difrencias respecto a una fuga que parece a priori condenada. Así, se espera que mañana sean equipos como Lotto Soudal, Cofidis o Sky los que trabajen para Andre Greipel, Nacer Bohuanni y Elia Viviani respectivamente.

también existe la posibilidad de que sean otros hombres rápidos que se aprovechen de trabajo de los equipos más fuertes. Así, también optarían a la victoria hombres como José Joaquín Rojas, Danny Van Popel, Bryan Coquard o como Matteo Pelucchi, quien se alzó con el primero de los cuatro trofeos de esta temporada y el único que se ha resuelto al esprint hasta la fecha.