Ligthart esquiva el caos en Hinojos

Si alguien esperaba que por ser la jornada inaugural no iba a haber emoción estaba muy equivocado. Y es que si para algo está diseñado el recorrido de esta Vuelta a Andalucía es para que haya batalla desde el inicio hasta el fin. Hoy, las cotas finales, el viento y las caídas han provocado un alocado desenlace en el que Ligthart ha sido el más habilidoso y se ha impuesto a Fabio Silvestre y Grega Bole. Los favoritos en la etapa de hoy, como Degenkolb o Lobato se han visto afectados por las caídas en la parte final. Hasta dos caídas en los últimos diez kilómetros que han provocado este desenlace.

Inicio tranquilo, final ratonero

Un primer sector tranquilo, en su primera mitad, pero que se volvía ratonero y complicado en cuanto la carrera viraba hacia el interior. Cotas, carreteras estrechas y un final que picaba ligeramente hacia arriba para aderezar este sector inicial de la primera etapa.

Fugas sin opciones...

La batalla comenzó desde muy pronto. Y es que a los diez kilómetros de que se diera la salida neutralizada, un grupo de cuatro se colaba en el corte bueno del día. Reinier Honig (Roompot), Christophe Jones (UnitedHealthCare), Ibai Salas (Burgos BH) y Alexandr Komin (Rusvelo) iban a ser protagonistas de la parte inicial de la etapa. Su renta no subió más de los 3:30 y a falta de 50 kilóemtros para la meta, el pelotón encabezado por Giant, Tinkoff y Sky empezó su persecución. Con caída incluída en el seno del grupo, pero los fugados fueron neutralizados en cuanto se afrontó el primer gran repecho de la jornada. A 38 kilómetros de meta el corte cabecero era historia.

Tras el descenso de esa primera cota, no puntuable, saltaron dos hombres. Sebastián Mascaró (Burgos BH) y Sander Helven (Topsport Vlaanderen-Baloise) intentaron deshacerse del control férreo del pelotón pero solo uno pudo hacerlo. El belga se marchó hacia adelante con potencia y fuerza, pero nada hacía presagiar un posible éxito del corredor flamenco. Llegó a tener más de 40 segundos de margen pero los constantes repechos acabaron con el a 18 kilómetros de la meta.

Sky no se fía

Aquí fue cuando empezó el baile. El viento y tensión no son amigos del ciclismo y cuando ambos factores se unen, suelen pasar cosas como lo ocurrido hoy en Hinojos. Sky llevó a los suyos hasta la parte delantera del grupo, algo se olían. Y bien que hicieron porque en los últimos diez kilómetros se produjeron hasta dos caídas masivas en el seno del pelotón. La segunda, especialmente numerosa, afectando a más de la mitad del grupo delantero. El equipo inglés puso una marcha más para evitar problemas, prueba de ello es la meta volante de Chucena, copada por ciclistas de Sky en sus primeras plazas.

Tensión, viento y caídas

La caída más grave sucedió a solo tres kilómetros de la meta, afectando a hombres como Juanjo Lobato (Movistar Team) y John Degenkoln (Giant-Alpecin) que, en teoría, iban a pugnar por la etapa. Otros afectados fueron Bauke Mollema (Trek Factory Racing), Jurgen Van den Broeck (Lotto-Soudal), Laurens Ten Dam (LottoNL-Jumbo) o David Arroyo (Caja Rural).

Al final, con el pelotón partido en mil pedazos, el más hábil fue Pim Ligthart (Lotto-Soudal). El neerlandés saltó del grupo cabecero a falta de unos dos kilómetros y pudo mantener un buen hueco en ese repecho que daba acceso a la meta. Supo contemporizar y consiguió imponerse en la meta de Hinojos picando dos segundos al grupo principal, encabezado por Fabio Silvestre (Trek Factory Racing) y Grega Bole (CC Polkowice). Ni rastro de Degenkolb (hizo 11º), Lobato o Farrar entre las primeras posiciones. Las caídas les habían afectado en mayor o menor medida para que no pudieran estar disputando la victoria.